A los 74 años, falleció Muhammad Ali, el mejor boxeador de la historia

El legendario ex campeón del mundo de los pesos pesados, el estadounidense Muhammad Ali, falleció hoy a los 74 años de edad en un hospital de Phoenix (Arizona, Estados Unidos), según informó el canal NBC citando a fuentes de la familia.

Horas antes, el portavoz de la familia de Ali, Bob Gunnel, había informado que el ex boxeador había sido ingresado el jueves en el hospital tras sufrir problemas respiratorios. El estado de salud de Alí, que además sufría Párkinson desde hace más de tres décadas, había padecido un deterior progresivo durante los últimos años. Su delicado estado de salud había sido el motivo por el que Ali, originario de Louisville, Kentucky, llevaba años viviendo en Phoenix, debido a unas condiciones del clima menos agresivas. 

El tres veces campeón mundial de los pesos pesados, ya había sido hospitalizado a comienzos del pasado año por una infección urinaria, tiene una extensa familia que incluye tres ex mujeres y nueve hijos. Su nombre de nacimiento era Cassius Marcellus Clay Jr, pero el boxeador decidió cambiarlo tras su conversión al islam en la década de los 70.

Militante de los derechos de los afroamericanos, su radicalidad política le llevó a negarse a ir a la guerra de Vietnam. 

Elevado a los altares del boxeo y la cultura popular, fue coronado como Deportista del Siglo por la revista Sports Illustrated en 1999 y está considerado como uno de los grandes deportistas del mundo.

Retirado desde 1981, fue el primer boxeador de la historia en ser tres veces campeón del mundo en la categoría de Pesos Pesados. Ali tomó parte en algunos de los combates más memorables de la historia del boxeo, incluyendo el Fight of the Century, que le enfrentó a su rival Joe Frazier en el Madison Square Garden de 1971, y el Rumble in the Jungle de Zaire (hoy República Democrática de Congo) en 1974, cuando recuperó su título de campeón mundial de George Foreman.

El estilo de boxeo heterodoxo de Muhammed Ali -descripto por él mismo como “flotando como una mariposa, picando como una abeja”- aportó una gracia sin precedentes y una mayor velocidad a la categoría de pesos pesados.