05 Mayo 2017
Obama, judíos y musulmanes respaldan a Macron
El candidato liberal recibió además la adhesión de protestantes, mientras que la ultraderechista Le Pen sumó el apoyo de políticos populistas La dirigente tendría un 40% de intención de voto para el balotaje del domingo. El economista, con el 60% de apoyo, se perfila como el favorito. Las minorías quieren al liberal
ELEGIR. Carteles oficiales de los candidatos, colocados en Fontaines-sur-Saone (Lyon), invitan a votar el domingo. Reuters
PARÍS.- El liberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen, que se disputan el domingo la Presidencia de Francia, reivindicaron ayer sus diametrales proyectos en sus últimos actos de cierre de campaña.
Le Pen, a la que otorgan una intención de voto del 40 % -frente al 60 % de Macron-, dijo que se erigió “como la portavoz del enfado del pueblo frente al abandono en que se lo ha dejado”. Macron, un ex banquero de 39 años ex ministro de Economía del gobernante Partido Socialista (PS) entre 2014 y agosto 2016, apostó por “la cohesión social” y “la lucha contra las injusticias” como sus ejes.
En sintonía con la necesidad de fijar posiciones políticas, el ex presidente estadounidense Barack Obama apoyó la candidatura del candidato presidencial francés de centro, de quien dijo que “apela a las esperanzas de la gente y no a sus temores”.
Se trata del último de una serie de apoyos internacionales para el político europeísta. “No preveo involucrarme en muchas elecciones ahora que no tengo que presentarme yo de nuevo”, dijo Obama en un mensaje de video publicado en la cuenta de Twitter de Macron. “Pero la elección francesa es muy importante para el futuro de Francia y los valores que tanto nos importan, porque el éxito de Francia le importa a todo el mundo”, dijo.
Macron cuenta con el apoyo de políticos de centro-derecha y centro-izquierda como el ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel; la alta representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, y el primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen.
Le Pen, por su parte, cuenta con el apoyo de líderes populistas y de extrema derecha como el jefe del Partido de la Libertad austríaco, Heinz-Christian Strache, y Nigel Farage, quien promocionó el “Brexit” en el Reino Unido.
Los excluidos
Altos representantes de las minorías judía, musulmana y protestante en Francia lanzaron un llamamiento conjunto para pedir el voto por el candidato centrista en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales que se celebrarán el domingo. “Nada viene antes que la paz y sólo un voto republicano por Macron garantizará una Francia fortalecida por toda su historia y confianza en su futuro, así como su capacidad para alumbrar al mundo”, señalaron los líderes religiosos. El llamamiento está firmado por el presidente de la Federación Protestante de Francia, Francois Clavairoly; el del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM), Anouar Kbibech, y el Gran Rabino de Francia, Haim Korsia.
Representantes de los tres grupos religiosos habían pedido anteriormente el voto para Macron para evitar que su rival, la líder del ultraderchista Frente Nacional llegue al poder. Sin embargo, la Iglesia católica, la mayor entidad religiosa en el país con mucha diferencia, se ha negado a tomar una posición clara, pese a que varios obispos católicos han pedido un voto contra Le Pen.
El Holocausto
Le Pen ha argumentado reiteradamente que “Francia sufre una ola de fundamentalismo islámico”. También indignó a los judíos del país al decir que “Francia, como nación, no es responsable de la detención de judíos en tiempos de guerra”, que fueron arrestados por la Policía francesa para ser después deportados a campos de exterminio alemanes.
Sin embargo, mostró dureza con los negacionistas del Holocausto dentro del Frente Nacional. Incluso su padre, el fundador del partido Jean-Marie Le Pen, fue expulsado de la formación política por sus repetidos comentarios minimizando el Holocausto. (Télam-DPA)
Le Pen, a la que otorgan una intención de voto del 40 % -frente al 60 % de Macron-, dijo que se erigió “como la portavoz del enfado del pueblo frente al abandono en que se lo ha dejado”. Macron, un ex banquero de 39 años ex ministro de Economía del gobernante Partido Socialista (PS) entre 2014 y agosto 2016, apostó por “la cohesión social” y “la lucha contra las injusticias” como sus ejes.
En sintonía con la necesidad de fijar posiciones políticas, el ex presidente estadounidense Barack Obama apoyó la candidatura del candidato presidencial francés de centro, de quien dijo que “apela a las esperanzas de la gente y no a sus temores”.
Se trata del último de una serie de apoyos internacionales para el político europeísta. “No preveo involucrarme en muchas elecciones ahora que no tengo que presentarme yo de nuevo”, dijo Obama en un mensaje de video publicado en la cuenta de Twitter de Macron. “Pero la elección francesa es muy importante para el futuro de Francia y los valores que tanto nos importan, porque el éxito de Francia le importa a todo el mundo”, dijo.
Macron cuenta con el apoyo de políticos de centro-derecha y centro-izquierda como el ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel; la alta representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, y el primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen.
Le Pen, por su parte, cuenta con el apoyo de líderes populistas y de extrema derecha como el jefe del Partido de la Libertad austríaco, Heinz-Christian Strache, y Nigel Farage, quien promocionó el “Brexit” en el Reino Unido.
Los excluidos
Altos representantes de las minorías judía, musulmana y protestante en Francia lanzaron un llamamiento conjunto para pedir el voto por el candidato centrista en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales que se celebrarán el domingo. “Nada viene antes que la paz y sólo un voto republicano por Macron garantizará una Francia fortalecida por toda su historia y confianza en su futuro, así como su capacidad para alumbrar al mundo”, señalaron los líderes religiosos. El llamamiento está firmado por el presidente de la Federación Protestante de Francia, Francois Clavairoly; el del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM), Anouar Kbibech, y el Gran Rabino de Francia, Haim Korsia.
Representantes de los tres grupos religiosos habían pedido anteriormente el voto para Macron para evitar que su rival, la líder del ultraderchista Frente Nacional llegue al poder. Sin embargo, la Iglesia católica, la mayor entidad religiosa en el país con mucha diferencia, se ha negado a tomar una posición clara, pese a que varios obispos católicos han pedido un voto contra Le Pen.
El Holocausto
Le Pen ha argumentado reiteradamente que “Francia sufre una ola de fundamentalismo islámico”. También indignó a los judíos del país al decir que “Francia, como nación, no es responsable de la detención de judíos en tiempos de guerra”, que fueron arrestados por la Policía francesa para ser después deportados a campos de exterminio alemanes.
Sin embargo, mostró dureza con los negacionistas del Holocausto dentro del Frente Nacional. Incluso su padre, el fundador del partido Jean-Marie Le Pen, fue expulsado de la formación política por sus repetidos comentarios minimizando el Holocausto. (Télam-DPA)
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