Cuando la pasión manda, las distancias se achican. Esa regla la conocen bien los hinchas de Atlético que viajarán a Ecuador para alentar a los de Pablo Lavallén en la revancha de la fase 2 de la Copa Libertadores 2017. Si en algo coinciden todos es en que "hay que estar". Cueste lo que cueste. Es por eso que un grupo de fanáticos afrontarán una expedición terrestre para acompañar al "Decano" en el mejor momento de su historia.
La organización lleva su tiempo porque no es fácil pasar por tres países para verlo a Atlético. "Viajo siempre, desde la década de 1990. Ya tenemos una experiencia internacional, que fue la Copa Bimbo en Uruguay (2013). Fui a dedo con $800, cuando sólo el pasaje de ida costaba $1.200", comenta Delia Zárate, quien realizará artesanías durante el viaje para reducir los costos de esta aventura que sólo la hace por Atlético.
Cuando el sorteo determinó que el "Decano" debía viajar a la capital ecuatoriana, Delia y su novio comenzaron a armar la ruta de viaje. "Queríamos conocer Perú. De ahí llegaremos a Quito como sea. Vamos a tratar de ir en colectivo y otra parte a dedo. Me perderé el primer partido para ir con tiempo; quiero asegurarme de llegar a Ecuador. De local estamos todos, lo importante es estar de visitante y hacernos sentir".
Un viaje entre amigos
Pablo Heredia, Jorge Córdoba y Gonzalo Ávila se hicieron amigos gracias a Atlético y no quisieron dejar pasar la oportunidad de recorrer 4.600 kilómetros para estar el martes 7 de febrero en el Estadio Olímpico Atahualpa. "Los sueños están para cumplirse y estamos a un pasito de hacerlo realidad. Todavía no lo podemos creer", comenta Pablo y agrega: "salimos el miércoles a las 3 de la mañana, después del partido de ida".
Jorge, al que conocen como "Goma", detalla que el gasto aproximado por persona para llegar al Atahualpa será de $3.000, incluyendo viaje, estadía y comida: "iremos hasta La Quiaca. De ahí pasaremos a Bolivia, donde pararemos en La Paz y Desaguadero. En Perú descansaremos en Arequipa y Lima. De ahí ya pasaremos a Ecuador, el lunes haremos playa en algún lado y de ahí viajaremos a Quito para ver el partido". "Siempre fuimos determinados para los viajes, nuestras familias ya están acostumbrados. Por ahí nos reclaman el tema de la ruta, que es un peligro, más teniendo en cuenta la cantidad de kilómetros que hay hasta Ecuador. Pero todo lo que hacemos es por Atlético", añade.
Por su parte, Gonzalo anticipa que los "decanos" llevarán el carnaval a tierras ecuatorianas: "Soy parte de la murga 'Los Pitucos de 25' y llevaremos bombos y trombón para ir alegrando el viaje. Seguramente nos vamos a encontrar con mucho celeste y blanco en el camino. Allá habrá mucha gente de Atlético".
En auto, con el viejo
Lucas Tejerina Temkin
y su padre, Julio Tejerina, organizaron su viaje para hacerlo en auto. ¡Sí, 4.600 kilómetros en auto! Serán, por lo menos, unas 96 horas de manejando. "Mi papá siempre me acompañó y ahora no se iba a quedar afuera. Buscamos la manera de hacerlo como fue nuestra costumbre, en auto. Estamos muy contentos porque es una oportunidad única para el club y de paso aprovecharemos para ir conociendo lugares. Es el primer viaje que tenemos fuera del país viéndolo a Atlético. Antes fuimos por todo el país, pero sólo él manejaba. Ahora lo ayudaré", comenta Lucas.
"Con mi viejo siempre soñamos con ver a Atlético en lo más alto. Este momento es una realidad y hay que aprovecharlo. Sabemos que es el comienzo de algo nuevo. Tenemos mucha fe, aparte del cariño que nos lleva a hacer todas estas locuras", concluye el joven que ya se imagina alentando en el Atahualpa.