cartas de lectores============09 CRED (10398659)============la gaceta / foto de jorge olmos sgrosso============02 TEX EDI Cartas Título OK (10398667)============n Plaza YrigoyenMuy bueno de parte de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán por la remodelación de la plaza Hipólito Yrigoyen donde, aprovechando el envión de las obras de remozamiento del Palacio de Justicia, decidió hacerle un mimo al paseo que hospeda la estatua de Yrigoyen, una singular escultura de la artista Ernestina Azlor (1914-2001). Están siendo reparadas las caminerías, han sido pintados los pies de hierro de las farolas, renovaron la iluminación, fue nivelado el terreno para evitar las acumulaciones de agua, se está reemplazando el césped y, quizás lo más importante, se ha restaurado la escultura cincelada en mármol travertino e inaugurada en 1942. El año del Bicentenario de la Independencia es también el centenario del sufragio universal masculino y secreto. Las elecciones del 12 de octubre de 1916 consagraron a Hipólito Yrigoyen, de la Unión Cívica Radical, como el primer presidente constitucional de la Argentina elegido con ese sistema electoral; entonces, la revalorización de la plaza y la restauración del monumento de Yrigoyen también conmemoran esa fecha. Sería prudente que antes de la inauguración de las mejoras, se corrija el apellido de este honorable prócer: cambiar la letra “I” por la letra “Y”, ya que el apellido de este ilustre radical es “Yrigoyen” y no “Irigoyen” como se encuentra escrito. (Al respecto, existe un expediente de solicitud en mesa de entradas de la Municipalidad, con el N° 2388/260/2016 firmado por mí, por Amado Apud, Carlos Navor Gerez, Roberto Beltrán, entre otros).Humberto Carmelo Spuches
[email protected] ============02 TEX EDI Cartas Título OK (10398673)============n Bicentenario en LulesPretendo por medio de estas líneas llamar la atención de las autoridades de la ciudad de Lules, para reparar un atropello perpetrado a nuestra historia, por un “iluminado” que manejó el municipio. Nuestra plaza se denomina 9 de Julio, y en ella, años atrás, en el triángulo sudeste, se encontraba un pedestal de 1,80 metro sobre el mismo busto (tallado en bronce) del presidente de la Asamblea que declaró nuestra Independencia: Francisco Narciso de Laprida, con una pequeña caminería en donde todos los 9 de julio las fuerzas vivas le rendían homenaje. Alumnos y docentes de las escuelas, autoridades, instituciones, depositaban sus ofrendas, se leían discursos alusivos, poesías y posteriormente se realizaba el desfile. Este iluminado de luces apagadas no tuvo mejor idea que retirar el pedestal con el busto y desapareció de la faz de la tierra. Esta conmemoración de 200 años de nuestra independencia debería revertir este atropello, erigiendo un nuevo pedestal con un busto del presidente Laprida, en el mismo lugar en el que se encontraba el que desapareció, y así volver a rendir los homenajes que corresponden. En otra oportunidad y por este medio pregunté dónde está Laprida. Nadie respondió. Seguimos haciéndonos la misma pregunta. Manuel D. A. Mesurado Ballesteros 174 Lulesn Perdió Güemes Nuestros legisladores, políticos y periodistas lucharon arduamente en polémicas memorables sobre la necesidad de declarar el 17 de junio feriado obligatorio, en homenaje al General Martín Miguel de Güemes, el heroico patriota de la guerra gaucha. Que sí, que no, que si salía la ley el Ejecutivo la vetaría; páginas enteras, si estaría para este año o a partir del 2017. Los colegios, las universidades, los bancos, los comercios, el periodismo, los meteorólogos, todos especulando más sobre la incidencia de la fecha en un feriado largo que en el homenaje al gran salteño. ¡Noticia del 16 de junio!: “La mayoría de los comercios abrirá mañana” (por el feriado). Dijeron que lo hacían para no perder ventas del Día del Padre. Así lo informó CAME en base a un sondeo propio (en el que perdió Güemes, obviamente): “Es uno de los días más importantes en ventas”, afirmaron.Silvio Pedro Pizarro
