03 Abril 2017
OPERACION ROSARIO. Una escena de la obra dirigida por el fotógrafo Walter Flores. Atrás se ve la casa del gobernador de las islas. la gaceta / fotos de diego aráoz
El desembarco de las tropas argentinas en la madrugada del 2 de abril de 1982 se recreó ante los ojos emocionados de más de 1.500 personas, anoche, en Tafí Viejo. El humo artificial del escenario de césped le daba un toque onírico a las figuras de los soldados que se desplazaban, sigilosos, en la oscuridad, mientras se escuchaba el silbido del viento. La multitud contiene la respiración. Son muchos los que en la representación realizada en el club Villa Mitre, de Tafí Viejo, conocieron en qué consistió el Operativo Rosario, la primera operación táctica para la recuperación de las islas Malvinas de la que ayer se cumplieron 35 años.
Con el Himno Argentino y la Marcha de las Malvinas comenzó el acto que contó con la participación de más de una decena de ex combatientes con sus uniformes de combate. Diez abanderados de escuelas e instituciones de Tafí Viejo coronaron la ceremonia presidida por el intendente Javier Noguera, y organizada conjuntamente con el Centro de Estudios Patrióticos. Le siguió un minuto de silencio por los héroes, sólo acompañado por los clarines de la banda de música municipal.
También se leyó un decreto de adhesión de la Legislatura. Varios artistas de taficeños participaron en el armado de la utilería y los alumnos de la Academia General Belgrano, dedicada a la preparación de los ingresantes a las Fuerzas Armadas, actuaron como soldados de las tropas argentinas. La escenificación fue dirigida por el fotógrafo y camarógrafo Walter Flores, y el guión se realizó en base a los recuerdos del suboficial retirado José Ramón Cardillo, presente y homenajeado durante el acto. También se encontraban en la ceremonia otros ex combatientes como suboficial retirado de infantería de Marina José Alberto Ortega, que vino de Salta.
En aquel momento, el suboficial Cardillo tenía 31 años, era suboficial segundo de la Agrupación Buzos Tácticos con asiento en base naval Mar del Plata. Su misión era tomar la casa del Gobernador junto a la Patrulla del capitán de corbeta Pedro Edgardo Giachino, que fue la única baja mortal del enfrentamiento. Habían logrado una operación exitosa y sin derramamiento de sangre del enemigo, como habían sido las instrucciones de los comandantes argentinos. En pantalla gigante se proyectaban tramos del relato de Cardillo sobre aquella operación y una larga poesía de Rosario Vildoza. El acto comenzó una hora después de lo previsto a causa de la lluvia. Pero apenas reiniciada la ceremonia volvió a llover, aunque esta vez nadie se movió de su sitio. Luego de rendir homenaje al taficeño José Luis Salazar y al cabo primero Oscar Alberto Quipildor fallecido en el hundimiento del Crucero Belgrano, se izó la bandera y se cantó la marcha de Malvinas.
Con el Himno Argentino y la Marcha de las Malvinas comenzó el acto que contó con la participación de más de una decena de ex combatientes con sus uniformes de combate. Diez abanderados de escuelas e instituciones de Tafí Viejo coronaron la ceremonia presidida por el intendente Javier Noguera, y organizada conjuntamente con el Centro de Estudios Patrióticos. Le siguió un minuto de silencio por los héroes, sólo acompañado por los clarines de la banda de música municipal.
También se leyó un decreto de adhesión de la Legislatura. Varios artistas de taficeños participaron en el armado de la utilería y los alumnos de la Academia General Belgrano, dedicada a la preparación de los ingresantes a las Fuerzas Armadas, actuaron como soldados de las tropas argentinas. La escenificación fue dirigida por el fotógrafo y camarógrafo Walter Flores, y el guión se realizó en base a los recuerdos del suboficial retirado José Ramón Cardillo, presente y homenajeado durante el acto. También se encontraban en la ceremonia otros ex combatientes como suboficial retirado de infantería de Marina José Alberto Ortega, que vino de Salta.
En aquel momento, el suboficial Cardillo tenía 31 años, era suboficial segundo de la Agrupación Buzos Tácticos con asiento en base naval Mar del Plata. Su misión era tomar la casa del Gobernador junto a la Patrulla del capitán de corbeta Pedro Edgardo Giachino, que fue la única baja mortal del enfrentamiento. Habían logrado una operación exitosa y sin derramamiento de sangre del enemigo, como habían sido las instrucciones de los comandantes argentinos. En pantalla gigante se proyectaban tramos del relato de Cardillo sobre aquella operación y una larga poesía de Rosario Vildoza. El acto comenzó una hora después de lo previsto a causa de la lluvia. Pero apenas reiniciada la ceremonia volvió a llover, aunque esta vez nadie se movió de su sitio. Luego de rendir homenaje al taficeño José Luis Salazar y al cabo primero Oscar Alberto Quipildor fallecido en el hundimiento del Crucero Belgrano, se izó la bandera y se cantó la marcha de Malvinas.