Silencio, tensión, tristeza y desconcierto, esos son los sentimientos que priman en Barcelona tras el atentado del jueves. Es que la gente sigue shockeada y no deja de rendir homenaje a las víctimas mientras intenta continuar con su vida habitual. Daniel Lescano, un tucumano que vive allí, cuenta cómo está la ciudad a dos días del ataque.
"La gente está muy triste. Está haciendo un esfuerzo muy grande para hacer vida normal", comenzó diciendo Lescano.
El tucumano -que vive hace 26 años en España- asegura que muchos catalanes todavía no cayeron en lo que sucedió y que les cuesta entender que haya pasado en un lugar tan tranquilo como lo es Cataluña: "hubo un impacto psicológico muy fuerte. Todos conocemos La Rambla, todos pasamos por ahí alguna vez. Los que nos salvamos no podemos dejar de pensar que también éramos el objetivo".
"¡No tengo miedo!", el conmovedor grito que resonó en el centro de Barcelona
Además comenta que a partir del atentado comenzaron a hacerse marchas contra el islám, cosa que antes no ocurría, ya que la sociedad integraba mucho a las personas de otras religiones o países. "Ahora todo está muy sensible. Todos están muy nerviosos e irritados", comentó.
Según cuenta Lescano, la Policía lleva a cabo -desde el jueves- la "operación jaula" para encontrar al terrorista que continúa prófugo: "en el procedimiento se cierran todas las salidas y entradas a la ciudad y hasta no se permiten mover los autos, para que la gente no se escape".
"Las investigaciones permitieron desarmar la célula que preparó el ataque. Si bien hubo muertos, se conoció que algo les salió mal (a los terroristas) porque si se hubiera dado como lo tenían planeado Barcelona habría sido una carnicería", agregó.
El tucumano radicado en España menciona que la célula estaba compuesta por menores de entre 17 y 22 años que jugaban al fútbol, estudiaban y hacían una vida muy normal: "los que los conocían dijeron que no tenían ningun actitud extremista". La Polcía extendió el rango de búsqueda hasta Francia, dónde creen que podría estar el último terrorista vinculado al ataque.