Un joven detenido podría ser el autor de dos homicidios

Lo habían acusado de un crimen, pero cuando lo fueron a buscar descubrieron que era la misma persona que tenía pedido de captura por ser el principal sospechoso de otro homicidio. La Policía detuvo en Alderetes a un joven de 21 años que, según las pruebas que recolectaron en el lugar, le habría quitado la vida a un cocinero y a un sereno, en menos de 40 días.

El martes 19 de julio, en un departamento de San Lorenzo 30, fue encontrado sin vida Juan Antonio Moya, de 42 años. Lo habían asesinado de varias puñaladas. Después de que sus allegados observaron la casa, descubrieron que le faltaban varias pertenencias.

Los oficiales Cinthia Benedeti y Gastón Juárez de la División Homicidios, supervisados por los comisarios Luis Bacas, Fabián Salvatore, Hugo Cabezas y Sergio Juárez, comenzaron a investigar el caso. A través de las cámaras de seguridad instaladas en la zona y la de un comercio descubrieron la imagen de un hombre subiendo a un taxi el día del crimen. Identificaron la licencia del vehículo y establecieron dónde vivía el chofer. La oficial fingió ser una pasajera y conversó con el chofer durante un viaje. Le preguntó si él había llevado a un joven la noche del crimen. El conductor, luego de enterarse de lo que podría haber ocurrido con ese hombre, no tuvo problemas en testificar. Ante la Policía dio detalles del lugar donde había dejado al pasajero esa noche.

Pedido de allanamiento

Los investigadores solicitaron una orden de allanamiento que fue aceptada por la Justicia. Anoche se trasladaron hasta el barrio Teresa Calcuta, de la ciudad de Alderetes. Cuando golpearon la puerta se dieron cuenta de que el hombre que buscaban era el mismo que tenía orden de captura por el crimen de José Antonio Escobar, el sereno que fue ultimado en una obra en construcción en Las Talitas el 15 de junio pasado.

Por este hecho se encuentra detenida la novia del acusado, que lo señaló como el autor material del homicidio. La Policía, en un allanamiento realizado en su vivienda, encontró ropa con manchas de sangre de la víctima y algunos de los elementos robados de la obra.

Durante el allanamiento de anoche los investigadores de Homicidios confirmaron que habían encontrado varios de los objetos desaparecidos de la casa de Moya.

Sospecha

Los pesquisas encontraron puntos comunes en ambos casos. Primero: ambas víctimas eran personas mayores de 40 años sin pareja estable, que no daban demasiados detalles sobre su vida sentimental.

Segundo: ambos murieron después de haber sido atacados con armas blancas. Los ataques, según los peritos, fueron violentos y hasta realizados con saña.

Hay otro dato que ahora no pasa por alto para los investigadores. El agresor no violentó la puerta de ingreso de los lugares donde habría cometido esos crímenes. Por ello, se sospecha que mantenía algún tipo de relación con las víctimas o, por lo menos, confiaban en él.

Con estos elementos, personal de Homicidios decidió investigar otros crímenes similares que siguen impunes, ya que sospechan que este joven podría ser un asesino serial.

El acusado deberá declarar hoy en Tribunales. Primero se presentará ante el fiscal Diego López Ávila -investiga el crimen del cocinero- y después con Arnoldo Suasnábar, que atiende el caso del sereno. Además, durante el allanamiento se secuestró una moto que había sido robada hace más de un mes, por lo que también deberá afrontar cargos por ese caso.