17 Julio 2016
EN VENTA. El helicóptero provincial fue adquirido en 2004 por Alperovich. la gaceta / foto de osvaldo ripoll
La Secretaría General de la Gobernación avanza en las gestiones para adquirir un nuevo helicóptero. Si bien la Provincia ya posee una aeronave de este tipo, el objetivo es que la nueva unidad permita más prestaciones. Para su compra, que se realizará por medio de una licitación pública, se analiza entregar el helicóptero que posee el Poder Ejecutivo como forma de pago.
El interés se produce porque el helicóptero que forma parte de la flota de la Provincia no puede volar de noche ni desplegarse en un clima hostil, según el protocolo de aviación. “Son herramientas de trabajo que salvan vidas”, explicó el gobernador, Juan Manzur
“El helicóptero que tenemos es relativamente nuevo, pero tenemos algunas limitaciones. Se trata de una unidad de una sola turbina, que no permite volar de noche, sobre poblaciones urbanas ni aterrizar sobre edificios. Han surgido demandas para uso tanto en materia de seguridad como en salud. Iniciamos una serie de consultas con los tres grandes oferentes de helicópteros del mundo”, explicó Pablo Yedlin, secretario General de la Gobernación.
Yedlin precisó que ya hubo reuniones con dos firmas (Bell y Augusta) de las tres empresas del rubro (resta Eurocopter). El precio de mercado de un helicóptero con dos motores y las características buscadas ronda los U$S 7 millones,; es decir, $ 105 millones. Si bien aún no está definido, la idea es entregar la aeronave que ya posee la Provincia, por la que podría reconocerse hasta un tercio del valor del nuevo modelo.
“Muchas áreas del Estado pueden trabajar con un helicóptero bi turbina; podrá usarse en materia de seguridad, de salud (una unidad de mayor tamaño podrá trasladar dos camillas) y también para defensa civil, sea para evacuación o sofocar incendios”, se explayó Yedlin.
Hace una semana, en Casa de Gobierno se reunieron funcionarios de las áreas de Seguridad, Emergencias Sanitarias y de la Dirección de Aeronáutica para el análisis de las opciones de compra. El secretario de Seguridad, Paul Hofer, destacó la funcionalidad en materia de prevención del delito. “Una unidad con tecnología de punta puede ayudar a mejorar la tarea operativa policial para mejorar los recorridos, fundamentalmente en horas de la noche, y neutralizar cualquier actividad delictiva”, explicó el funcionario.
“Un helicóptero bi motor permitirá brindar asistencia en alta montaña para volar hasta 5.000 metros o la capacidad de traslado de cargas para trabajar en incendios y llevar entre 500 y 1.000 litros de agua. Nuestro helicóptero es muy bueno, pero no tiene la biónica suficiente para volar de noche o en momentos de niebla”, detalló el director de Aeronáutica, Luis Rosas.
La flota de la Provincia está conformada por tres aeronaves. Todas fueron compradas durante las sucesivas gobernaciones del ex mandatario José Alperovich (2003-2015). El primero fue el helicóptero Bell 407, adquirido en 2004. El proceso estuvo signado por la polémica, porque fue adquirido mediante compra directa, sin cotejo de precios ni licitaciones. Luego de que el Tribunal de Cuentas la autorizara, la Provincia desembolsó U$S 1,6 millón. En 2006 se concretó la compra del avión Cessna Citation Bravo (patente LV-BEU), por U$S 6 millones. En 2011 llegó el turno del Lear Jet (patetne LV-CKA), por U$S 7,8 millones.
El interés se produce porque el helicóptero que forma parte de la flota de la Provincia no puede volar de noche ni desplegarse en un clima hostil, según el protocolo de aviación. “Son herramientas de trabajo que salvan vidas”, explicó el gobernador, Juan Manzur
“El helicóptero que tenemos es relativamente nuevo, pero tenemos algunas limitaciones. Se trata de una unidad de una sola turbina, que no permite volar de noche, sobre poblaciones urbanas ni aterrizar sobre edificios. Han surgido demandas para uso tanto en materia de seguridad como en salud. Iniciamos una serie de consultas con los tres grandes oferentes de helicópteros del mundo”, explicó Pablo Yedlin, secretario General de la Gobernación.
Yedlin precisó que ya hubo reuniones con dos firmas (Bell y Augusta) de las tres empresas del rubro (resta Eurocopter). El precio de mercado de un helicóptero con dos motores y las características buscadas ronda los U$S 7 millones,; es decir, $ 105 millones. Si bien aún no está definido, la idea es entregar la aeronave que ya posee la Provincia, por la que podría reconocerse hasta un tercio del valor del nuevo modelo.
“Muchas áreas del Estado pueden trabajar con un helicóptero bi turbina; podrá usarse en materia de seguridad, de salud (una unidad de mayor tamaño podrá trasladar dos camillas) y también para defensa civil, sea para evacuación o sofocar incendios”, se explayó Yedlin.
Hace una semana, en Casa de Gobierno se reunieron funcionarios de las áreas de Seguridad, Emergencias Sanitarias y de la Dirección de Aeronáutica para el análisis de las opciones de compra. El secretario de Seguridad, Paul Hofer, destacó la funcionalidad en materia de prevención del delito. “Una unidad con tecnología de punta puede ayudar a mejorar la tarea operativa policial para mejorar los recorridos, fundamentalmente en horas de la noche, y neutralizar cualquier actividad delictiva”, explicó el funcionario.
“Un helicóptero bi motor permitirá brindar asistencia en alta montaña para volar hasta 5.000 metros o la capacidad de traslado de cargas para trabajar en incendios y llevar entre 500 y 1.000 litros de agua. Nuestro helicóptero es muy bueno, pero no tiene la biónica suficiente para volar de noche o en momentos de niebla”, detalló el director de Aeronáutica, Luis Rosas.
La flota de la Provincia está conformada por tres aeronaves. Todas fueron compradas durante las sucesivas gobernaciones del ex mandatario José Alperovich (2003-2015). El primero fue el helicóptero Bell 407, adquirido en 2004. El proceso estuvo signado por la polémica, porque fue adquirido mediante compra directa, sin cotejo de precios ni licitaciones. Luego de que el Tribunal de Cuentas la autorizara, la Provincia desembolsó U$S 1,6 millón. En 2006 se concretó la compra del avión Cessna Citation Bravo (patente LV-BEU), por U$S 6 millones. En 2011 llegó el turno del Lear Jet (patetne LV-CKA), por U$S 7,8 millones.