Cinco razones para agregar yoga a tu rutina deportiva

Marjie Gilliam / The New York Times

DAYTON, Ohio.- Aunque muchas personas saben que el yoga puede provocar beneficios para la salud, no lo relacionan con una mejora en el desempeño atlético. Ryanne Cunningham, autor de “Yoga para atletas”, que saldrá en noviembre, señala cinco beneficios del yoga para el desempeño deportivo.

1- Recuperación muscular

El objetivo de la recuperación es liberar los músculos de los desechos que genera el cuerpo, como el ácido láctico, para permitir que la fibra se dispare de nuevo. Por su parte, una hidratación apropiada ayuda a enjuagar los restos de los deshechos del cuerpo, y una elongación apropiada de los músculos, como es enseñada en yoga, permite una restauración más rápida de los músculos. Además, la respiración profunda que se realiza en el yoga ayuda a oxigenar los músculos, permitiéndoles crear energía para quemar.

2- Prevención de lesiones

La falta de calentamiento, la torsión repentina o los movimientos rápidos que dañan las articulaciones; el desequilibrio de la fuerza y la dureza, o los músculos sobreentrenados, son las cinco principales razones por las que se generan lesiones cuando se hace deportes. El yoga enfatiza en elongar los músculos. Con esa práctica, se ayuda a disminuir la posibilidad de lesiones pues se mejora a flexibilidad.

3- Reduce el estrés, aumenta la concentración, alivia la tensión y promueve el sueño

Practicar una serie de movimientos y posturas centradas y respirar profundamente, como parte de las secuencias que se realizan cuando se hace yoga, disminuye el nivel de la hormona del estrés (cortisol), ayudando a que el atleta se sienta más relajado. Esas mismas técnicas se pueden usar antes de dormir.

4- Fortalece músculos en desuso

Cuando algunos músculos son entrenados constantemente más que otros, se produce un desequilibrio de la fuerza, algo que sucede muy seguido en la mayoría de las rutinas deportivas. Las poses del yoga se enfocan en todas las áreas del cuerpo, incluyendo músculos pequeños, como los de la muñeca, que muchas veces son los que se hacen cargo de buena parte de la fuerza y del trabajo.

5- Endurece el centro de tu cuerpo

El yoga trabaja todo el tronco del cuerpo, mejorando la postura y ayudando a proteger la parte baje de la espalda. El equilibrio necesario para sostener las posiciones y el estiramiento requieren el trabajo de los músculos más profundos del cuerpo. Todas las partes del core –parte del abdomen y parte baja de la espalda- tienen que ser fuertes y trabajar en conjunto para lograr el equilibrio necesario para hacer yoga.