Investigan el asalto al técnico de Los Pumas

“Me empujaba con la pistola entre la ceja y el ojo. Pensé que gatillaba”. La red social Facebook fue el lugar elegido por Daniel “Huevo” Hourcade, el técnico de Los Pumas, para contar el asalto que sufrió el viernes a la noche cerca de su casa, en Barrio Sur. A propósito de este caso, la Policía informó que están investigando el robo para encontrar a los delincuentes.

Una alta fuente de la fuerza informó a LA GACETA que Hourcade no realizó la denuncia por el robo, por lo que la investigación se encaró de oficio. En las últimas horas se analizaron las cámaras de seguridad de la zona de General Paz y Moreno, y se habló con vecinos para saber si podían aportar algún dato. Por el momento no se pudo individualizar a los asaltantes, pero se informó que los seguirán buscando. Los investigadores se mostraron optimistas en encontrarlos, como lo hicieron con el “Colorado de Bellavilla”, el ladrón de 24 años que a fines de septiembre amenazó con una pistola a una empleada de una panadería de Las Heras y Rondeau -a seis cuadras de donde asaltaron a Hourcade- y se robó $ 1.500.

“Estoy bien, gracias, (fue un) feo momento. Me pusieron una pistola en la cabeza. Querían plata. No tenía nada encima”, fue el relato del técnico de Los Pumas en la red social. Al cierre de esta edición, la publicación tenía cerca de 400 interacciones, entre comentarios y likes.

“Es una zona fea”

“Esta esquina se volvió fea como todas las zonas de esta ciudad. Hay robos y arrebatos, Lo peor es que no hay mucha luz en la General Paz pasando la Moreno, yendo hacia al este. Entonces nosotros tenemos miedo y ya no nos podemos sentar a la vereda como hacíamos antes. Y la avenida Sáenz Peña está peor todavía. No sólo hay delincuentes, también hay asesinos al volante que no respetan los semáforos”, explicó Verónica, una mujer que vive en las inmediaciones de la esquina.

“El miedo se ve clarito en la escuela (Monteagudo Soto). Los padres en verano se quedan charlando mientras sus hijos juegan. En invierno, cuando está más oscuro, apenas se saludan y salen corriendo” , razonó Angélica Mariani,

La esquina en cuestión es la misma que fue testigo de un intento de robo de $ 65.000 en mayo. Un vecino de la zona, Eduardo (no quiso dar su apellido en esa ocasión) contó que había sacado esa suma del Banco Patagonia y que dos motociclistas le quisieron quitar la bolsa en la que llevaba el dinero. La víctima redujo a uno de los asaltantes y el otro se dio a la fuga.