Gritaron y marcharon para que liberen a Belén

Cerca de las 18.30, la camioneta que llevaba en la caja y en el techo dos enormes parlantes comenzó a moverse, encabezando la marcha. A su costado se acomodaron dos mujeres que, cuando calló la música de Raly Barrionuevo, tomaron un altavoz y comenzaron a entonar las canciones a favor de la liberación de Belén, y en contra de los jueces, que acompañaron a quienes marcharon en caravana desde la plaza Yrigoyen hasta la plaza Independencia para pedir la liberación de Belén. Se trata de la joven que fue condenada en abril a ocho años de prisión por homicidio agravado por el vínculo. Los jueces aseguran que tuvo a su bebé en un baño del hospital Avellaneda y que lo asesinó arrojándolo a un inodoro. Los que marcharon a favor de Belén entienden que se trató de un aborto espontáneo.

Bajo la primera pancarta, enorme y cargada solamente por mujeres, se ubicó la defensora de Belén, Soledad Deza. Un paso más atrás, la primera presencia masculina fue la del diputado de Libres del Sur, Federico Masso.

Entre cuestionamientos a la Justicia, el parlamentario ensayó en diálogo con LA GACETA una fervorosa defensa en favor de Belén. “Ella fue a un hospital a pedir salud y terminó presa. Esa es la gran hipocresía con la que hay que terminar”, manifestó, levantando el tono de voz para hacerse oír por sobre el ruido de una murga cercana que acompañaba la movilización. Según su opinión, la Justicia “subestimó a la sociedad: creyeron que esto no se iba a visibilizar”.

Las críticas de Masso no fueron solamente hacia el Poder Judicial sino que comprendieron al Estado en general, al que calificó como “un poco lerdo en algunas cuestiones”. “Hay leyes muy importantes, como la de la Violencia de Género y la de Adicciones, pero objetivamente lo que necesitamos es que el Estado nacional ponga los recursos para que lleguen a la población que sufre la violencia y las adicciones. Y de una vez por todas, hay que discutir la legalización del aborto. Porque eso no ocurre, se pierden muchas vidas que se podrían recuperar”.

La izquierda y el arte

No fueron pocas las agrupaciones de la izquierda que se ubicaron en los primeros metros de la movilización, con enormes pancartas, como el Partido Obrero, la Corriente Clasista Combativa y el Frente Popular Darío Santillán.

Muchos de los manifestantes echaron mano de los aerosoles y dejaron pintada su postura en favor la legalización del aborto en una pared de la calle Congreso.

“Hoy es un día, si no culminante, al menos muy importante de la lucha para anular este fallo que mantiene en la cárcel a una persona inocente. A través de violaciones de todo orden, en el terreno jurídico y médico por sobre todas las cosas, han condenado a una pobre mujer a ocho años de prisión. El hecho de que una causa se haya transformado en nacional, refleja que al problema lo sufren muchas mujeres en términos de atropello y violación. Por eso se movilizaron muchas mujeres y hombres”, expresó uno de los referentes del Partido Obrero, Daniel Blanco. También se manifestó seguro de que se logrará provocar el cese de la prisión preventiva de la mujer de 28 años.

Si bien varios consideraron que los dictámenes del ministro fiscal, Edmundo Jiménez, críticos contra la sentencia, son fundamentales a la hora de convencer a la Corte Suprema de Justicia de la Provincia -que está revisando el fallo- de revertir la condena, Blanco aseveró que él entiende que se trata de una estrategia. “Ante la inminencia de una condena jurídica a nivel mundial -opinó- están abriendo el paraguas”.

En representación del Plenario de Trabajadoras, Alejandra del Castillo también se mostró crítica, pero apuntó directamente en contra de los jueces Dante Ibáñez, Néstor Rafael Macoritto y Fabián Fradejas, quienes condenaron a Belén. “Consideramos que mienten. Quedaron demostradas todas las irregularidades de las causas y se presentaron 11 amicus curiae que demuestran que no no hay pruebas para condenarla; y hasta el Comité de Derechos Humanos de la ONU reclama que sea liberada”, subrayó.

Además de las murgas, hubo lugar para una intervención artística, a cargo de la asociación Mumalá, juntó con decenas de mujeres que se pusieron una máscara y marcharon con un globo. Cuatro de ellas, lo hicieron tras rejas y cadenas, como una metáfora de que “todas somos Belén”.

Protesta nacional

La convocatoria en Tucumán tuvo réplicas en las principales ciudades del país. En Paraná y en Mendoza, por ejemplo, se realizaron radios abiertas. La Universidad Nacional de Córdoba se adhirió a la consigna. En Mar del Plata, según la agencia Télam, hubo más de 1.000 personas manifestando en las calles céntricas.