Brown avanza con mucho amor propio

Avanza a paso firme. Almirante Brown dio un gran paso hacia su objetivo. El equipo de San Isidro de Lules igualó 1 a 1 con Talleres de Perico (en el global se impuso 3 a 1) y obtuvo el pase a la semifinal del Federal B. El “Marino”, que jugó 62 minutos con un jugador menos por la expulsión de Cristian Ibarra, nunca bajó los brazos y remontó un parcial desfavorable por el gol de Maximiliano López, a los 31’. El arquero José Fernández, el zaguero Fernando Albornoz y los hermanos Adrián y Claudio Vega fueron piezas claves en el equipo que conduce Francisco Márquez. El empate llegó luego de una muy buena maniobra de los hermanos Vega. Adrián desbordó por izquierda, envío un centro preciso para Claudio, que definió ante la salida de Matías Llanos.

El partido finalizó en medio de incidentes provocados por los hinchas locales, que fueron reprimidos por la policía con bala de goma y gases lacrimógenos. Tras salir del estadio llegaron a Güemes y se subieron al micro para volver a Tucumán. Ahí fueron atacados con piedras que rompieron una ventanilla y los vidrieron hirieron al defensor Nicolás Gastaldi.

Central Norte o Mitre de Salta será el próximo rival de Brown.

Nada resultó sencillo para el plantel de Brown. Ni siquiera el viaje a Perico. Los “Marinos” tuvieron que realizar el viaje en dos tramos, ya que el ómnibus que lo llevó desde Tucumán lo dejó en Güemes por temor a que los hinchas de Talleres lo ataquen en Jujuy. Desde la ciudad salteña fueron en un colectivo local, custodiados por la Policía jujeña. “Fue un clima muy hostil el que se vivió. Tardaron en abrir el portón de ingreso al estadio y ahí donde nos arrojaron bombas de estruendo y botellas. Intentaron meternos miedo pero no pudieron”, contó el DT Francisco Márquez. “Dejamos todas nuestras pertenencias en Salta y llegamos al estadio sólo con la ropa para jugar”, explicó.