Hubo unanimidad, pero afloraron los viejos rencores

Por unanimidad, la Legislatura ratificó el decreto del gobernador, Juan Manzur, mediante el que se asignan los $50 millones que giró la Nación a la reparación de los caminos afectados por las inundaciones en el sur provincial. Más allá del acuerdo parlamentario, hubo reproches del oficialismo local hacia el macrismo, por la supuesta falta de asistencia luego del temporal, ocurrido a fines de marzo y principios de abril

“Los tiempos de los que sufren son distintos de los tiempos de quienes tienen la obligación de brindar una solución. Estamos en junio, y si bien desde la Provincia se han tomado todas las decisiones con la celeridad del caso, es necesario contar con recursos suficientes frente a los daños que se han producido”, planteó el ex intendente de Concepción, Osvaldo Morelli. El radical Rubén Chebaia, incluso, comprendió que la urgencia ameritaba que se eludiera el llamado a licitación para ejecutar las obras, pero lanzó una advertencia. “Entiendo que no se puede llamar a licitación, porque demoraría mucho tiempo, pero hay una cuestión y lo hago como una observación: el artículo seis dice que los proveedores que resulten adjudicatarios estarán eximidos de la presentación del certificado de cumplimiento fiscal. Esta Cámara ha votado una moratoria generosa y amplia en la sesión pasada”, recordó. Su correligionario José María Canelada también advirtió sobre falencias en el decreto. “Está plagado de señales de alerta; no entiendo la eximición del pedido del certificado de registro de obras públicas. Hemos visto lo que pasa cuando los controles se relajan”, alertó.

El decreto ratificado destina los $ 50 millones a la reparación de caminos y rutas y a la compra de los bienes necesarios para su ejecución. Además, prevé la creación de una comisión integrada por funcionarios que evaluará los daños causados por las inundaciones. Precisamente, otro radical, Luis González, consideró que se debería haber incorporado a algún representante legislativo en ese comité. El oficialismo, si bien aceptó la asistencia, consideró que es insuficiente. “Son realmente insuficientes para tamaño desastre que generaron estas inundaciones. Nos toman el pelo”, afirmó Eduardo Cobos. El bussista Claudio Viña coincidió con su par peronista. “Los fondos parecieran escasos para el daño registrado en la provincia”, planteó. No obstante, cuestionó que la iniciativa no haya sido analizada por la comisión de Hacienda, pese a que prevé una incorporación de recursos al Presupuesto. Ramón Santiago Cano, presidente del bloque Tucumán Crece, cuestionó que la Nación eluda al Gobierno al desembarcar con fondos. “Acá lo que se hace en muchos casos es saltearlo al Gobierno de la Provincia para hacer política, están haciendo política. ¿Hay que ser de Cambiemos para tener beneficios?”, ironizó el ex concejal capitalino.

El presidente subrogante de la Cámara, Julio Silman, reprochó las prioridades del macrismo; puntualmente, el excesivo endeudamiento y la falta de inversión en obras públicas. “Estamos a pocos meses de una elección; las cosas hay que decirlas”, expresó. “Estos $ 50 millones son una colcha corta, pero hay que ser agradecidos porque al menos tuvieron la deferencia de mandarnos algo. Este Gobierno nacional se llenaba la boca hablando de federalismo”, arremetió el vicepresidente primero de la Cámara, Guillermo Gassenbauer.

Sucedió el recinto

Por unanimidad, hasta...- Los legisladores venían aprobando todos los proyectos por unanimidad. Desde los más polémicos, como el DNU sobre los $ 50 millones, hasta los de mayor consenso, como el programa de distinción a las campañas de toda índole cuyo fin sea promover la erradicación de la violencia contra la mujer (propuesta del radical Fernando Valdez). El clima amistoso se acabó tras el cierre del orden del día original. Cuando se pasó a los asuntos propuestos sobre tablas, los gritos resonaron en el recinto. La alperovichista Silvia Rojkés, de la comisión de Cultura, defendió un proyecto del PE que establecía el pase de la obra “Tina, el rumor de una Nación” a la órbita del Teatro Mercedes Sosa, ya que el Ente del Bicentenario -de donde depende- caducó en sus funciones. Los opositores Stella Maris Córdoba, Ariel García, José Canelada y Fernando Valdez, entre otros, objetaron que el texto no hubiera sido propuesto en la comisión de Labor Parlamentaria. Ante esto, el presidente del bloque oficial, Ramón Santiago Cano, impulsó la suspensión del tratamiento del texto en cuestión. Rojkés no tomó a bien la decisión. Al final, todos los temas que iban a ser tratados a partir de allí fueron postergados hasta la próxima sesión.