04 Abril 2016
MEJOR, IMPOSIBLE. Márquez tuvo un cierra de jornada perfecto en Las Termas.
Si Marc Márquez sonríe aún en situaciones difíciles de su carrera, qué se puede esperar de él cuando gana. Minutos después de consumar una nueva victoria en territorio argentino, el español enfrentó los micrófonos de los medios del mundo con una cara de emoticón feliz, algo que no se le borró en ningún momento. En riguroso inglés primero, y en español después, explicó los alcances de lo que logró.
- ¿Ganar era más que una necesidad?
- Tenía muchas ganas de ganar. Después de cómo había andado en el invierno boreal, en la pretemporada, de ver cómo estaba yendo todo, sobre todo por la primera carrera del año, necesitaba esto. Y el equipo también.
- ¿Qué estrategia tenías para la final?
- Sabía que la primera parte de la carrera era la más crítica porque alguno se podía caer, dado que la pista tenía una capa de humedad. Pero también sabía que con la primera moto me sentía mal; desde los entrenamientos que no me sentía cómodo. Por eso decidí controlar el ritmo, ponerme adelante, algo que no hago nunca. Tuve una bonita lucha con Valentino (Rossi), y una acción similar a la del año pasado en la curva 5. En ese momento me acordé, claro que sí, de lo sucedido el año pasado. Pero lo tenía controlado. Ya con la segunda moto entendí que las tres o cuatro primeras vueltas eran las mías. Anduve al máximo y gestioné la distancia.
- ¿Hubo algún momento de angustia durante la carrera?
- Estoy feliz por el resultado final, aunque quedé preocupado por mi rendimiento en la salida de la curva 3. Allí perdía bastante, Rossi se me acercaba, cosa que me sorprendió. Estas cosas se superan trabajando, confiando en la tarea del equipo. Hace semanas esto pintaba muy mal, y después de dos carreras ya estoy líder, entonces a seguir así.
- ¿Sentiste que la exigencia en pista fue alta?
- El desgaste físico en este nivel deportivo es bastante grande, por eso estoy entrenando más que nunca. Por supuesto que siempre uno se puede esmerar más y más.
- ¿Cómo seguirá tu temporada?
- Para lo que viene hay mucho por hacer. Honda está trabajando poco a poco en mejorar la aceleración, y también la electrónica. Es por esto último que la moto se mueve mucho; cuando se llegue a un punto mejor, eso se superará.
- Lo de los neumáticos fue todo un tema durante el fin de semana…
- Sucede que Michelin no quiere que pasen situaciones de inseguridad en pista. Ellos se esfuerzan en traernos el mejor material. Para cualquier marca es difícil llegar a un circuito como este, con una corta historia en el campeonato y con un asfalto especial y que puedan pasar accidentes. Pienso que este año seguramente va a haber otra carrera de este estilo, por lo que la experiencia adquirida es válida.
- Otra vez compartiste con Rossi un podio…
- Me encontré con Valentino en el podio después de mucho tiempo y, como se vio, fue un momento frío.
-¿Qué pensaste cuando viste que había terminado segundo?
- Lástima lo que pasó con las Ducati y que con lo sucedido le hayan regalado tantos puntos a Valentino. En la última vuelta veía por las pantallas que iban detrás de mío y me dije ‘¡bien!’. De golpe vi en la recta que él estaba detrás. Pensé ‘algo pasó aquí’. Situaciones así me tocaron en su momento a mí, esta vez él aprovechó el error de los rivales.
- ¿Ganar era más que una necesidad?
- Tenía muchas ganas de ganar. Después de cómo había andado en el invierno boreal, en la pretemporada, de ver cómo estaba yendo todo, sobre todo por la primera carrera del año, necesitaba esto. Y el equipo también.
- ¿Qué estrategia tenías para la final?
- Sabía que la primera parte de la carrera era la más crítica porque alguno se podía caer, dado que la pista tenía una capa de humedad. Pero también sabía que con la primera moto me sentía mal; desde los entrenamientos que no me sentía cómodo. Por eso decidí controlar el ritmo, ponerme adelante, algo que no hago nunca. Tuve una bonita lucha con Valentino (Rossi), y una acción similar a la del año pasado en la curva 5. En ese momento me acordé, claro que sí, de lo sucedido el año pasado. Pero lo tenía controlado. Ya con la segunda moto entendí que las tres o cuatro primeras vueltas eran las mías. Anduve al máximo y gestioné la distancia.
- ¿Hubo algún momento de angustia durante la carrera?
- Estoy feliz por el resultado final, aunque quedé preocupado por mi rendimiento en la salida de la curva 3. Allí perdía bastante, Rossi se me acercaba, cosa que me sorprendió. Estas cosas se superan trabajando, confiando en la tarea del equipo. Hace semanas esto pintaba muy mal, y después de dos carreras ya estoy líder, entonces a seguir así.
- ¿Sentiste que la exigencia en pista fue alta?
- El desgaste físico en este nivel deportivo es bastante grande, por eso estoy entrenando más que nunca. Por supuesto que siempre uno se puede esmerar más y más.
- ¿Cómo seguirá tu temporada?
- Para lo que viene hay mucho por hacer. Honda está trabajando poco a poco en mejorar la aceleración, y también la electrónica. Es por esto último que la moto se mueve mucho; cuando se llegue a un punto mejor, eso se superará.
- Lo de los neumáticos fue todo un tema durante el fin de semana…
- Sucede que Michelin no quiere que pasen situaciones de inseguridad en pista. Ellos se esfuerzan en traernos el mejor material. Para cualquier marca es difícil llegar a un circuito como este, con una corta historia en el campeonato y con un asfalto especial y que puedan pasar accidentes. Pienso que este año seguramente va a haber otra carrera de este estilo, por lo que la experiencia adquirida es válida.
- Otra vez compartiste con Rossi un podio…
- Me encontré con Valentino en el podio después de mucho tiempo y, como se vio, fue un momento frío.
-¿Qué pensaste cuando viste que había terminado segundo?
- Lástima lo que pasó con las Ducati y que con lo sucedido le hayan regalado tantos puntos a Valentino. En la última vuelta veía por las pantallas que iban detrás de mío y me dije ‘¡bien!’. De golpe vi en la recta que él estaba detrás. Pensé ‘algo pasó aquí’. Situaciones así me tocaron en su momento a mí, esta vez él aprovechó el error de los rivales.