El “Bebé” y sus dos bebés

Si sometiéramos el gol de Guillermo Acosta a una ecografía, los ultrasonidos nos permitirían ver en detalle la verdadera identidad del triunfo de Atlético anoche, sobre Rafaela: Nery Leyes, el padre de la conquista, tirándose por el piso hasta recuperar la pelota y asistiendo al oriundo de La Banda del Río Salí, que parió una bomba detonada en el ángulo superior derecho del arco de Lucas Hoyos.

Esa imagen en movimiento devela las razones por las que el “Decano” debutó con una victoria en el torneo. “Le pegué al arco, nada más que eso”, lo explica aún más sencillamente el “Bebé” que segundos después de “pegarle al arco” y darle la ventaja definitiva a su equipo, buscó la misma pelota para ponérsela debajo de la camiseta y anunciar que será papá, por segunda vez. “No sabemos si es varón o mujer. La otra semana mi esposa va a hacerse la ecografía”, adelantó el volante de Atlético. Y así como el sexo de su bebé estará al descubierto, con su gol, quedó a la vista de todos como funciona el medio campo de Atlético en su versión más central. Leyes, su compañero de círculo central y él. “Yo estoy bien jugando ahí, de cinco. Le estoy rindiendo al ‘Vasco’ (Juan Manuel Azconzábal) y él me ve bien ahí”, confesó el “Bebé”, que sabe que no nació jugando en ese puesto pero que está creciendo a pasos agigantados.

Aún en el éxtasis del triunfo y la paternidad, Acosta fue autocrítico: “No se jugó bien. Tenemos que buscar más espacios y encontrarlos. Jugamos mucho por afuera pero a la hora de llegar al arco no tuvimos situaciones”.