Apuñaló a su mujer delante de su hija de 4 años y se ahorcó horas después en Famaillá

CONCEPCIÓN.- Un sangriento caso de violencia de género sacudió la noche del martes a los pobladores de Famaillá. Un hombre hirió gravemente de varias cuchilladas a su esposa, delante de la hija de cuatro años, y al menos 12 horas después se quitó la vida ahorcándose en una canchita de fútbol de esa ciudad del interior de la provincia.

Valerio Agustín Olmos (37 años), el agresor y suicida, perpetró su ataque a las 23 en un VW Senda en lel que iba con su cónyuge Yanina Beatriz Cursio (26 años), de la que estaba separado desde hace cinco meses.

El hombre había buscado a su ex pareja desde la casa de la madre, en donde permanecía desde que había decidido dejarlo por las repetidas agresiones que venía sufriendo por parte de él.

“Llegó aquí para llevarla a comer con Malena, su hija de cuatro años. Se fueron y al rato regresó con el afán de retirar a Morena, la otra hija, que tiene ocho años. No lo dejamos porque sospechamos que algo raro había sucedido. Enseguida llegaron a avisarnos que había apuñalado a Yanina y la había dejado tirada en la calle”, contó Marcos Daniel Cursio, hermano de la víctima.

Testigos aseguraron que Olmos comenzó a discutir con su cónyuge en las inmediaciones del cementerio municipal y luego empezó a agredirla físicamente, mientras la pequeña hija lloraba desconsoladamente. En un momento sacó un cuchillo y la hirió gravemente. Después la empujó a la calle malherida. El descendió de su rodado y continuó atacándola. Concluida la agresión, rápidamente emprendió la fuga con la criatura, a la que luego entregó a sus parientes.

Un circunstancial testigo avisó a la Policía, pero cuando los efectivos llegaron, la mujer ya había sido trasladada al hospital local. Debido a su gravísimo estado fue derivada de urgencia al Padilla de la capital, en donde al cierre de esta edición seguía en estado delicado.

“Mi hermana lo dejó porque era violento y le pegaba. Este año lo denunció en dos ocasiones y nadie hizo nada para detener a esta bestia”, advirtió Marcos.

Olmos, tras ir a su suegra, emprendió el retorno a su casa, la que está en Belgrano 555, a orillas de las vías del ferrocarril. Al parecer estaba en su interior cuando llegaron los parientes de la víctima con el fin de lincharlo. El agresor había dejado el Senda afuera. Y fue el rodado el que recibió la furia de la gente, que lo apedreó hasta destrozarle todos los vidrios.

“El no está aquí… se fue”, repetía Verónica, la hermana de Olmos, tratando de contener a la turba. “Fue después del partido. Escuché una tropelía y cuando salí vi a varias personas apedreando el auto y la casa. Después llegó la Policía y controló la situación, porque querían quemar la vivienda”, contó un vecino, que vive pegado al inmueble de los Olmos. Después el auto fue introducido por Verónica al interior.

Todo indica que el atacante luego de llegar a su casa y abandonar el auto, se fue directamente a quitarse la vida. La policía no lo encontró en su domicilio durante el allanamiento ordenado al mediodía por el juez de Monteros, Mario Velazquez, con el propósito de proceder a su detención.

Olmos fue hallado ahorcado en un terreno baldío a unos 100 metros de su inmueble. Las primeras pericias adelantaron que su deceso se remontaba a varias horas.

Aclaraciones

El jefe de la comisaría de Famaillá, comisario principal Walter Ledesma, dijo que Valerio tenía antecedentes por contravenciones (desorden en la vía pública) y dos denuncias por violencia de género por parte de su cónyuge.

“Los dos casos de agresiones fueron hechos en lo que va de este año y se encuentran en trámite en fiscalías de los tribunales de Monteros”, informó.

El juez Velázquez, en tanto, aseguró que la única medida solicitada por el ministerio público en torno al caso Olmos fue el allanamiento para poder sacar el auto de la vivienda de los Olmos.