21 Junio 2016
ESTÁS RODEADO. De pechera y jogging, Messi responde a iuna de las tantas atenciones que recibe en el estadio Levi’s de Santa Clara, California. USA Today Sports
Ya concluidas las finales de la NBA y con una atractiva semifinal ante el anfitrión a la vista, Lionel Messi reclama ahora sí el centro de la atención del deporte en los Estados Unidos, cuando lo enfrente con Argentina hoy, a las 22.
El rosarino es la principal referencia durante las no muy frecuentes alusiones al torneo en los medios locales. Sin embargo, la semifinal promete generar un fuerte interés.
El delantero argentino convoca a locales y extranjeros y supo llenar estadios tanto como la selección anfitriona. No importa la bandera, todos quieren ver a Messi. Su lesión en la espalda puso en aprietos a los organizadores al inicio y provocó una demora en su debut. Pero a su regreso, y sin otras grandes figuras en el torneo por las ausencias del brasileño Neymar y el uruguayo Luis Suárez, todo pasó por el ganador de cinco Balones de Oro.
En su reaparición necesitó apenas un rato para dar una clase magistral de fútbol ante Panamá en Chicago, con un “hat-trick” en menos de media hora de juego. Deslumbró con caños al arquero de Bolivia, asistencias exquisitas ante Venezuela y otro gol que le permitió alcanzar el récord como máximo artillero de la selección que esgrimía Gabriel Batistuta.
El astro acapara las noticias, todo pasa por él en el poco espacio que se le dedica al torneo en EE.UU. En Chicago, se lo comparó con Michael Jordan. En Seattle -considerada la capital del fútbol en Estados Unidos-, llenó con casi la misma cantidad de gente el CenturyLink Field que la selección anfitriona. Y en Foxborough tuvo un estadio rendido a sus pies.
“La gente quiere ver jugar a Messi, no le va a importar el resultado de la semifinal”, declaró Marcelo Balboa, ex capitán de la selección estadounidense en los años 90. “Para mí el resultado es importante porque quiero que gane Estados Unidos, pero para muchos de los que irán al estadio sólo importará ver jugar a Messi. Nosotros no lo podemos ver jugar en vivo nunca acá”, sostuvo.
Una muestra clara del fanatismo por Messi es la cantidad de camisetas celestes y blancas y de Barcelona con su nombre en la espalda que desfilan en cada partido de Argentina, sin que sus portadores sean siquiera argentinos. Es consecuencia directa de la pasión por el fútbol de los inmigrantes latinos y sus descendientes. Y que de a poco se empieza a contagiar en Estados Unidos.
La MLS, hace inversiones millonarias en jugadores para jerarquizar su fútbol y la presencia de Messi en territorio estadounidense es un fuerte impulso. La decisión de organizar la Copa en Estados Unidos, fuera de agenda y en medio del escándalo por corrupción que salpica a la FIFA, fue una apuesta arriesgada. Pero con Messi en carrera, la ecuación cambia.
Más allá de sus problemas con la Justicia española y una lesión en la espalda, el delantero llegó a Estados Unidos decidido a cumplir un sólo objetivo: conquistar al fin un título. Y Estados Unidos, aunque pueda ser su víctima, quiere ser testigo de ello.
Martino, mal por Gaitán
“Es una lástima no tenerlo a Gaitán para este partido, lo reemplazaremos de la mejor manera”, dijo Gerardo Martino en la rueda de prensa previa al partido. Sobre el hecho de que Estados Unidos llegará más descansado, no quiso polemizar. “Sabíamos cuál era el esquema de los partidos y no tengo nada que decir sobre el descanso”, explicó el entrenador.
“Será difícil detenerlo”
“Detener a Messi será una prueba difícil. Intentaremos frenar su juego, sabemos que es muy rápido y que puede marcar un gol en cualquier momento, pero mañana será nuestro momento y hay que intentarlo”, dijo Clint Dempsey, delantero y figura de Estados Unidos.
Los galeses, a octavos
Gales e Inglaterra, en la primera y en la segunda posición respectivamente, clasificaron ayer a los octavos de final de la Eurocopa de Francia, mientras que Eslovaquia tiene grandes chances de pasar a la siguiente ronda como uno de los mejores terceros. Gales goleó a Rusia por 3 a 0, y se quedó con el primer puesto. Inglaterra empató con Eslovaquia sin goles y avanzó como segundo pero dejó con chances de mejor tercero a su rival.
Alemania busca clasificar
Alemania, vigente campeón mundial, se enfrentará hoy a las 13 con Irlanda del Norte en París, por la tercera y última fecha del grupo C, con el objetivo de lograr al menos un empate para avanzar a los octavos de final. A la misma hora, Polonia intentará emularlo cuando enfrente a los ya eliminados ucranianos. En el grupo D, España jugará ante Croacia desde las 16 en un partido que, en caso de empate, le permitirá a ambos cumplir con sus objetivos: los dirigidos por Vicente Del Bosque se garantizarían el primer lugar y los croatas, la clasificación como segundos. República Checa se medirá a la misma hora con el eliminado Turquía.
