Video: este es el hombre que irrumpió en la conferencia de prensa de los jefes de la CGT
La conferencia de prensa que brindó la cúpula de la CGT esta tarde para evaluar el alcance del paro nacional de hoy se vio interrumpida por un hombre que comenzó a increpar al triunvirato compuesto por Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña.
Tras la sorpresa que generó la intervención del hombre, se supo que se trataba del padre de un chico asesinado por una patota a la salida de un boliche en 2014. En tono desesperado, el hombre reclamó que los dirigentes de la central obrera lo acompañen en el pedido de esclarecimiento de la muerte de su hijo. “Yo los acompaño en esta lucha, pero ¿Cuándo nos vamos a ocupar de los chicos que mueren? Cuándo la Confederación General del Trabajo va a luchar para que no maten a nuestros hijos. Por favor. Mataron a mi hijo. Cuando matan a un chico matan cientos de trabajadores”, dijo el hombre a los jefes de la CGT.
El hombre habló varios minutos y fue interrumpido por Schmid, quien le dijo que la CGT reclama la reducción de la pobreza y que eso redundará en una mejora de la seguridad pública.
Marcelo Novillo, de él se trata, es el padre de Adrián Novillo, que fue asesinado el 14 de junio de 2014 a golpes por una patota a la salida de un boliche bailable en Quilmes. El joven tenía 16 años y no hay detenidos por ese crimen.
El hombre suele irrumpir en actos públicos en los que hay cobertura en vivo de canales de televisión para hacer conocer su reclamo de justicia. En la marcha del 24 de marzo de este año se subió al palco de Abuelas de Plaza de Mayo, en Buenos Aires, para denunciar el congelamiento de la causa judicial. Un mes antes, trepó por los andamios hasta la cúpula de la confitería El Molino, frente al Congreso, y amenazó con tirarse. Eso mismo había hecho en 2015, un año en el que se encadenó en 2015 a la reja que rodea la Casa Rosada e interrumpió una conferencia de prensa del ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández. Además, se apostó varias veces frente a los tribunales de Quilmes para pedir que encarcelen a acusados por la muerte de su hijo.