Golpearon a un abusador en la puerta de un hotel

Se trata de un caso aberrante con un desenlace insólito. Un hombre quedó detenido al estar acusado de haber abusado de un adolescente con retraso madurativo. Lo más insólito del caso es que el sospechoso fue arrestado por allegados a la víctima.

Todo comenzó hace un par de meses. El menor, de 16 años, tomó contacto a través de una red social con un hombre de unos 55 años. Después de varias semanas de contactos virtuales, el imputado de abuso sexual con acceso carnal, le pidió que se encontraran. El 24 de julio lo hicieron. Mediante engaños, el adulto lo llevó a un hotel alojamiento de Villa Luján donde concretó el ataque.

El chico, según consta en el expediente, tuvo un cambio de conducta. Un día no pudo más y contó lo que le había sucedido. Sus allegados decidieron no realizar la denuncia en la Policía ni en la Justicia y actuaron de manera independiente para tratar de detener al pedófilo.

Haciéndose pasar por la víctima, volvieron a contactarse con el atacante. Después de asegurarse de que no sospechaba de quiénes eran los que estaban manteniendo contacto con él, acordaron un nuevo encuentro para el lunes en otro hotel alojamiento.

Lo esperaron pacientemente y, cuando apareció en el lugar, los allegados a la víctima lo capturaron y comenzaron a golpearlo salvajemente. Justo en el momento de mayor violencia, un equipo de trabajo de la Dirección General de Drogas Peligrosas (Digedrop) pasó por el lugar. Los uniformados, a duras penas, lograron retirar al sospechoso. “Estaba golpeado, parecía que recién lo estaban atacando. Si hubiéramos pasado 10 minutos después, no sé lo que hubiera pasado”, dijo uno de los policías que puso fin al caso de justicia por mano propia.

Pruebas

Los pesquisas pidieron apoyo y llevaron a la dependencia al acusado y a los que decían ser allegados a la víctima. Recién en ese momento contaron que al hombre lo golpearon por haber abusado del adolescente. Los uniformados decidieron requisar la mochila que llevaba el sospechoso y allí encontraron, entre otras cosas, preservativos, geles íntimos y varias pastillas de viagra.

Tal como estipula el protocolo, los uniformados se comunicaron con la fiscala Adriana Reinoso Cuello, que ordenó que el hombre sea aprehendido. Mientras tanto, les ordenó a los uniformados que reunieran la mayor cantidad de pruebas posibles. En base a varios testimonios, los investigadores, al mando del comisario Jorge Nacusse, establecieron cuál había sido el hotel alojamiento al que habría concurrido el denunciado.

Se presentaron en el albergue y pidieron, con medida judicial en mano, que se les facilitara observar las imágenes de la cámara de seguridad que tiene para filmar a todas las personas que ingresan al lugar. Allí establecieron que el 24 de julio el acusado había entrado al hotel con la víctima. Con las pruebas que existen en poder de la Justicia, se ordenó su detención y ahora la fiscala tiene ocho días hábiles para definir si le pide que le dicten la prisión preventiva.

Paralelamente, la Policía seguirá investigando al sospechoso, ya que podría estar vinculado a otros casos similares, ya que son varias las denuncias de adolescentes que fueron abusados o acosados por desconocidos a través de las redes sociales.

“Es normal que la gente colabore en algunos delitos, pero siempre es recomendable que la Policía esté al tanto”, aseguró la fiscala Reinoso Cuello en una charla con LA GACETA. “Y lo es porque se puede poner en peligro la vida de las víctimas”, agregó.

La investigadora informó que muchos tucumanos ayudan a reunir pruebas en casos de amenazas de muerte recolectando datos e identificando números de personas. “Sin embargo, siempre es recomendable que pongan al tanto de las autoridades lo que está sucediendo”, concluyó Reinoso Cuello.