Entender el mensaje y llevarlo a cabo es el último gran paso, esa es la realidad de Atlético

Es el turno del regreso, de volver a Ojo de Agua y recordar que el descanso pos pretemporada, casi tan largo como dos días seguidos, fue una caricia al alma por parte del entrenador Pablo Lavallén hacia sus jugadores.

Pero todo eso será parte del pasado hoy, porque el presente y el futuro inmediato hablan como disco rayado de la fase 2 de la Copa Libertadores, de la serie con El Nacional, de Ecuador; del partido de ida, el próximo martes 31, y de cuánto Atlético sueña con rozar la perfección futbolística para superar esta complicada misión de 180 minutos.

Hay esquema nuevo, ideas nuevas en cancha, como el 4-3-3 que contra Independiente mutó de a ratos a 4-3-1-2, convirtiéndose Luis Rodríguez en el eslabón de la cadena de ayuda a los delanteros. “Nuestro deseo es seguir ultimando detalles y entender rápido el mensaje. Apuntamos a llegar en óptimas condiciones”, dice “Pulguita”, quE reconoció haberse sentido, al igual que los 22 futbolistas que estuvieron en el “Padre Ernesto Martearena”, algo impreciso con el balón. Es normal. “Y sí, fue un partido de pretemporada, pero llegaremos bien al importante. Hay que manejar la pelota de la mejor manera. Son clave los primeros 90 minutos de la serie”, acepta el de Simoca. En el Monumental, el “Decano” puede abrirse camino hacia la fase 3, o cerrárselo.

Por eso, esta semana de trabajo tendrá un sabor diferente. Suena a recta final, pese a que en el medio esté Racing (viajarán suplentes). En lo único que se piensa en Atlético es en El Nacional. Y punto.