[email protected] n Corrupción IEl 17 de abril pasado, ante el mausoleo de Castro Barros, y con motivo del 167° aniversario de su fallecimiento, la Comisión Histórica Diocesana dio a conocer detalles de una revuelta política vivida en La Rioja, entre abril y octubre de 1816, hace exactamente un bicentenario. Tal como relata fray Cayetano Rodríguez en “El Redactor”, los Villafañe destituyeron a los Dávila, más precisamente al gobernador Manuel Brizuela y Doria, y también al diputado Castro Barros por “venal, faccioso y representante clandestino”. El Congreso General, reunido en Tucumán, se ocupó del asunto en 16 sesiones. En procura de información de primera mano y datos fidedignos, comisionó al teniente coronel Alejandro Heredia para que se constituyese en La Rioja. Cuando se dio cuenta de la difícil situación e informó de los diversos inconvenientes que le impedían cumplir acabadamente la misión, lo auxiliaron con “150 hombres de fusil”. En medio de su relato, Cayetano Rodríguez consigna: “Se pasó oficio al Supremo Director insinuándole la indemnización que debían hacer los insurrectos de La Rioja al Estado por los gastos causados”. Y en la última línea añade: “¿Quedará siempre impune el mal que causaron al Estado?” El 19 de agosto, Castro Barros reclama en el recinto que “el Supremo Director había determinado que los mencionados gastos saliesen de los fondos públicos, siendo que la resolución adoptada por el Congreso había fijado que los abonasen los culpables”. Cualquier relación con los acontecimientos que estamos viviendo en junio de 2016 es “pura coincidencia”. Porque lo que muy pocos se preguntan es: ¿quién pagará todo el operativo que se lleva a cabo por el caso José López? Porque esto también forma parte del bicentenario que estamos celebrando. Juan Aurelio Ortiz
[email protected] n Corrupción IINo cabe ninguna duda que si la Justicia Federal decide ahondar las investigaciones en torno a esclarecer los hechos de corrupción cometidos por funcionarios que fueron parte del gobierno kirchnerista, aparecerán muchos José López, y que en su momento fueron acusados por numerosos delitos relacionados al manejo de los dineros públicos. Y cito algunos hechos de los acaecidos en esta provincia que tuvieran repercusión nacional: los más de 8 millones de pesos destinados a la puesta en marcha del tren Tucumán-Concepción, de cuyo destino nada sabemos; los millones que se gastaron en la “gran mentira”, según la cual volvería a circular el tren Tucumán-Tafí Viejo, y en la que participaron en un acto la ex presidenta y el ex gobernador Alperovich; la obra de la apertura de calle Mendoza y Córdoba, que tampoco se sabe si podrá ser habilitada. Obras que se pagaron y no fueron ejecutadas. Las valijas con millones de pesos que salieron de un banco hacia la Legislatura; y un gobernador elegido a dedo. Todo esto ocurrió en la década ganada por la abogada exitosa. Juan Carlos Monasterio Pasaje Luis Beltrán 1.452San Miguel de Tucumánn final de juegoEn “Match Point”, aquella memorable película de Woody Allen, el azar define si el personaje es o no culpable. La metáfora a la que acude el genio del cine es perfecta: la pelota de tenis moviéndose lentamente sobre la red, ¿pasará o no pasará? De ese hecho aleatorio dependerá el resultado del partido. En los casos de Báez y López, la pelota no pasó. Es lamentable entonces que, en los dos casos, sea el azar, y no la justicia, el que forzó a esta a meter presos a dos integrantes de la asociación ilícita que nos gobernó. Fueron el video de La Rosadita, de Puerto Madero, en el que, el hijo y el contador de Báez, disfrutaban del conteo de millones de dólares y euros robados y ahora, un tal Jesús, denunciando la cinematográfica escena del encargado de las obras públicas de los Kirchner, escondiendo bolsos con parte del saqueo en un Convento -al que intentaron convertir en madriguera- los que obraron el milagro de empujar a la Justicia a actuar sobre dos de los principales operadores de la gigantesca ingeniería operativa y discursiva montada por los Kirchner con el objetivo de enriquecerse y de la que coparticiparon la mayoría de los gobernantes provinciales. Terminaron patéticamente abrazados a montañas de dólares, emulando aquella dantesca escena del maestro de la “escuela de corrupción” que fuera Néstor, en la que celebraba el “éxtasis” que le producía una caja fuerte mientras se aferraba a ella. Se terminó así el largo show de “el proyecto”, “el modelo” y “el relato”, al que se asociaron muchos y con el que engañaron a otros. Final de Juego. José Antonio Nadef
