Seis claves para entender cómo será el nuevo Procrear

Por Tobías Fernández 22 Junio 2016

El escenario económico aún no es óptimo para endeudarse a largo plazo con un préstamo hipotecario. La inflación, que superó el 40% en los últimos doce meses, y las elevadas tasas de interés que aplica el sistema financiero complican las condiciones para acceder a este tipo de empréstitos.

No obstante, con la expectativa de que la tasa de inflación comience a descender, el Gobierno nacional anunció una nueva versión Programa de Crédito Argentino (Procrear), que existió durante la administración kirchnerista. A continuación, algunas claves para entender la dinámica de estos créditos que, según fuentes del sistema financiero, se pondría en marcha entre septiembre y octubre:

1- El nuevo Procrear se ofrecerá en todos los bancos del país. En la versión anterior, sólo se podía acceder mediante un sorteo de la Anses. El agente de préstamo y de cobro era del Banco Hipotecario.

2- Aún no se definió la cantidad de dinero que se podrá solicitar en el nuevo crédito ni la tasa de interés que pagarán los solicitantes. En la edición kirchnerista, el monto promedio que prestaba el Procrear era de $ 354.000, a una tasa fija y anual del 7,5%.

3- El costo del nuevo préstamo se ajustará mediante las Unidades de Viviendas (UVI), las mismas que se utilizan para calcular el valor de las cuotas en los créditos hipotecarios que el Gobierno anunció en abril. Las UVI ajustarán, cada mes, el valor de la cuota según la tasa de inflación.

4- En la versión anterior del Procrear, el costo del crédito era financiado por el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses).

5- El Gobierno de Cambiemos pretende que todos los bancos den préstamos Procrear con UVI y que el Estado aporte, a los solicitantes de bajos ingresos, un subsidio en efectivo para completar el valor de la propiedad que quieren comprar.

6- En el programa anterior, el Gobierno también subsidiaba a los solicitantes, pero el aporte se reflejaba en la tasa baja de interés. Sin embargo, con una inflación superior al 25%, el monto del préstamo era insuficiente para adquirir la propiedad. En el nuevo esquema, los bancos otorgarán el crédito según la capacidad de pago del deudor.