12 Agosto 2016
LA GACETA / FOTO DE MARTIN DZIENCZARSKI
El secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación, Domingo Amaya, realizó esta mañana un recorrido oficial junto al intendente Germán Alfaro, para supervisar obras de repavimentación en avenida Avellaneda al 100. Durante la inspección, Amaya fue consultado por LA GACETA acerca de los dichos del presidente, Mauricio Macri, sobre la dictadura en Argentina, y que causaron el repudio de todo el arco de organizaciones defensoras de los derechos humanos.
"Creo que la 'guerra sucia' la hizo el Estado, así lo dijo el presidente. El Estado fue responsable de una represión impresionante", señaló.
Sobre la polémica acerca del número de personas desaparecidas, consideró que 30.000 podría ser incluso un número menor a la cantidad real de víctimas. "Quizás sean muchos más, porque hay muchísimos casos, sobre todo en el interior, que no han sido declarados", dijo.
"No pasa por la cantidad, sin embargo, el solo hecho de que una sola persona haya sido violentada de esa forma por el Estado constituye un crimen de lesa humanidad. Eso tenemos que entenderlo, porque se que hay muchas madres, en el interior, que nunca registraron la desaparición de sus hijos y que ya fallecieron", añadió.
Amaya insistió en que se trata de un tema que hay que seguir investigando, "ni más ni menos que como hizo el pueblo judío con los asesinos nazis".
Sobre la gestión del Gobierno en materia de Derechos Humanos, el funcionario tucumano opinó que se está haciendo un buen trabajo. "No hay ninguna orden del Estado nacional de frenar cualquier tipo de investigación de delitos de lesa humanidad, o cualquier otro tipo de violación a los derechos humanos", enfatizó.
"Creo que la 'guerra sucia' la hizo el Estado, así lo dijo el presidente. El Estado fue responsable de una represión impresionante", señaló.
Sobre la polémica acerca del número de personas desaparecidas, consideró que 30.000 podría ser incluso un número menor a la cantidad real de víctimas. "Quizás sean muchos más, porque hay muchísimos casos, sobre todo en el interior, que no han sido declarados", dijo.
"No pasa por la cantidad, sin embargo, el solo hecho de que una sola persona haya sido violentada de esa forma por el Estado constituye un crimen de lesa humanidad. Eso tenemos que entenderlo, porque se que hay muchas madres, en el interior, que nunca registraron la desaparición de sus hijos y que ya fallecieron", añadió.
Amaya insistió en que se trata de un tema que hay que seguir investigando, "ni más ni menos que como hizo el pueblo judío con los asesinos nazis".
Sobre la gestión del Gobierno en materia de Derechos Humanos, el funcionario tucumano opinó que se está haciendo un buen trabajo. "No hay ninguna orden del Estado nacional de frenar cualquier tipo de investigación de delitos de lesa humanidad, o cualquier otro tipo de violación a los derechos humanos", enfatizó.
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