14 Septiembre 2016
El Sindicato de Trabajadores Judiciales (Sitraju) planteó interrogantes sobre el estado de salud de Raúl Mender, vocal de la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán, en una nota dirigida al Consejo de la Magistratura de la Nación (CM). El gremio solicitó a la consejera Adriana Donato, presidenta de la Comisión de Disciplina y Acusación, que tome las medidas necesarias para evaluar si el camarista federal está en condiciones de seguir ejerciendo su cargo.
Matías Fabián Zeballos y Matías Lorenzo Pisarello, respectivos secretarios general y gremial, dijeron en la nota dirigida a Donato que la avanzada edad del camarista Mender (95 años) y el hecho de que este se encontraba hace ya casi dos años con licencia por razones de salud generaban dudas sobre su capacidad para seguir ejerciendo su función con la dedicación que esta exige. “Queremos dejar sentado que la situación que planteamos no responde a animosidad alguna en contra de Mender. Nuestra inquietud obedece al mandato conferido por los afiliados y, por ende, al cumplimiento de las obligaciones sindicales. Pero también nos convoca nuestra preocupación por proveer a los ciudadanos de una correcta administración de justicia”, precisaron Zeballos y Pisarello.
Los dirigentes de Sitraju expresaron que la licencia con goce de sueldo de Mender por enfermedad de largo tratamiento y la existencia de una vocalía acéfala en la Cámara complicaban el trámite de los expedientes en los supuestos de inhibición, vacaciones y disidencia de los magistrados en funciones. Asimismo recordaron que la Justicia Federal atiende los casos de lesa humanidad, narcotráfico y trata. “No es necesario explicar la demora que la situación planteada acarrea a la administración de justicia”, manifestaron Zeballos y Pisarello al CM, órgano encargado de preseleccionar a los jueces federales y nacionales, y de controlar su disciplina. Eventualmente, esta institución puede llevar adelante la destitución del acusado de mal desempeño ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados de la Nación.
El más longevo de los jueces del país acumula 574 días corridos de licencia especial por enfermedad de largo tratamiento. Este régimen puede extenderse hasta dos años, que se cumplirían en febrero de 2017 (el plazo de vencimiento no está claro porque, en el ínterin, el camarista federal pidió días libres en compensación de su trabajo en las ferias judiciales de 2010 y de 2013). En la Justicia Federal de Tucumán consta que el camarista justificó la licencia especial con certificados firmados por el cardiólogo Gustavo Haurigot. Esos papeles indican que el paciente cumple un tratamiento por diabetes.
Los representantes de Sitraju dijeron al CM que el comportamiento de Mender parecía reñido con la cláusula constitucional que establece que los magistrados que cumplen los 75 años requieren de un nuevo acuerdo del Senado para continuar en sus cargos. Ese artículo incorporado a la Constitución Nacional en 1994 fue declarado inválido respecto de Carlos Fayt, ex ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, puesto que este, al igual que Mender, había jurado como magistrado con una Carta Magna anterior.
Matías Fabián Zeballos y Matías Lorenzo Pisarello, respectivos secretarios general y gremial, dijeron en la nota dirigida a Donato que la avanzada edad del camarista Mender (95 años) y el hecho de que este se encontraba hace ya casi dos años con licencia por razones de salud generaban dudas sobre su capacidad para seguir ejerciendo su función con la dedicación que esta exige. “Queremos dejar sentado que la situación que planteamos no responde a animosidad alguna en contra de Mender. Nuestra inquietud obedece al mandato conferido por los afiliados y, por ende, al cumplimiento de las obligaciones sindicales. Pero también nos convoca nuestra preocupación por proveer a los ciudadanos de una correcta administración de justicia”, precisaron Zeballos y Pisarello.
Los dirigentes de Sitraju expresaron que la licencia con goce de sueldo de Mender por enfermedad de largo tratamiento y la existencia de una vocalía acéfala en la Cámara complicaban el trámite de los expedientes en los supuestos de inhibición, vacaciones y disidencia de los magistrados en funciones. Asimismo recordaron que la Justicia Federal atiende los casos de lesa humanidad, narcotráfico y trata. “No es necesario explicar la demora que la situación planteada acarrea a la administración de justicia”, manifestaron Zeballos y Pisarello al CM, órgano encargado de preseleccionar a los jueces federales y nacionales, y de controlar su disciplina. Eventualmente, esta institución puede llevar adelante la destitución del acusado de mal desempeño ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados de la Nación.
El más longevo de los jueces del país acumula 574 días corridos de licencia especial por enfermedad de largo tratamiento. Este régimen puede extenderse hasta dos años, que se cumplirían en febrero de 2017 (el plazo de vencimiento no está claro porque, en el ínterin, el camarista federal pidió días libres en compensación de su trabajo en las ferias judiciales de 2010 y de 2013). En la Justicia Federal de Tucumán consta que el camarista justificó la licencia especial con certificados firmados por el cardiólogo Gustavo Haurigot. Esos papeles indican que el paciente cumple un tratamiento por diabetes.
Los representantes de Sitraju dijeron al CM que el comportamiento de Mender parecía reñido con la cláusula constitucional que establece que los magistrados que cumplen los 75 años requieren de un nuevo acuerdo del Senado para continuar en sus cargos. Ese artículo incorporado a la Constitución Nacional en 1994 fue declarado inválido respecto de Carlos Fayt, ex ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, puesto que este, al igual que Mender, había jurado como magistrado con una Carta Magna anterior.
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