Pasa un rato desde la salida del técnico de Atlético, Azconzábal. Luego llega el turno de los suplentes que no jugaron de pasar por la zona mixta, y por último el de los que sí lo hicieron, que salen disparados como flechas.
Uno de los que desvía su trayectoria es Guillermo Acosta, volante central cuyo servicio al “Decano” pasa por marcar pero también por generar juego en ofensiva. “La verdad, cuando mejor estábamos jugando vino el gol de ellos y después no supimos revertir la situación”, explicó el nacido en Banda del Río Salí, que venía dulce en las últimas dos fechas marcando en cada juego: un misil a distancia para vencer a Rafaela en casa (1-0), y otro para sentenciar a Arsenal (3-1), el lunes pasado en Sarandí. “Nos equivocamos nosotros y ellos nos marcaron”, lamentó.
Lejos de aferrarse a los números, “Bebé” entiende que la clave de una estadía sin presiones en Primera A está en ganar en el Monumental. “Lo que pasó, pasó. Ahora tenemos que seguir ganando”, dijo Acosta antes de entrar en el terreno del mea culpa. “Nos costó trasladar la pelota. Me costó a mí también hacerlo. Me costó crear espacios”, habló con total sinceridad y prosiguió. “Después del gol, ellos manejaron el partido... nos ganaron con dos pelotas malas nuestras”, dijo a regañadientes Guillermo.
Por último, se mantuvo firme en su convicción. “Nunca nos sentiremos los mejores cuando ganemos ni tampoco los peores cuando perdamos. Toda caída duele, pero vamos a salir adelante”, prometió.
ANALISIS
Despertó demasiado tarde
Si Atlético perdió contra Estudiantes y le dijo adiós al interminable invicto de 32 partidos, fue porque no supo encontrarle la vuelta a la maraña defensiva que le propuso Estudiantes y le faltó una cuota de rebeldía para sacarse de encima los sistemas.
Atlético arrancó el duelo con el 4-4-2, marca registrada de Juan Manuel Azconzábal. Con Javier Mendoza volcado por derecha intentó generar la cuota de fútbol que nunca llegó. Para colmo, los “yerros” defensivos que tuvo el equipo le costaron carísimo: primera derrota en el torneo y pérdida de un invicto que el “Decano” supo construir con esmero.
Los goles del “Pincha” fueron el despertador de Atlético. Pero claro, la reacción llegó cuando el agua estaba a la altura del cuello y la derrota era inminente.
“Vasco” movió el banco, tiró toda la carne al asador, pero el equipo no se apartó ni un segundo del libreto táctico, algo que le facilitó la tarea al “Pincha”. Faltó apostar al desequilibrio individual, a esa desfachatez necesaria en el fútbol.
Atlético se quedó sin invicto porque se dejó golpear para recién salir a jugar.
ANALISIS
Estudiantes fue muy prolijo y ordenado
Hugo Corbalán - Ex jugador de Atlético
Estudiantes vino a buscar su resultado sin dejar de respetar lo que es Atlético y su fortaleza como local. Vivas puso dos líneas de cuatro muy ordenadas con Braña y Ascacíbar cerca de los centrales y bien escalonados para marcar. Siempre muy prolijo y encima intentaba salir jugando de abajo con sus centrales, intentando encontrar una línea interna de pase con sus volantes.
Atlético no le encontró la vuelta a ese planteo ni les pudo ganar la espalda a los defensores del rival. Así fue que en el primer tiempo casi no generó situaciones. Apenas dos aisladas con un tiro que se fue por arriba desde afuera y otra del “Bebé”.
Auzqui tuvo tres situaciones: en dos metió los goles y la otra pegó en el palo. Vinieron por errores en la defensa que en Primera no se pueden cometer pero de los que creo se levantará Atlético. Bianchi y la defensa cometieron pocos errores en el torneo pasado y no creo que pase otra vez.
En el segundo tiempo Atlético se paró más adelante en el campo con los cambios del técnico, acorraló a Estudiantes pero aún así no pudo. En resumen, creo que fue un resultado justo.
ANALISIS
El equipo no encuentra su juego
Facundo Neffa (21 años) - Estudiante de arquitectura
Muy flojo Atlético, creo que desde la pretemporada. El equipo no encuentra el juego que tenía el torneo pasado. Lo más flojo es la falta de creación de juego y, por ende, la falta de gol.
La semana pasada me gustó que hayan ido al banco Leandro González y el “Pulguita”, por ahí creo que va la cosa. Me gustó el planteo y el dibujo contra Arsenal pero lamentablemente en este partido no pudieron estar ni Barbona ni Rosales, que anduvieron bien.
Para mí sí es para preocuparse. En realidad estoy preocupado desde el partido contra Defensores de Belgrano, en julio por la Copa Argentina.
Son muchas fechas las que faltan y espero que con la práctica y los partidos el equipo vaya encontrando el juego. Confío en el “Vasco”. Es un estratega fundamental y sé que lo va a encontrar.
Lo mejor del equipo para mí fue Leyes por más que se haya equivocado en el gol. Siempre cumple. Tendría que pensar bastante para descubrir otro que haya jugado bien. Lo más flojo estuvo arriba y abajo. El “Pulguita” y Menéndez no anduvieron bien y la defensa se equivocó también.