Agredieron al gobernador de San Juan cuando quiso hablar con asambleistas en Jáchal

SAN JUAN.- El gobernador de San Juan, Sergio Uñac, confirmó hoy que mantendrá la actividad paralizada en la mina Veladero, donde se produjo el segundo derrame de agua cianurada en menos de un año, y afrontó incidentes con vecinos y ambientalistas al visitar la localidad de Jáchal.

El mandatario provincial aseguró hoy que la multa contra la empresa canadiense Barrick Gold por el derrame en Veladero "está en proceso administrativo y con el sumario correspondiente" y se comprometió a abrir la mina para que los vecinos puedan sacarse las dudas sobre los procesos extractivos.

Uñac sostuvo que las operaciones en la mina Veladero se reanudarán cuando tenga "la certeza" de que Barrick Gold desarrollará su actividad "con absoluto respeto al medio ambiente y al código minero".

"La medida (de parar) no se toma para que la empresa tenga problemas, sino para ver la cuantía del incidente y si tomamos otra medida tengamos los fundamentos. La próxima vez van a pensar dos veces si van a poner gente a controlar. Vamos a hacer los cambios que sean necesarios para que la gente de los pueblos, a través del intendente, que quiere sacarse las dudas, con las medidas de seguridad correspondiente, pueda hacerlo", anticipó a la prensa.

Uñac viajó hoy a la localidad sanjuanina de Jáchal, donde se reunió con el intendente Miguel Vega e intentó dialogar con vecinos y ambientalistas que reclaman el cierre definitivo del emprendimiento minero donde se produjeron dos derrames de cianuro en menos de un año.

El gobernador sanjuanino mantuvo un encuentro con el jefe comunal y luego se cruzó a la Plaza San Martín, donde fue recibido con insultos y gritos por los vecinos de la asamblea "Jáchal no se toca", que hace un año instalaron allí una carpa para protestar por los proyectos mineros en la zona.

Tras unos minutos de tensión y empujones, Uñac se retiró del lugar en medio de una lluvia de escupitajos y huevos que le arrojaban los asambleístas, hasta encontrar refugio en el edificio municipal.

Uñac viajó luego a la localidad de Iglesia, donde se reunió con el intendente Marcelo Marinero y habló con la prensa sobre los incidentes en Jáchal. "Fueron violentos, pero yo los respeto. Que no esperen de mí una respuesta en ese sentido. Primero porque no corresponde y segundo porque tengo que arrimar posiciones y conciliar", aseguró.

El derrame en la mina Veladero hizo que el gobierno nacional enviara una comisión técnica para evaluar si el incidente provocó daño ambiental, mientras que el juez federal Sebastián Casanello ordenó operativos en los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sustentable y de Minería para recabar información sobre el hecho.

La empresa Barrick Gold Corporation informó ayer en un comunicado que el derrame "no representa ninguna amenaza para la salud de los empleados, las comunidades ni el medio ambiente".

En tanto, el juez de Jáchal, Pablo Oritja, aseguró que "técnicamente no debería hablarse de un derrame" porque, según la firma, el líquido cianurado "no habría llegado a traspasar los límites del valle de lixiviación", espacio integrado por piletones que tienen debajo una membrana y que se usan para separar el mineral de la roca.