24 Enero 2017
La decisión del Gobierno de Estados Unidos de aplazar por 60 días la decisión final para admitir las importaciones de limones tucumanos, generó incertidumbre y sorpresa entre los citricultores que esperan con ansias volver a importar su producción a ese país.
El titular de la Asociación Tucumana de Citrus, Roberto Sánchez Loria, expresó que desconoce los motivos por los cuales el Gobierno norteamericano tomó esa medida. “La verdad es que estoy preocupado. Este escenario genera incertidumbre. No sabemos qué pasará después de los 60 días de plazo”, explicó. “Habrá que tener paciencia. No quiero hacer especulaciones”, añadió. El dirigente sostuvo que esta medida se trata de una restricción provisoria. “Puede ser de orden administrativo por el cambio de gobierno”, indicó.
Sánchez Loria afirmó que lo único que está a su alcance es pedir información al Ministerio de Agroindustria y a la Embajada argentina en Estados Unidos. “Mientras tanto, los productores estamos trabajando para exportar a otros mercados fuertes como los de países europeos”, agregó.
“Dudo que haya alguna razón técnica. De hecho, no habíamos empezado con las exportaciones de limón fresco. Ahora con esta traba tendremos que esperar hasta fines de marzo”, concluyo Sánchez Loria.
El productor Luis Rico, directivo de la empresa Early Crop, dijo que recibió la noticia con sorpresa. “Hay que esperar y ver cómo se desenvuelve el tema”, opinó.
El citricultor manifestó que en caso de prohibirse la entrada del limón a Estados Unidos, no generaría un gran impacto económico en el corto plazo al sector.
José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), se diferenció de los otros dirigentes e incluso se mostró optimista sobre la resolución del caso. Dijo que el anuncio del Gobierno estadounidense era algo esperable. “Conservo plena confianza en que obtendremos una resolución favorable”, afirmó.
Carbonell transmitió tranquilidad. “A lo largo de los últimos 15 años la citricultura argentina hizo todo lo necesario para lograr formalidad comercial e inocuidad fitosanitaria para imposibilitar la transmisión de alguna enfermedad”, argumentó. “Estados Unidos se ha convertido en un importador de limón. Cualquiera sea la cantidad que exportemos, no afectará a los productores californianos”, precisó. Carbonell señaló que la variedad de limón que se produce en Tucumán fue ganando terreno en muchos mercados.
En los últimos años, el volumen de producción de limón osciló entre las 280.000 y 300.000 toneladas anuales. Mientras que el volumen que se estimaba exportar al nórdico país en la reapertura de las relaciones comerciales era de 15.000 a 20.000 toneladas.
El titular de la Asociación Tucumana de Citrus, Roberto Sánchez Loria, expresó que desconoce los motivos por los cuales el Gobierno norteamericano tomó esa medida. “La verdad es que estoy preocupado. Este escenario genera incertidumbre. No sabemos qué pasará después de los 60 días de plazo”, explicó. “Habrá que tener paciencia. No quiero hacer especulaciones”, añadió. El dirigente sostuvo que esta medida se trata de una restricción provisoria. “Puede ser de orden administrativo por el cambio de gobierno”, indicó.
Sánchez Loria afirmó que lo único que está a su alcance es pedir información al Ministerio de Agroindustria y a la Embajada argentina en Estados Unidos. “Mientras tanto, los productores estamos trabajando para exportar a otros mercados fuertes como los de países europeos”, agregó.
“Dudo que haya alguna razón técnica. De hecho, no habíamos empezado con las exportaciones de limón fresco. Ahora con esta traba tendremos que esperar hasta fines de marzo”, concluyo Sánchez Loria.
El productor Luis Rico, directivo de la empresa Early Crop, dijo que recibió la noticia con sorpresa. “Hay que esperar y ver cómo se desenvuelve el tema”, opinó.
El citricultor manifestó que en caso de prohibirse la entrada del limón a Estados Unidos, no generaría un gran impacto económico en el corto plazo al sector.
José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), se diferenció de los otros dirigentes e incluso se mostró optimista sobre la resolución del caso. Dijo que el anuncio del Gobierno estadounidense era algo esperable. “Conservo plena confianza en que obtendremos una resolución favorable”, afirmó.
Carbonell transmitió tranquilidad. “A lo largo de los últimos 15 años la citricultura argentina hizo todo lo necesario para lograr formalidad comercial e inocuidad fitosanitaria para imposibilitar la transmisión de alguna enfermedad”, argumentó. “Estados Unidos se ha convertido en un importador de limón. Cualquiera sea la cantidad que exportemos, no afectará a los productores californianos”, precisó. Carbonell señaló que la variedad de limón que se produce en Tucumán fue ganando terreno en muchos mercados.
En los últimos años, el volumen de producción de limón osciló entre las 280.000 y 300.000 toneladas anuales. Mientras que el volumen que se estimaba exportar al nórdico país en la reapertura de las relaciones comerciales era de 15.000 a 20.000 toneladas.
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