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Plaza Yrigoyen
Muy bueno de parte de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán por la remodelación de la plaza Hipólito Yrigoyen donde, aprovechando el envión de las obras de remozamiento del Palacio de Justicia, decidió hacerle un mimo al paseo que hospeda la estatua de Yrigoyen, una singular escultura de la artista Ernestina Azlor (1914-2001). Están siendo reparadas las caminerías, han sido pintados los pies de hierro de las farolas, renovaron la iluminación, fue nivelado el terreno para evitar las acumulaciones de agua, se está reemplazando el césped y, quizás lo más importante, se ha restaurado la escultura cincelada en mármol travertino e inaugurada en 1942. El año del Bicentenario de la Independencia es también el centenario del sufragio universal masculino y secreto. Las elecciones del 12 de octubre de 1916 consagraron a Hipólito Yrigoyen, de la Unión Cívica Radical, como el primer presidente constitucional de la Argentina elegido con ese sistema electoral; entonces, la revalorización de la plaza y la restauración del monumento de Yrigoyen también conmemoran esa fecha. Sería prudente que antes de la inauguración de las mejoras, se corrija el apellido de este honorable prócer: cambiar la letra “I” por la letra “Y”, ya que el apellido de este ilustre radical es “Yrigoyen” y no “Irigoyen” como se encuentra escrito. (Al respecto, existe un expediente de solicitud en mesa de entradas de la Municipalidad, con el N° 2388/260/2016 firmado por mí, por Amado Apud, Carlos Navor Gerez, Roberto Beltrán, entre otros).
Pretendo por medio de estas líneas llamar la atención de las autoridades de la ciudad de Lules, para reparar un atropello perpetrado a nuestra historia, por un “iluminado” que manejó el municipio. Nuestra plaza se denomina 9 de Julio, y en ella, años atrás, en el triángulo sudeste, se encontraba un pedestal de 1,80 metro sobre el mismo busto (tallado en bronce) del presidente de la Asamblea que declaró nuestra Independencia: Francisco Narciso de Laprida, con una pequeña caminería en donde todos los 9 de julio las fuerzas vivas le rendían homenaje. Alumnos y docentes de las escuelas, autoridades, instituciones, depositaban sus ofrendas, se leían discursos alusivos, poesías y posteriormente se realizaba el desfile. Este iluminado de luces apagadas no tuvo mejor idea que retirar el pedestal con el busto y desapareció de la faz de la tierra. Esta conmemoración de 200 años de nuestra independencia debería revertir este atropello, erigiendo un nuevo pedestal con un busto del presidente Laprida, en el mismo lugar en el que se encontraba el que desapareció, y así volver a rendir los homenajes que corresponden. En otra oportunidad y por este medio pregunté dónde está Laprida. Nadie respondió. Seguimos haciéndonos la misma pregunta.
Manuel D. A. Mesurado
Ballesteros 174
Lules
n Perdió Güemes
Nuestros legisladores, políticos y periodistas lucharon arduamente en polémicas memorables sobre la necesidad de declarar el 17 de junio feriado obligatorio, en homenaje al General Martín Miguel de Güemes, el heroico patriota de la guerra gaucha. Que sí, que no, que si salía la ley el Ejecutivo la vetaría; páginas enteras, si estaría para este año o a partir del 2017. Los colegios, las universidades, los bancos, los comercios, el periodismo, los meteorólogos, todos especulando más sobre la incidencia de la fecha en un feriado largo que en el homenaje al gran salteño. ¡Noticia del 16 de junio!: “La mayoría de los comercios abrirá mañana” (por el feriado). Dijeron que lo hacían para no perder ventas del Día del Padre. Así lo informó CAME en base a un sondeo propio (en el que perdió Güemes, obviamente): “Es uno de los días más importantes en ventas”, afirmaron.
