San Martín: los tres mosqueteros

Los dirigentes apostaron por ellos y no se equivocaron. Cuando la directiva de San Martín pensó en ellos para que dirigieran las Inferiores del club, los tres se sintieron orgullosos de poder empezar a volcar con los pibes parte de lo aprendido a través de los años en el fútbol.

Y con los resultados a la vista, en La Ciudadela sienten que tomaron la decisión correcta. Jacinto Eusebio Roldán, Dardo Villarreal y Omar Marchese devolvieron esa confianza con la obtención de títulos que pasaron a engrosar las vitrinas de la institución.

Roldán fue campeón Regional del NOA dirigiendo al plantel Sub 19; los pibes de Villarreal consiguieron la corona del NOA en la categoría Sub 15, mientras que “Pilla Pollo” se consagró campeón con la categoría 1999 en el certamen liguista.

Roldán considera que competir y ganar estos torneos ayuda mucho a los pibes. “Para ellos es una experiencia nueva. Si son inteligentes la podrán aprovechar para madurar. Están en una edad justa para profundizar su crecimiento, no sólo en lo futbolístico sino también en lo social. Mas allá de que son importante los resultados deportivos, quienes dirigimos a los jóvenes ponemos mucho énfasis en el aspecto humano”, explicó “Roly”, a quien el hincha “Santo” eligió como el mayor ídolo futbolístico de la historia del club.

Jacinto piensa que en la medida en que se acentúe el trabajo, el plantel profesional se seguirá nutriendo de jugadores formados en el club, siguiendo el camino de los hermanos Gustavo y César Abregú, Oscar Mamaní y Juan Jaime, entre otros.

Villarreal se acostumbró a codearse con el éxito desde que dejó las inferiores de UTA para volcar toda su experiencia como entrenador para formar a los chicos que diariamente concurren al complejo “Natalio Mirkin” con el sueño de vestir algún día la camiseta de una de las entidades con mayor prestigio del interior.

“No voy a negar que, en lo personal, me llena de orgullo volver a conseguir un título en el club, pero lo que más me alegra es que quedó demostrado que cuando se trabaja con seriedad existen grandes posibilidades de concretar los objetivos que uno se traza. Esto pasó con estos chicos que comprendieron que la única forma de trascender en el fútbol es con dedicación y mucho esfuerzo”, sostuvo Villarreal.

El “profe”no pierde la esperanza de que, en un tiempo no muy lejano, San Martín pueda estar participando en los torneos de la AFA. “Si podemos conseguir ese objetivo, les daremos la posibilidad a nuestros jugadores de competir en un nivel superior. Eso los hará crecer en todo sentido. Lo que muchos no tienen en cuenta es que en los viajes que hicimos al norte para participar en el Regional los pibes aprendieron a compartir vivencias que hasta ahora desconocían. Ojalá que eso se concrete”, indicó.

Más experiencia
Marchese lleva muchos años en el club y pasó gran parte de su vida en el complejo de Cebil Redondo. El experimentado entrenador, por su olfato para descubrir buenos jugadores, presiente que entre sus dirigidos existen por lo menos seis jugadores que, en dos años, pueden llegar a la Primera liguista.

“En la medida que puedan tener una buena base, los veo con posibilidades de jugar a nivel profesional en San Martín. Ellos saben que todo nuestro esfuerzo y trabajo dará los frutos deseados si colaboran con su cuidado personal. En el fútbol actual la vida privada es clave para proyectarse a un nivel superior en este deporte”, manifestó.

Marchese rescató el interés que muestra Diego Cagna por las inferiores del club. “Es saludable observar que, junto a sus colaboradores, concurre a los partidos oficiales de las categorías menores del club. Esto hace que tenga un conocimiento pormenorizado de los chicos que hay en el club. Con los años que tengo en San Martín, es la primera vez que observo al técnico del plantel profesional con esa saludable actitud”, expresó “Pilla Pollo”.