15 Julio 2016
ALIENTO. Los simpatizantes argentinos se hicieron escuchar en la entrada del edificio del gobierno comunal de Pesaro. Hoy, el apoyo puede ser clave para ganar. télam
Obvio resulta decir que Argentina hubiese elegido ser local en los cuartos de final de la Copa Davis. Pero, de las opciones que había pasada la primera ronda, visitar Italia lucía conveniente: prácticamente aseguraba el polvo de ladrillo como superficie y no ponía a ningún rival “imposible” dentro de la cancha.
Pasó el tiempo y el panorama que enfrenta el equipo de Daniel Orsanic es mejor aún que en marzo, tras vencer a Polonia. La presencia de Juan Martín Del Potro suma dentro y fuera de la cancha. ¿Cuál será su influencia real? Para eso habrá que esperar al menos un par de días pero, hasta tanto, los italianos tienen como rival a un equipo fuerte que, además, luce fortalecido por la presencia de un “fuori” clase mundial.
En los hechos, la acción comienza con Federico Delbonis y Andreas Seppi, para un primer punto (se juega desde las 7.30, televisa TyC Sports) en el que cuesta no imaginar al argentino como candidato. En cancha lenta, con calor y a orillas del mar, la condición de especialista del azuleño debería marcar una diferencia a su favor. El peso de pelota de su drive cruzado al revés del italiano puede ser la llave estratégica de su triunfo.
Si esto ocurre, Juan Mónaco jugará con red de contención frente al impredecible Fabio Fognini. Pero cuidado: de flojo 2016, el 36 del ranking tiene frente a un nombre de categoría como “Pico”, y ante su público, el escenario casi perfecto para relanzar su temporada. Es cierto que para conseguirlo deberá vencer a alguien con experiencia, jerarquía y sed de revancha: en enero de 2014, en Mar del Plata, justamente Fognini le ganó con mucha facilidad en la última participación copera del tandilense.
Para viernes y para la serie toda, el pronóstico es reservado. Tanto que podríamos titular “50 y 50”. Cerrada, pareja, llena de incógnitas y posibilidades. En fin, una serie para disfrutar de principio a fin, más allá del resultado final.
Pasó el tiempo y el panorama que enfrenta el equipo de Daniel Orsanic es mejor aún que en marzo, tras vencer a Polonia. La presencia de Juan Martín Del Potro suma dentro y fuera de la cancha. ¿Cuál será su influencia real? Para eso habrá que esperar al menos un par de días pero, hasta tanto, los italianos tienen como rival a un equipo fuerte que, además, luce fortalecido por la presencia de un “fuori” clase mundial.
En los hechos, la acción comienza con Federico Delbonis y Andreas Seppi, para un primer punto (se juega desde las 7.30, televisa TyC Sports) en el que cuesta no imaginar al argentino como candidato. En cancha lenta, con calor y a orillas del mar, la condición de especialista del azuleño debería marcar una diferencia a su favor. El peso de pelota de su drive cruzado al revés del italiano puede ser la llave estratégica de su triunfo.
Si esto ocurre, Juan Mónaco jugará con red de contención frente al impredecible Fabio Fognini. Pero cuidado: de flojo 2016, el 36 del ranking tiene frente a un nombre de categoría como “Pico”, y ante su público, el escenario casi perfecto para relanzar su temporada. Es cierto que para conseguirlo deberá vencer a alguien con experiencia, jerarquía y sed de revancha: en enero de 2014, en Mar del Plata, justamente Fognini le ganó con mucha facilidad en la última participación copera del tandilense.
Para viernes y para la serie toda, el pronóstico es reservado. Tanto que podríamos titular “50 y 50”. Cerrada, pareja, llena de incógnitas y posibilidades. En fin, una serie para disfrutar de principio a fin, más allá del resultado final.
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