n Corrupción I
El 17 de abril pasado, ante el mausoleo de Castro Barros, y con motivo del 167° aniversario de su fallecimiento, la Comisión Histórica Diocesana dio a conocer detalles de una revuelta política vivida en La Rioja, entre abril y octubre de 1816, hace exactamente un bicentenario. Tal como relata fray Cayetano Rodríguez en “El Redactor”, los Villafañe destituyeron a los Dávila, más precisamente al gobernador Manuel Brizuela y Doria, y también al diputado Castro Barros por “venal, faccioso y representante clandestino”. El Congreso General, reunido en Tucumán, se ocupó del asunto en 16 sesiones. En procura de información de primera mano y datos fidedignos, comisionó al teniente coronel Alejandro Heredia para que se constituyese en La Rioja. Cuando se dio cuenta de la difícil situación e informó de los diversos inconvenientes que le impedían cumplir acabadamente la misión, lo auxiliaron con “150 hombres de fusil”. En medio de su relato, Cayetano Rodríguez consigna: “Se pasó oficio al Supremo Director insinuándole la indemnización que debían hacer los insurrectos de La Rioja al Estado por los gastos causados”. Y en la última línea añade: “¿Quedará siempre impune el mal que causaron al Estado?” El 19 de agosto, Castro Barros reclama en el recinto que “el Supremo Director había determinado que los mencionados gastos saliesen de los fondos públicos, siendo que la resolución adoptada por el Congreso había fijado que los abonasen los culpables”. Cualquier relación con los acontecimientos que estamos viviendo en junio de 2016 es “pura coincidencia”. Porque lo que muy pocos se preguntan es: ¿quién pagará todo el operativo que se lleva a cabo por el caso José López? Porque esto también forma parte del bicentenario que estamos celebrando.
Juan Aurelio Ortiz
n Corrupción II
No cabe ninguna duda que si la Justicia Federal decide ahondar las investigaciones en torno a esclarecer los hechos de corrupción cometidos por funcionarios que fueron parte del gobierno kirchnerista, aparecerán muchos José López, y que en su momento fueron acusados por numerosos delitos relacionados al manejo de los dineros públicos. Y cito algunos hechos de los acaecidos en esta provincia que tuvieran repercusión nacional: los más de 8 millones de pesos destinados a la puesta en marcha del tren Tucumán-Concepción, de cuyo destino nada sabemos; los millones que se gastaron en la “gran mentira”, según la cual volvería a circular el tren Tucumán-Tafí Viejo, y en la que participaron en un acto la ex presidenta y el ex gobernador Alperovich; la obra de la apertura de calle Mendoza y Córdoba, que tampoco se sabe si podrá ser habilitada. Obras que se pagaron y no fueron ejecutadas. Las valijas con millones de pesos que salieron de un banco hacia la Legislatura; y un gobernador elegido a dedo. Todo esto ocurrió en la década ganada por la abogada exitosa.
Juan Carlos Monasterio
Pasaje Luis Beltrán 1.452
San Miguel de Tucumán
n final de juego
En “Match Point”, aquella memorable película de Woody Allen, el azar define si el personaje es o no culpable. La metáfora a la que acude el genio del cine es perfecta: la pelota de tenis moviéndose lentamente sobre la red, ¿pasará o no pasará? De ese hecho aleatorio dependerá el resultado del partido. En los casos de Báez y López, la pelota no pasó. Es lamentable entonces que, en los dos casos, sea el azar, y no la justicia, el que forzó a esta a meter presos a dos integrantes de la asociación ilícita que nos gobernó. Fueron el video de La Rosadita, de Puerto Madero, en el que, el hijo y el contador de Báez, disfrutaban del conteo de millones de dólares y euros robados y ahora, un tal Jesús, denunciando la cinematográfica escena del encargado de las obras públicas de los Kirchner, escondiendo bolsos con parte del saqueo en un Convento -al que intentaron convertir en madriguera- los que obraron el milagro de empujar a la Justicia a actuar sobre dos de los principales operadores de la gigantesca ingeniería operativa y discursiva montada por los Kirchner con el objetivo de enriquecerse y de la que coparticiparon la mayoría de los gobernantes provinciales. Terminaron patéticamente abrazados a montañas de dólares, emulando aquella dantesca escena del maestro de la “escuela de corrupción” que fuera Néstor, en la que celebraba el “éxtasis” que le producía una caja fuerte mientras se aferraba a ella. Se terminó así el largo show de “el proyecto”, “el modelo” y “el relato”, al que se asociaron muchos y con el que engañaron a otros. Final de Juego.
