Por Santiago Pérez Cerimele
13 Junio 2016
SOLEMNE. Uno de los momento más emotivos se dio cuando parientes de los hinchas fallecidos fueron aplaudidos por toda la cancha. la gaceta / fotos de jorge olmos sgrosso
“Señores, yo soy del ‘ciruja’, ‘ciruja’ me voy a morir. Y cuando me llegue la muerte así me voy a despedir: me iré en un cajón rojo y blanco, paseando por la ‘Ciudadé’, envuelto en una bandera del único ‘Santo’ que amé...”
Gastón Cajal (18 años), Nahuel Pérez (19), Juan Carlos “Carpincho” Grollimund (35) y Fernando Javier Andrada (21) cumplieron con lo que promete la letra de una de las canciones más emotivas de la hinchada de San Martín.
Ayer, el partido contra Libertad estuvo precedido de algunos homenajes a estos cuatro hinchas que fallecieron cuando regresaban de Sunchales, tras haber presenciado el partido de ida por la semifinal del Federal A, entre el “Santo” y el “Tigre”.
El primer homenaje tuvo que ver con la ropa que lució San Martín. El equipo optó por la camiseta negra, a modo de luto. El arquero, César Taborda, utilizó la “rojiblanca”, para diferenciarse, pero esta llevaba impreso un ribete negro en la parte izquierda del pecho, con la leyenda: “por los que alientan desde el cielo”.
El segundo recuerdo a los cuatro hinchas fue el más emotivo. En representación de todo el plantel, tres referentes del “Santo” -Esteban Goicoechea, Alexis Ferrero y Maximiliano Rodríguez- entraron a la cancha con una bandera blanca atada a globos rojos. Antes de iniciar el partido la soltaron, desde el centro del campo. El trapo, que decía “desde el cielo alentaremos. Carpincho, Gastón, Nahuel y Javier, presentes”, se elevó hacia el firmamento. Los ojos de los miles de fanáticos que ayer desbordaron La Ciudadela la siguieron hasta que se perdió por las nubes. Mientras, los aplausos aturdían.
Finalmente, ambos equipos se acomodaron en el círculo central, para brindar un minuto de silencio. Junto a ellos estaban familiares de Cajal, de Pérez, de Grollimund y de Andrada, y representantes de la “Banda del Camión”, una de las facciones de la hinchada “santa”. Estos últimos ejecutaron “Toque de silencio” con sus instrumentos de viento. Al término, toda la gente volvió a aplaudir.
A estos homenajes grupales se sumó uno individual. Cuando Ramón Lentini convirtió su segundo gol, coló un gesto en el festejo: mostró cuatro dedos de su mano y miró hacia el cielo. “Quise homenajear a estos cuatro muchachos que recorrieron tantos kilómetros para alentarnos, y terminaron perdiendo la vida trágicamente”, explicó luego.
Gastón Cajal (18 años), Nahuel Pérez (19), Juan Carlos “Carpincho” Grollimund (35) y Fernando Javier Andrada (21) cumplieron con lo que promete la letra de una de las canciones más emotivas de la hinchada de San Martín.
Ayer, el partido contra Libertad estuvo precedido de algunos homenajes a estos cuatro hinchas que fallecieron cuando regresaban de Sunchales, tras haber presenciado el partido de ida por la semifinal del Federal A, entre el “Santo” y el “Tigre”.
El primer homenaje tuvo que ver con la ropa que lució San Martín. El equipo optó por la camiseta negra, a modo de luto. El arquero, César Taborda, utilizó la “rojiblanca”, para diferenciarse, pero esta llevaba impreso un ribete negro en la parte izquierda del pecho, con la leyenda: “por los que alientan desde el cielo”.
El segundo recuerdo a los cuatro hinchas fue el más emotivo. En representación de todo el plantel, tres referentes del “Santo” -Esteban Goicoechea, Alexis Ferrero y Maximiliano Rodríguez- entraron a la cancha con una bandera blanca atada a globos rojos. Antes de iniciar el partido la soltaron, desde el centro del campo. El trapo, que decía “desde el cielo alentaremos. Carpincho, Gastón, Nahuel y Javier, presentes”, se elevó hacia el firmamento. Los ojos de los miles de fanáticos que ayer desbordaron La Ciudadela la siguieron hasta que se perdió por las nubes. Mientras, los aplausos aturdían.
Finalmente, ambos equipos se acomodaron en el círculo central, para brindar un minuto de silencio. Junto a ellos estaban familiares de Cajal, de Pérez, de Grollimund y de Andrada, y representantes de la “Banda del Camión”, una de las facciones de la hinchada “santa”. Estos últimos ejecutaron “Toque de silencio” con sus instrumentos de viento. Al término, toda la gente volvió a aplaudir.
A estos homenajes grupales se sumó uno individual. Cuando Ramón Lentini convirtió su segundo gol, coló un gesto en el festejo: mostró cuatro dedos de su mano y miró hacia el cielo. “Quise homenajear a estos cuatro muchachos que recorrieron tantos kilómetros para alentarnos, y terminaron perdiendo la vida trágicamente”, explicó luego.
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Torneo Federal A