Premio para los albaneses
Los jugadores de la selección albanesa recibirán pasaportes diplomáticos tras su histórica victoria frente a Rumania por 1-0, en la Eurocopa. Así se lo hizo saber el primer ministro albanés, Edi Rama, al presidente de la federación de fútbol de ese país, Armand Duk, después del partido del domingo. El equipo recibirá además un premio de un millón de euros por su actuación en el torneo.
El rosarino es la principal referencia durante las no muy frecuentes alusiones al torneo en los medios locales. Sin embargo, la semifinal promete generar un fuerte interés.
El delantero argentino convoca a locales y extranjeros y supo llenar estadios tanto como la selección anfitriona. No importa la bandera, todos quieren ver a Messi. Su lesión en la espalda puso en aprietos a los organizadores al inicio y provocó una demora en su debut. Pero a su regreso, y sin otras grandes figuras en el torneo por las ausencias del brasileño Neymar y el uruguayo Luis Suárez, todo pasó por el ganador de cinco Balones de Oro.
En su reaparición necesitó apenas un rato para dar una clase magistral de fútbol ante Panamá en Chicago, con un “hat-trick” en menos de media hora de juego. Deslumbró con caños al arquero de Bolivia, asistencias exquisitas ante Venezuela y otro gol que le permitió alcanzar el récord como máximo artillero de la selección que esgrimía Gabriel Batistuta.
El astro acapara las noticias, todo pasa por él en el poco espacio que se le dedica al torneo en EE.UU. En Chicago, se lo comparó con Michael Jordan. En Seattle -considerada la capital del fútbol en Estados Unidos-, llenó con casi la misma cantidad de gente el CenturyLink Field que la selección anfitriona. Y en Foxborough tuvo un estadio rendido a sus pies.
“La gente quiere ver jugar a Messi, no le va a importar el resultado de la semifinal”, declaró Marcelo Balboa, ex capitán de la selección estadounidense en los años 90. “Para mí el resultado es importante porque quiero que gane Estados Unidos, pero para muchos de los que irán al estadio sólo importará ver jugar a Messi. Nosotros no lo podemos ver jugar en vivo nunca acá”, sostuvo.
Una muestra clara del fanatismo por Messi es la cantidad de camisetas celestes y blancas y de Barcelona con su nombre en la espalda que desfilan en cada partido de Argentina, sin que sus portadores sean siquiera argentinos. Es consecuencia directa de la pasión por el fútbol de los inmigrantes latinos y sus descendientes. Y que de a poco se empieza a contagiar en Estados Unidos.
La MLS, hace inversiones millonarias en jugadores para jerarquizar su fútbol y la presencia de Messi en territorio estadounidense es un fuerte impulso. La decisión de organizar la Copa en Estados Unidos, fuera de agenda y en medio del escándalo por corrupción que salpica a la FIFA, fue una apuesta arriesgada. Pero con Messi en carrera, la ecuación cambia.
Más allá de sus problemas con la Justicia española y una lesión en la espalda, el delantero llegó a Estados Unidos decidido a cumplir un sólo objetivo: conquistar al fin un título. Y Estados Unidos, aunque pueda ser su víctima, quiere ser testigo de ello.
Martino, mal por Gaitán
“Es una lástima no tenerlo a Gaitán para este partido, lo reemplazaremos de la mejor manera”, dijo Gerardo Martino en la rueda de prensa previa al partido. Sobre el hecho de que Estados Unidos llegará más descansado, no quiso polemizar. “Sabíamos cuál era el esquema de los partidos y no tengo nada que decir sobre el descanso”, explicó el entrenador.
“Será difícil detenerlo”
“Detener a Messi será una prueba difícil. Intentaremos frenar su juego, sabemos que es muy rápido y que puede marcar un gol en cualquier momento, pero mañana será nuestro momento y hay que intentarlo”, dijo Clint Dempsey, delantero y figura de Estados Unidos.
Los galeses, a octavos
Gales e Inglaterra, en la primera y en la segunda posición respectivamente, clasificaron ayer a los octavos de final de la Eurocopa de Francia, mientras que Eslovaquia tiene grandes chances de pasar a la siguiente ronda como uno de los mejores terceros. Gales goleó a Rusia por 3 a 0, y se quedó con el primer puesto. Inglaterra empató con Eslovaquia sin goles y avanzó como segundo pero dejó con chances de mejor tercero a su rival.
Alemania busca clasificar
Alemania, vigente campeón mundial, se enfrentará hoy a las 13 con Irlanda del Norte en París, por la tercera y última fecha del grupo C, con el objetivo de lograr al menos un empate para avanzar a los octavos de final. A la misma hora, Polonia intentará emularlo cuando enfrente a los ya eliminados ucranianos. En el grupo D, España jugará ante Croacia desde las 16 en un partido que, en caso de empate, le permitirá a ambos cumplir con sus objetivos: los dirigidos por Vicente Del Bosque se garantizarían el primer lugar y los croatas, la clasificación como segundos. República Checa se medirá a la misma hora con el eliminado Turquía.
Premio para los albaneses
Los jugadores de la selección albanesa recibirán pasaportes diplomáticos tras su histórica victoria frente a Rumania por 1-0, en la Eurocopa. Así se lo hizo saber el primer ministro albanés, Edi Rama, al presidente de la federación de fútbol de ese país, Armand Duk, después del partido del domingo. El equipo recibirá además un premio de un millón de euros por su actuación en el torneo.
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