José Antonio Nadef
Plaza Yrigoyen
Muy bueno de parte de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán por la remodelación de la plaza Hipólito Yrigoyen donde, aprovechando el envión de las obras de remozamiento del Palacio de Justicia, decidió hacerle un mimo al paseo que hospeda la estatua de Yrigoyen, una singular escultura de la artista Ernestina Azlor (1914-2001). Están siendo reparadas las caminerías, han sido pintados los pies de hierro de las farolas, renovaron la iluminación, fue nivelado el terreno para evitar las acumulaciones de agua, se está reemplazando el césped y, quizás lo más importante, se ha restaurado la escultura cincelada en mármol travertino e inaugurada en 1942. El año del Bicentenario de la Independencia es también el centenario del sufragio universal masculino y secreto. Las elecciones del 12 de octubre de 1916 consagraron a Hipólito Yrigoyen, de la Unión Cívica Radical, como el primer presidente constitucional de la Argentina elegido con ese sistema electoral; entonces, la revalorización de la plaza y la restauración del monumento de Yrigoyen también conmemoran esa fecha. Sería prudente que antes de la inauguración de las mejoras, se corrija el apellido de este honorable prócer: cambiar la letra “I” por la letra “Y”, ya que el apellido de este ilustre radical es “Yrigoyen” y no “Irigoyen” como se encuentra escrito. (Al respecto, existe un expediente de solicitud en mesa de entradas de la Municipalidad, con el N° 2388/260/2016 firmado por mí, por Amado Apud, Carlos Navor Gerez, Roberto Beltrán, entre otros).
Humberto Carmelo Spuches
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Bicentenario en Lules
Pretendo por medio de estas líneas llamar la atención de las autoridades de la ciudad de Lules, para reparar un atropello perpetrado a nuestra historia, por un “iluminado” que manejó el municipio. Nuestra plaza se denomina 9 de Julio, y en ella, años atrás, en el triángulo sudeste, se encontraba un pedestal de 1,80 metro sobre el mismo busto (tallado en bronce) del presidente de la Asamblea que declaró nuestra Independencia: Francisco Narciso de Laprida, con una pequeña caminería en donde todos los 9 de julio las fuerzas vivas le rendían homenaje. Alumnos y docentes de las escuelas, autoridades, instituciones, depositaban sus ofrendas, se leían discursos alusivos, poesías y posteriormente se realizaba el desfile. Este iluminado de luces apagadas no tuvo mejor idea que retirar el pedestal con el busto y desapareció de la faz de la tierra. Esta conmemoración de 200 años de nuestra independencia debería revertir este atropello, erigiendo un nuevo pedestal con un busto del presidente Laprida, en el mismo lugar en el que se encontraba el que desapareció, y así volver a rendir los homenajes que corresponden. En otra oportunidad y por este medio pregunté dónde está Laprida. Nadie respondió. Seguimos haciéndonos la misma pregunta.
Manuel D. A. Mesurado
Ballesteros 174
Lules
Perdió Güemes
Nuestros legisladores, políticos y periodistas lucharon arduamente en polémicas memorables sobre la necesidad de declarar el 17 de junio feriado obligatorio, en homenaje al General Martín Miguel de Güemes, el heroico patriota de la guerra gaucha. Que sí, que no, que si salía la ley el Ejecutivo la vetaría; páginas enteras, si estaría para este año o a partir del 2017. Los colegios, las universidades, los bancos, los comercios, el periodismo, los meteorólogos, todos especulando más sobre la incidencia de la fecha en un feriado largo que en el homenaje al gran salteño. ¡Noticia del 16 de junio!: “La mayoría de los comercios abrirá mañana” (por el feriado). Dijeron que lo hacían para no perder ventas del Día del Padre. Así lo informó CAME en base a un sondeo propio (en el que perdió Güemes, obviamente): “Es uno de los días más importantes en ventas”, afirmaron.
