12 Septiembre 2016
MONTAÑA DE ALEGRÍA. Los jugadores de Boca fueron en malón a buscar a Tevez (10), autor del 1-0 parcial ante Belgrano. télam
BUENOS AIRES.- El tiempo cedido a Carlos Tevez para que este encontrara su mejor perfil -el diestro- y acomodara abajo la pelota sobre el palo izquierdo de Carlos Olave cuando toda la defensa de Belgrano iba corriendo de espaldas a su arco, sirvió para borrar casi 33’ de dominio sin éxito del que era el mejor de los dos en La Bombonera: Boca. Merecía ganar el “Xeneize”, claro, porque mostró una cara diferente a la de la primera fecha con Lanús (0-1). Y así le fue.
Igual, lo mismo vivió un momento ácido, luego del golazo del “Apache”. Dos minutos después, el 10 se fue de rosca, metió una plancha, Germán Delfino le mostró la amarilla y “Carlitos” no midió consecuencias e insultó a viva voz al juez. Roja directa, a las duchas. Era la oportunidad para el “Pirata”.
Pero la dejó pasar. Porque Boca no perdió los bríos y continuó yendo al frente como si fuera mayoría en el terreno. Gran partido de Pablo Pérez marcando el ritmo en la zona media. Gran tarde de Ricardo Centurión, que como conductor había chocado un auto alemán en la calle. Ayer voló en un Fórmula 1. Gran tarde el lateral Frank Fabra, con gol incluido, el del 3-0, y buena jornada de Cristian Pavón, que mandó a Boca al vestuario con un 2-0 a su favor. Qué pincelada de tiro libre metió. Al ángulo.
¿Y Belgrano? Bien, gracias. Apabullado, desbordado, impedido de hacer algo teniendo mayoría en el terreno. “Fue un partido complicado, lo sabíamos desde que empezó. Belgrano es un equipo que juega muy bien, pero logramos lo que trabajamos en la semana”, apeló a la diplomacia Fabra, autor de caños y piruetas dignas de una tarde perfecta en La Boca.
Luego relató el 3-0 de su autoría. “Fue una contra muy bonita. Vimos el espacio, fuimos a ganar el rebote y encaramos. Sabía que se la podía dar (a Vergini) pero el arquero fue al costado y definí”. (Especial)
Igual, lo mismo vivió un momento ácido, luego del golazo del “Apache”. Dos minutos después, el 10 se fue de rosca, metió una plancha, Germán Delfino le mostró la amarilla y “Carlitos” no midió consecuencias e insultó a viva voz al juez. Roja directa, a las duchas. Era la oportunidad para el “Pirata”.
Pero la dejó pasar. Porque Boca no perdió los bríos y continuó yendo al frente como si fuera mayoría en el terreno. Gran partido de Pablo Pérez marcando el ritmo en la zona media. Gran tarde de Ricardo Centurión, que como conductor había chocado un auto alemán en la calle. Ayer voló en un Fórmula 1. Gran tarde el lateral Frank Fabra, con gol incluido, el del 3-0, y buena jornada de Cristian Pavón, que mandó a Boca al vestuario con un 2-0 a su favor. Qué pincelada de tiro libre metió. Al ángulo.
¿Y Belgrano? Bien, gracias. Apabullado, desbordado, impedido de hacer algo teniendo mayoría en el terreno. “Fue un partido complicado, lo sabíamos desde que empezó. Belgrano es un equipo que juega muy bien, pero logramos lo que trabajamos en la semana”, apeló a la diplomacia Fabra, autor de caños y piruetas dignas de una tarde perfecta en La Boca.
Luego relató el 3-0 de su autoría. “Fue una contra muy bonita. Vimos el espacio, fuimos a ganar el rebote y encaramos. Sabía que se la podía dar (a Vergini) pero el arquero fue al costado y definí”. (Especial)
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