La felicidad tiene forma de rally

Ser parte de la organización de una competencia, y también piloto, no es algo sencillo ni tarea de todos los días. En el Rally del Bicentenario con base en Yerba Buena, por el Campeonato Argentino, Tomás García Hamilton cumplió esas funciones. A juzgar por los resultados, puede sentirse satisfecho: la carrera recibió elogios, y el resultado personal fue muy bueno.

- ¿Qué sacás en claro de lo sucedido?

- Que estoy muy contento de la carrera, por cómo salió. Que hayamos tenidos lindos días ayudó. El parque de asistencia me gustó mucho, el tamaño que tuvo, el aspecto. Me alegró ver tantísima gente en los tramos, apoyando a todos los tucumanos. Estoy muy agradecido por eso. Aún más, abrir ruta el primer día fue una experiencia única, una sensación muy linda.

- ¿Por qué elegiste abrir la ruta?

- Cuando lo veía abrir ruta a Roberto Sánchez soñaba con estar en su lugar. Por eso lo hice.

- ¿Esta fue una carrera de diez?

- Yo le pondría un nueve, aunque quizás estoy siendo egoísta, y debería ser un 0,5 menos en vez de un punto; quedaron detalles sin atender, los que son atendibles por haber sido la primera vez que se hace. El año que viene se mejorará: de fallas pasaremos a virtudes. Recuerdo los problemas que tuvimos con la luz al principio: se hizo una instalación muy grande y por eso se la probó cuando los equipos ya habían llegado. Y tuvimos poco tiempo para elegir caminos. Pero los chicos del Concepción Auto Club la tienen clara, por eso salió un “carrerón”.

- ¿Esta carrera llegó para quedarse en Tucumán?

- Sí, yo quiero que esta carrera se haga acá en 2017, otra vez en septiembre; antes la tenía El Calafate, ya no. Y con gente que se sume. Este año quizás fui yo el que inició todo, pero estoy seguro de que los tres intendentes que nos apoyaron quedaron contentos, así como la gente del Ejecutivo provincial y otros que se sumaron. Para mí, esta es de las mejores carreras del Argentino, por caminos, por el lugar, por el parque, por el público.

- Si pudieras elegir un momento en el que te sentiste perfectamente bien en este desafío, ¿cuál sería?

- Abriendo ruta el primer día. Fue muy lindo. La primera vez que encaré el doble vado, desde lejos se veía muchísimo público allí. Y era gente alentando; uno pasa tan rápido que no ve ni quiénes son, pero desde arriba, 400 metros antes, pude ver la cantidad.

- ¿Qué sentías en ese momento?

- Arriba del auto uno ni se entera de todo lo que pasa. Se ve una cantidad de gente, pero no cómo festejan, cómo saltan, cómo se divierten. Es como que después uno se da cuenta. Estas son cosas por las que uno todavía no termina de darse cuenta de lo que se viene logrando en lo deportivo.

- ¿Este sigue siendo un año de aprendizaje?

- Sí, pero es como le decía a Luis Catálfamo, mi navegante: “mirá con quién compartimos un podio, con Marcos Ligato y con Federico Villagra, estamos en el medio de los dos’. Marcos hoy está en la mejor etapa de su carrera deportiva, como lo estuvo Villagra hasta hace dos años. Yo ni me acerco a la experiencia con que ellos cuentan; recién me estoy iniciando y eso es algo que, a la hora de una carrera, pesa muchísimo. En 2008 vi el Nacional que vino a Tucumán y que ganó Ligato. Ocho años después, definir con él una carrera, en mi primer año en Maxi Rally, no sé, es fuerte. Hay que andar mucho para “llegarle”, pero vamos por buen camino; estoy sorprendido, el equipo y todos, de los resultados que venimos logrando en tan poco tiempo.

- ¿Sos de aquellos que saben cambiar sueños por realidad?

- Yo trato de cumplir los sueños. Toda mi vida fui a ver carreras, iba a la primaria y no quería estudiar, quería correr en auto; obviamente mis padres no me dejaban. Desde que se mató Ayrton Senna que yo decía que quería ser piloto. No me arrepiento del camino que me marcaron, porque ellos me dijeron: “estudiá, y después vas a poder correr”. Es lo que hice. Creo que ser profesional, vivir de esto debe ser muy difícil, porque a mí me gusta mucho compartir con mis amigos, con mi familia, con mi novia, con la gente que quiero. Y si uno es profesional y vive de esto, mucho de eso no se puede hacer.

- ¿Hacia dónde creés que vas?

- La idea es trabajar; nos falta presupuesto. La verdad es que lo que nos falta también para ascender un poquito más es armar un auto nuevo; estamos trabajando para eso, buscando el apoyo necesario para hacerlo. Así que la idea es seguir remándola, tratar de armar un auto más competitivo; un auto cero kilómetro para 2017 es prioridad. Y esto porque el auto nuestro es de 2012, ya es viejo como para aspirar a más.

Pienso que lo que se hizo en esta carrera de Tucumán fue óptimo; es difícil lograr algo así, sobre todo por el nivel de exigencia que hay en el automovilismo argentino. Claro que siempre se puede mejorar, pero en este caso me pareció que se trabajó muy bien.

Tanto a la gente del Auto Club Concepción, como a quienes trabajaron junto a la organización, como Tomás García Hamilton, les destaco la voluntad, las ganas, el empeño con que hicieron las cosas. Personalmente los felicité una vez que concluyó el rally.

Para la temporada 2017 nos encantaría que Tucumán vuelva a tener dos fechas del certamen, como las tuvo este año. Si así fuera, lo que sí haríamos sería distanciarlas una de otra.