22 Junio 2017
El gobernador, Juan Manzur, rechazó las acusaciones del intendente de la capital, Germán Alfaro (ApB-Cambiemos), quien había asegurado que el Tribunal de Cuentas (TC) actúa “en connivencia” con el mandatario provincial.
“El TC es un organismo de contralor que tiene rango constitucional. Es otro poder del Estado y está para controlar. Si me pide un papel a mí, se lo tengo que dar. Están para eso. Hay que cumplir con lo que dicen las normas”, afirmó ayer Manzur, en rueda de prensa, tras lanzar la Escuela de Gobierno.
Esta semana tomó estado público una situación que generó cruces entre la capital y el Tribunal de Cuentas. El ente de contralor, a pedido de la Sindicatura General de la Nación (Sigen), lleva adelante auditorías en municipios y comunas para determinar el uso de los fondos federales percibidos en 2016 por esas administraciones. Al igual que su par de Concepción, el radical Roberto Sánchez (ApB-Cambiemos), el intendente Alfaro aceptó enviar documentación, pero rechazó someterse a la auditoría por razones de jurisdicción y aclaró que sólo efectuará las rendiciones ante los organismos federales. Además, aseguró que “Manzur y el TC actúan en connivencia”.
Ante una consulta de LA GACETA, el gobernador tomó distancia de la polémica. Advirtió que no tiene “nada que ver” y, en relación al rechazo a la auditoría, añadió: “eso no se puede hacer”. “A mí a veces el TC me dice: ‘esto, así, no’, y lo acepto, porque ellos tienen que cumplir con su función. Hay que ser respetuosos de las instituciones”, lanzó.
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