Los taxistas de Yerba Buena deben mejorar los autos para alejar a Uber

Son cuatro letras que a ellos se les han aparecido como un fantasma. Los taxistas de Yerba Buena anduvieron asustados esta semana, luego de que se enteraron que gente de Uber -una empresa internacional que proporciona a sus clientes una red de transporte privado, a través de su software de aplicación móvil- había estado con funcionarios de esa Municipalidad, con la intención de desembarcar allí. Después de días de rumores, los choferes se reunieron con el intendente, Mariano Campero. Al parecer, tras esa charla, el espectro se desvaneció.

“Él se puso de nuestro lado. Nos dijo que Uber no iba a entrar”, cuenta Marcelo Federico Verni, el dirigente de la Asociación de Taxistas Unidos del municipio, al término de ese encuentro, el jueves pasado. Pero para que eso ocurra, les puso una condición -según el relato de Verni-: que mejoren el estado de los autos y de los choferes. Además, acordaron intentar incorporar alguna aplicación a la que los usuarios puedan acceder a través de sus celulares, y que les indique por dónde circulan los vehículos, en tiempo real, y si se encuentran desocupados o con pasajeros.

Todos quieren

También Campero proporciona su versión de esa reunión. Para empezar, admite que hubo un contacto entre representantes de Uber y su director de Modernización, Alejandro Gray.

“Nuestra premisa es recibir a todos los inversores. Hay mucha gente interesada en esta ciudad”, cuenta. A modo de ejemplo, dice que hace poco oyeron una propuesta de McDonald’s, que evalúa la apertura de un Auto Mc, y que estuvieron con un enviado de Coca Cola.

En ese marco -prosigue- dialogaron con Uber. No obstante, por ahora no habrá ningún desembarque. “Hoy, si permitiese que Uber entre aquí, les generaría un perjuicio grave a los taxistas”, añade. Por ello, también él cuenta que les pidió que intenten mejorar su prestación. Entre esos requerimientos, les mencionó la incorporación de más paradas -especialmente en las zonas en desarrollo de Yerba Buena, como la avenida Perón-, las mejoras en los vehículos -como limpieza y aire acondicionado-, y la adopción de la mencionada aplicación.

“Es comprensible que les cueste mejorar, por la situación económica actual. Pero acordamos armar un plan para ejecutar en dos años. Les pedí que no se preocupen por Uber, sino por ser competitivos”, completa.

En deuda

Finalmente, hablaron sobre la ordenanza que regula la actividad. Los taxistas le reclaman a la Municipalidad que se actualice esa normativa, que se revisen las licencias otorgadas y que se elabore un padrón. “Aquí, nadie sabe a quién pertenece cada auto”, argumenta Verni. Justamente, el concejal Marcelo Rojas -de Cambiemos- asegura que hace dos días le mandó un mensaje a un funcionario de Campero, instándolo a avanzar, de modo conjunto, con la tarea.

“Tenemos que regular la actividad. El tema estaba siendo analizado por la comisión de obras y Servicios Públicos del Concejo, pero no ha avanzado”, agrega. En Yerba Buena, hay unas 700 licencias de taxis. Según Rojas, al menos la mitad presenta irregularidades. El proyecto de reforma del servicio debería incluir un reempadronamiento obligatorio y un control de la antigüedad y del estado de los vehículos, enumera.

El control y otorgamiento de los permisos es facultad de la intendencia, a través de su Dirección de Tránsito y Transporte.