Los concejales trataron ayer el proyecto de Presupuesto 2017 en la comisión de Hacienda, a tres meses de que finalice el año. La disputa entre los miembros del oficialismo y de la oposición al intendente, Germán Alfaro, giró ayer en torno la capacidad de la Intendencia de reasignar partidas sin consultar al Concejo.
La Secretaría de Hacienda y Presupuesto de la Municipalidad estimó en $ 4.353 millones el total de erogaciones que dispone la gestión de Alfaro este año. Implica un incremento de $1.065 millones respecto a los $3.288 millones del presupuesto de 2016 (es decir, una suba del 32%). “No habrá ampliaciones presupuestarias, creemos que la previsión es correcta con todas las obras que se están realizando. El Ejecutivo Municipal cumplió al enviar el proyecto hace 10 meses, no se trató por equis motivo”, explicó el secretario de Hacienda municipal, Cristian Abel. El funcionario afirmó que la ejecución del presupuesto 2016 (se utiliza ese instrumento hasta que se apruebe el de 2017) se ejecutó hasta el 75%.
“Discutimos el presupuesto y hemos tenido un 95% de acuerdo entre los diferentes miembros del bloque. Hay algunas discrepancias que podemos solucionarlas antes de llegar al recinto, en Labor Legislativa. Dependerá del cuerpo si se convocará a una sesión antes o después del 22 de octubre (la fecha de las elecciones). Va terminando la película del presupuesto”, consideró el radical Agustín Romano Norri.
Romano Norri, Raúl Pellegrini y Roberto Ávila (Acuerdo para el Bicentenario - Cambiemos) firmaron el dictamen de mayoría, para llevar el proyecto de Presupuesto sin mayores modificaciones al recinto. El presidente de la comisión, José María Franco (Restauración Peronistas), y David Mizrahi (Tucumán Crece-PJ, alineado a la Provincia) firmaron un dictamen en minoría, donde eliminan los superpoderes: la posibilidad de que la Intendencia redefina el destino de ciertas partidas sin necesidad de que el Concejo lo apruebe.
“Tenemos la voluntad de acompañar a la gestión municipal en los cálculos que ellos hacen, pero tenemos diferencias respecto a la aplicación de ciertos recursos. Vemos edificios como la Dirección de Tránsito, el Concejo o la Asistencia Pública que necesitan de refacciones urgentes”, cuestionó Mizrahi. El peronista puso en duda la transparencia de los gastos municipales: “hay algunos recursos en los que nos parece que hay datos que no son ciertos, porque no tienen incrementos respecto a 2016. Por ejemplo, en Prensa y Difusión: vemos la tele y uno se da cuenta de la gran cantidad de publicidad. Esto nos lleva a pedir la supresión de los artículos que permiten al intendente reasignar partidas sin consultar al cuerpo. Creemos que el gasto que se haga debe estar previamente indicado en el presupuesto. Si se reasigna una partida y luego se aprueba tácitamente la Cuenta de Inversión, no se conocerá nunca el gasto”, consideró con escepticismo. El peronista renegó de que la publicidad oficial difunda actividades de la esposa del intendente, Beatriz Ávila (candidata a diputada nacional en la lista de Cambiemos), que no ocupa ningún cargo municipal.
Pellegrini defendió el proyecto remitido por la Intendencia. “Tiene dos características: es equilibrado y ambicioso. Porque el 50% de todos los gastos corresponde a la partida de personal y que destina una inversión en obras públicas de casi $ 950 millones. Las facultades delegadas a la intendencia aplican sólo a las asistencias financieras que reciba el municipio”, explicó el vicepresidente primero del cuerpo.
La de ayer fue la tercera convocatoria a la comisión de Hacienda para tratar el Presupuesto 2017 del mes. Las reuniones anteriores cayeron por falta de quórum: habían faltado los ediles de Cambiemos. Los peronistas resolvieron informar las ausencias al presidente del Concejo, Javier Aybar, para que se los sancione o se los reemplace. “Eso fue parte de la técnica legislativa. Como no respetaron un acuerdo entre todos los bloques, usaron el reglamento. Habíamos acordado no tratar el presupuesto para no contaminar una discusión técnica de recursos municipales con política electoral. Pero bueno, ya tuvimos una larga reunión, dictaminamos y apoyaremos en el proyecto que creemos más adecuado”, comentó Ávila. El macrista aseguró que la idea original era aprobar el instrumento antes de las PASO. “Queremos que el presupuesto de 2018 se trate más temprano”, prometió el edil.
La proyección de gastos de 2016 se había aprobado en octubre pasado, cuando restaban dos meses y medio para que termine el año. Si bien los ediles habían confiado en que tratarían el presupuesto 2017 en la primera mitad de este año, el debate se postergó.