05 Abril 2016
“PARA VOS PAPÁ”. Quinteros convirtió dos goles para asegurar el triunfo de San Antonio ante Atlético Concepción. El delantero se acordó de su padre y se lo dedicó. la gaceta / foto de DIEGO ARáOZ
Se floreó, goleó y pasó de fase. San Antonio no tuvo piedad con Atlético Concepción, al que derrotó por 5 a 2 (7 a 3 en el global) para quedarse con la llave que le permitió escalar a la cuarta fase del Federal C. El domingo, a las 15, el “Rojo” recibirá a Talleres de Añatuya por el partido de ida de los cuartos de final.
Está claro que toda la alegría fue para la gente de Ranchillos, mientras que la tristeza y la desazón partió hacia Banda del Río Salí. El conjunto de la “tierra del carnaval” comenzó a escribir su historia a base de un trabajo serio, tanto en lo dirigencial como en lo deportivo. En su primera participación en un certamen federal, no desentona y se ilusiona con lograr el ascenso. Por el momento, va por el buen camino, ya que es el único equipo de la provincia que sigue en el certamen.
La contracara es Atlético Concepción. De mal en peor dirán algunos memoriosos hinchas bandeños. Es que el club de sus amores se fue hundiendo de a poco, tanto en lo dirigencial como en lo deportivo. A partir de este año, los “Leones” jugarán su segunda temporada en la Primera B liguista.
El presente lo ve inmerso en una debacle total. Muchos serán los temas por resolver en lo inmediato si es que pretenden revertir la mala imagen. Para dar ese importante paso, aquellos que dicen amar al club deberán cambiar de actitud. Los lamentables y reiterados hechos de violencia fueron minando la posibilidades de la recuperación de una institución que en la década del 80 fue modelo de club, por el tremendo crecimiento que había tenido. Fue el primer equipo tucumano que intervino en la Primera B Nacional cuando se reestructuraron los torneos afistas en la temporada 1986/87. Antes había jugado en el viejo Nacional con los grandes del país.
Está claro que toda la alegría fue para la gente de Ranchillos, mientras que la tristeza y la desazón partió hacia Banda del Río Salí. El conjunto de la “tierra del carnaval” comenzó a escribir su historia a base de un trabajo serio, tanto en lo dirigencial como en lo deportivo. En su primera participación en un certamen federal, no desentona y se ilusiona con lograr el ascenso. Por el momento, va por el buen camino, ya que es el único equipo de la provincia que sigue en el certamen.
La contracara es Atlético Concepción. De mal en peor dirán algunos memoriosos hinchas bandeños. Es que el club de sus amores se fue hundiendo de a poco, tanto en lo dirigencial como en lo deportivo. A partir de este año, los “Leones” jugarán su segunda temporada en la Primera B liguista.
El presente lo ve inmerso en una debacle total. Muchos serán los temas por resolver en lo inmediato si es que pretenden revertir la mala imagen. Para dar ese importante paso, aquellos que dicen amar al club deberán cambiar de actitud. Los lamentables y reiterados hechos de violencia fueron minando la posibilidades de la recuperación de una institución que en la década del 80 fue modelo de club, por el tremendo crecimiento que había tenido. Fue el primer equipo tucumano que intervino en la Primera B Nacional cuando se reestructuraron los torneos afistas en la temporada 1986/87. Antes había jugado en el viejo Nacional con los grandes del país.
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