"Vitín" Rodríguez no se conforma

Esa sensación de crecer de golpe no nubla a Víctor Rodríguez, el pibe que se hace fuerte y disfruta de un momento soñado.

Cuando la oportunidad golpeó su puerta, “Vitín” la abrazó con ganas y apuntó alto. Se ganó un lugar importante del equipo, transformándose en el “jugador N°12” y, hoy disfruta de una titularidad soñada, en la segunda categoría del fútbol argentino.

“Estoy muy feliz. Es hermoso jugar en esta categoría, pero no pienso parar hasta llegar a Primera”, dice el crédito de Concepción que, al igual que contra Instituto, volverá a estar de movida en el juego contra Chacarita.

Desde la llegada de Diego Cagna, el volante se transformó en un jugador clave para los segundos tiempos de San Martín. Con su cambio de ritmo, le dio otro aire al equipo. Pero ahora, en el arranque de la B Nacional, dio otro salto; algo con lo que siempre soñó. “Siempre trabajo para jugar de titular”, jura el hijo pródigo de Concepción FC, dejando en claro que, jugando desde el arranque, pretende transformarse en ese mismo hombre explosivo que entraba en los complementos de ese lejano Federal A. “No sé si es tan diferente. Depende mucho de cómo se dan los partidos, pero yo siempre voy a dejar todo para rendir de la mejor manera”, afirmó.

Rodríguez, desde su llegada a San Martín, en enero, fue moldeando su destino a pasos agigantados. No sólo llegó a un grande del interior, sino que fue parte del equipo que devolvió al club a la segunda categoría y hoy, aparece como uno de los puntales del equipo que intentará hacerse fuerte en la B Nacional. “Gracias a Dios todo me salió bien y puedo crecer en el fútbol. Las cosas me están saliendo muy bien y es algo que me llena de orgullo. No es fácil ganarte un lugar en un club grande como San Martín, y en un plantel con jugadores de tanta clase como los que hoy tengo de compañeros”, explica.

El “Funebrero” aparece a la vuelta de la esquina y “Vitín” sólo piensa en seguir progresando. “Quiero aportar lo mío para que el equipo pueda lograr su primera victoria en el torneo. Estamos muy bien, sólo nos falta ganar un partido para explotar como equipo”, cierra el hombre que creció de golpe y hoy, para San Martín, es una hermosa realidad.