31 Julio 2016
Ángel Morales (izquierda) / ARCHIVO
El personal no docente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) cuestionó el informe que encara la Nación en medio de la crisis que el Rectorado afronta para reducir el déficit acumulado de $ 700 millones. La Asociación del Personal de la UNT (Apunt), salió al cruce luego de que se conocieran incongruencias en las planillas de personal: mientras que la Universidad reconoce 3.057 no docentes, la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) contabiliza 2.965 agentes no docentes. “Nos llama la atención la insistencia de hacer responsable al sector del déficit que padece la UNT”, rechazaron desde el gremio que comanda Ángel “Zurdo” Morales.
El funcionamiento de la UNT alarma al Ministerio de Educación de la Nación desde que asumió en la cartera Esteban Bullrich, tras el cambio de gobierno. Danya Tavela, subsecretaria de Políticas Universitarias del ministerio dijo a este diario que se propuso a fines de junio un análisis en conjunto de las finanzas, entre Estado y autoridades de la casa de estudios. La SPU encomendó a Adriana Broto, directora nacional de Presupuesto e Información Universitaria el análisis de las cuentas de la casa de Juan B. Terán. El primer informe será presentado a fines de agosto.
“Somos conscientes de la difícil situación económica que atraviesa la UNT, pero no se entiende cuando la Universidad expresa que la causa del déficit la genera el sector no docente, y mientras tanto se abonan retroactivos de sumas considerables a otros sectores”, señalaron desde Apunt. Indicaron, además, que nunca se les comunicaron las medidas a adoptar luego de las reuniones entre funcionarios del Rectorado y de la SPU.
Morales comentó que desde el sector enviaron una nota a la rectora, Alicia Bardón, donde plantearon su disconformidad de aceptar que técnicos de la SPU realicen controles periódicos de la planta de personal. Además, solicitó la puesta en vigencia del Reglamento de Concursos No Docentes, acordado por convenio. El gremio convocó a una asamblea esta semana para analizar la situación económica y el régimen de concursos para los agentes no docentes.
En la semana, el vicerrector José García había explicado que la SPU no podía desconocer la incorporación de 315 no docentes por intermedio de contratos-programa, autorizados por la gestión anterior y la actual. “Los nombramientos no los hicimos irresponsablemente. Si ahora ellos no tienen dinero para girarnos tendrán que verlo. Si apuntan a los no docentes vamos a defender lo que hicimos”, había asegurado. García consignó que la universidad conocería en breve los ingresos y egresos para elaborar un mapa del déficit. Desde la UNT esperaban tener las cifras antes del informe que elabora la Nación.
García consideró que la situación actual de las finanzas se debe a que la UNT está pagando “la fiesta de YMAD”, refiriéndose a los millones derivados de las utilidades mineras que la universidad recibió de 2006 a 2015 por la explotación de la mina La Alumbrera. “Esta universidad ha crecido en personal y en metros cuadrados con una plata que no era universitaria, la que venía de YMAD. En 2015 sólo enviaron $10 millones y luego al cortarse empiezan a aparecer ciertas situaciones. Al no llegar YMAD hay que sentarse a ver cómo vamos a hacer”, advirtió el vicerrector.
Otro flanco del Rectorado está enfocado en que aumente la tasa de alumnos regulares y la de egresos, que también definen el porcentaje de fondos que la Nación asigna a las Universidades. Según el Rectorado, en 2015 había 64.315 alumnos de grado y pregrado, mientras que la cantidad de egresos en el año fue de 2.452.
El funcionamiento de la UNT alarma al Ministerio de Educación de la Nación desde que asumió en la cartera Esteban Bullrich, tras el cambio de gobierno. Danya Tavela, subsecretaria de Políticas Universitarias del ministerio dijo a este diario que se propuso a fines de junio un análisis en conjunto de las finanzas, entre Estado y autoridades de la casa de estudios. La SPU encomendó a Adriana Broto, directora nacional de Presupuesto e Información Universitaria el análisis de las cuentas de la casa de Juan B. Terán. El primer informe será presentado a fines de agosto.
“Somos conscientes de la difícil situación económica que atraviesa la UNT, pero no se entiende cuando la Universidad expresa que la causa del déficit la genera el sector no docente, y mientras tanto se abonan retroactivos de sumas considerables a otros sectores”, señalaron desde Apunt. Indicaron, además, que nunca se les comunicaron las medidas a adoptar luego de las reuniones entre funcionarios del Rectorado y de la SPU.
Morales comentó que desde el sector enviaron una nota a la rectora, Alicia Bardón, donde plantearon su disconformidad de aceptar que técnicos de la SPU realicen controles periódicos de la planta de personal. Además, solicitó la puesta en vigencia del Reglamento de Concursos No Docentes, acordado por convenio. El gremio convocó a una asamblea esta semana para analizar la situación económica y el régimen de concursos para los agentes no docentes.
En la semana, el vicerrector José García había explicado que la SPU no podía desconocer la incorporación de 315 no docentes por intermedio de contratos-programa, autorizados por la gestión anterior y la actual. “Los nombramientos no los hicimos irresponsablemente. Si ahora ellos no tienen dinero para girarnos tendrán que verlo. Si apuntan a los no docentes vamos a defender lo que hicimos”, había asegurado. García consignó que la universidad conocería en breve los ingresos y egresos para elaborar un mapa del déficit. Desde la UNT esperaban tener las cifras antes del informe que elabora la Nación.
García consideró que la situación actual de las finanzas se debe a que la UNT está pagando “la fiesta de YMAD”, refiriéndose a los millones derivados de las utilidades mineras que la universidad recibió de 2006 a 2015 por la explotación de la mina La Alumbrera. “Esta universidad ha crecido en personal y en metros cuadrados con una plata que no era universitaria, la que venía de YMAD. En 2015 sólo enviaron $10 millones y luego al cortarse empiezan a aparecer ciertas situaciones. Al no llegar YMAD hay que sentarse a ver cómo vamos a hacer”, advirtió el vicerrector.
Otro flanco del Rectorado está enfocado en que aumente la tasa de alumnos regulares y la de egresos, que también definen el porcentaje de fondos que la Nación asigna a las Universidades. Según el Rectorado, en 2015 había 64.315 alumnos de grado y pregrado, mientras que la cantidad de egresos en el año fue de 2.452.