Silvio Pedro Pizarro [email protected]
Corrupción I
El 17 de abril pasado, ante el mausoleo de Castro Barros, y con motivo del 167° aniversario de su fallecimiento, la Comisión Histórica Diocesana dio a conocer detalles de una revuelta política vivida en La Rioja, entre abril y octubre de 1816, hace exactamente un bicentenario. Tal como relata fray Cayetano Rodríguez en “El Redactor”, los Villafañe destituyeron a los Dávila, más precisamente al gobernador Manuel Brizuela y Doria, y también al diputado Castro Barros por “venal, faccioso y representante clandestino”. El Congreso General, reunido en Tucumán, se ocupó del asunto en 16 sesiones. En procura de información de primera mano y datos fidedignos, comisionó al teniente coronel Alejandro Heredia para que se constituyese en La Rioja. Cuando se dio cuenta de la difícil situación e informó de los diversos inconvenientes que le impedían cumplir acabadamente la misión, lo auxiliaron con “150 hombres de fusil”. En medio de su relato, Cayetano Rodríguez consigna: “Se pasó oficio al Supremo Director insinuándole la indemnización que debían hacer los insurrectos de La Rioja al Estado por los gastos causados”. Y en la última línea añade: “¿Quedará siempre impune el mal que causaron al Estado?” El 19 de agosto, Castro Barros reclama en el recinto que “el Supremo Director había determinado que los mencionados gastos saliesen de los fondos públicos, siendo que la resolución adoptada por el Congreso había fijado que los abonasen los culpables”. Cualquier relación con los acontecimientos que estamos viviendo en junio de 2016 es “pura coincidencia”. Porque lo que muy pocos se preguntan es: ¿quién pagará todo el operativo que se lleva a cabo por el caso José López? Porque esto también forma parte del bicentenario que estamos celebrando.
Juan Aurelio Ortiz
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Corrupción II
No cabe ninguna duda que si la Justicia Federal decide ahondar las investigaciones en torno a esclarecer los hechos de corrupción cometidos por funcionarios que fueron parte del gobierno kirchnerista, aparecerán muchos José López, y que en su momento fueron acusados por numerosos delitos relacionados al manejo de los dineros públicos. Y cito algunos hechos de los acaecidos en esta provincia que tuvieran repercusión nacional: los más de 8 millones de pesos destinados a la puesta en marcha del tren Tucumán-Concepción, de cuyo destino nada sabemos; los millones que se gastaron en la “gran mentira”, según la cual volvería a circular el tren Tucumán-Tafí Viejo, y en la que participaron en un acto la ex presidenta y el ex gobernador Alperovich; la obra de la apertura de calle Mendoza y Córdoba, que tampoco se sabe si podrá ser habilitada. Obras que se pagaron y no fueron ejecutadas. Las valijas con millones de pesos que salieron de un banco hacia la Legislatura; y un gobernador elegido a dedo. Todo esto ocurrió en la década ganada por la abogada exitosa.
Juan Carlos Monasterio
Pasaje Luis Beltrán 1.452
San Miguel de Tucumán
Final de juego
En “Match Point”, aquella memorable película de Woody Allen, el azar define si el personaje es o no culpable. La metáfora a la que acude el genio del cine es perfecta: la pelota de tenis moviéndose lentamente sobre la red, ¿pasará o no pasará? De ese hecho aleatorio dependerá el resultado del partido. En los casos de Báez y López, la pelota no pasó. Es lamentable entonces que, en los dos casos, sea el azar, y no la justicia, el que forzó a esta a meter presos a dos integrantes de la asociación ilícita que nos gobernó. Fueron el video de La Rosadita, de Puerto Madero, en el que, el hijo y el contador de Báez, disfrutaban del conteo de millones de dólares y euros robados y ahora, un tal Jesús, denunciando la cinematográfica escena del encargado de las obras públicas de los Kirchner, escondiendo bolsos con parte del saqueo en un Convento -al que intentaron convertir en madriguera- los que obraron el milagro de empujar a la Justicia a actuar sobre dos de los principales operadores de la gigantesca ingeniería operativa y discursiva montada por los Kirchner con el objetivo de enriquecerse y de la que coparticiparon la mayoría de los gobernantes provinciales. Terminaron patéticamente abrazados a montañas de dólares, emulando aquella dantesca escena del maestro de la “escuela de corrupción” que fuera Néstor, en la que celebraba el “éxtasis” que le producía una caja fuerte mientras se aferraba a ella. Se terminó así el largo show de “el proyecto”, “el modelo” y “el relato”, al que se asociaron muchos y con el que engañaron a otros. Final de Juego.
José Antonio Nadef
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