Tras enterarse de la protesta que llevaban adelante los choferes de las líneas 101 y 107, el intendente de Las Talitas, Carlos Najar, tomó dos medidas. Por un lado, convocó al gremio de UTA a una reunión, y por otro, pidió un resarcimiento económico para los usuarios que se quedaron sin servicio durante la primera mañana.
Najar le envió una carta documento al secretario de Transporte de la Provincia, Benjamín Nieva. “En virtud de la medida de fuerza realizada por las empresas 101 (El Galgo) y 107 (El Ceibo), que hoy dejaron de prestar servicio de 6 a 11 aduciendo razones de seguridad, solicito que se aplique a dichas empresas sanciones pecuniarias (cinco días de no cortar boletos, de lunes a viernes, de 6 a 11) por los daños y perjuicios ocasionados a los usuarios del servicio”, reclamó el intendente.
Luego recibió en su despacho a representantes de UTA, encabezados por César González. “Lo que necesiten para el trabajador asaltado y su familia, cuenten con eso”, les expresó Najar al principio del encuentro. González, por su parte, expuso la situación que les toca vivir en ciertos sectores del municipio. “Ya no sabemos qué tenemos que hacer para solucionar este inconveniente. Se están tornando muy ofensivos los hechos que están sufriendo los choferes”, remarcó.
El representante de UTA enumeró todas las medidas que se tomaron hasta el momento, que incluyen reemplazar cospeles por tarjetas magnéticas e instalar botones antipánico. “El botón antipánico funciona a la perfección pero hay un tiempo desde que se acciona hasta que llega la Policía y hasta eso los delincuentes se escapan”, planteó.
Para llevar una solución, el intendente Najar propuso trasladar a la Línea 107 la misma medida que se había tomado en su momento -y aún sigue vigente- con la 101. “Se acordó que a partir de hoy (por ayer) contrataremos un policía con fondos municipales, con la modalidad de servicio adicional, para hacer la cobertura en los horarios y puntos críticos donde los mismos choferes están manifestando que necesitan presencia”, anunció.