Secuestraron más de 4.000 litros de precursores químicos que utilizaba la banda de Trayán

La cantidad de precursores químicos ilegales que secuestró ayer la Policía Federal en Buenos Aires representa un 10% de la totalidad de estos químicos secuestrados durante todo el año pasado, en todo el país. ¿Quién se beneficiaba con esos elementos para preparar droga y comercializarla? Nada menos que una banda “narco” tucumana. Sus principales integrantes serían Julio César Trayán (el ex empleado del legislador oficialista Ramón Santiago “Cacho” Cano) y los hermanos Daniel, Walter y Ricardo García. Todos ellos están detenidos.

La investigación se inició en diciembre del año pasado de manera conjunta entre la división Antidrogas de la Policía Federal de Córdoba y el fiscal Federal de Tucumán Pablo Camuña. A pedido de este último, el juez Federal N°2 Fernando Poviña autorizó la intervención de siete teléfonos de esta agrupación. Mediante esas escuchas, lograron atar cabos y decodificar el funcionamiento de esta banda. A eso se sumaron distintas documentaciones que fueron encontrando en las casas de los detenidos al momento de los respectivos allanamientos.

Así pudieron descubrir que tanto Trayán como los hermanos García operaban con contactos en Buenos Aires, según explicó Camuña. Efectivos de la Policía Federal allanaron ayer -hasta el cierre de esta edición- distintos galpones y supuestas empresas químicas en diferentes localidades de esa provincia.

Bidones

La sorpresa más grande se la llevaron en la localidad de José C. Paz. Allí, la fachada de un local lo presentaba como una empresa química. Sin embargo, según resaltó Camuña, ni siquiera contaba con autorización para funcionar como tal. En su interior los policías encontraron tachos y bidones con un total de 3.240 litros de ácido clorhídrico, una cantidad todavía determinada de ácido sulfúrico, 30 kilos de soda cáustica y otros precursores químicos, todos utilizados para la elaboración de estupefacientes. “Para que se entienda: por cada litro de ácido clorhídrico se produce un kilo de cocaína de máxima pureza, según me explicaron los expertos de Sedronar”, aclaró el fiscal.

Además, en ese mismo predio funcionaba un galpón donde se sospecha que los “narcos” preparaban los autos para ocultar la droga y luego transportarla hacia distintos puntos del país. Camuña señaló que la distribuían en ciudades como Córdoba Capital, Rosario, Capital Federal, Mar del Plata y Puerto Madryn.

Una segunda empresa química fue allanada en la localidad bonaerense de Esteban Echeverría. En ese lugar encontraron bidones con 475 litros de ácido clorhídrico, 260 litros de ácido sulfúrico y 600 kilos de esa misma sustancia. Ante ese hallazgo, se requirió la presencia de personal de Sedronar y del Ministerio de Seguridad de la Nación para determinar la naturaleza del material encontrado así como la relevancia de la documentación secuestrada.

Más medidas

Hasta el cierre de esta edición, los policías federales llevaban ocho sitios allanados con las detenciones de siete personas. Los investigadores sospechan que cada una de ellas ayudaría a cerrar el círculo de producción y distribución de drogas que comandaban Trayán y los hermanos García.

De acuerdo a la información que recabó Camuña, la banda importaba la droga de dos países limítrofes. “Desde Bolivia les bajaban la pasta base y la cocaína. Y desde Paraguay les mandaban la marihuana, pero siempre en grandes cantidades”, destacó el fiscal federal.

Tucumán sería uno de los lugares donde preparaban la cocaína. Así lo concluyeron hace pocos días, cuando allanaron la vivienda de uno de los hermanos García y encontraron una prensa con restos de esa droga. Pero no se descarta que también hayan servido de “laboratorios” los galpones allanados en Buenos Aires.

Estaba previsto que en el transcurso de esta madrugada continuaran los allanamientos. En la Justicia Federal están convencidos de que todavía quedan pistas por encontrar y otros implicados por desenmascarar.