Las maneras más extrañas de celebrar la Semana Santa

Misas, vía crucis y huevos de Pascua. Así es como estamos acostumbrados a celebrar la Semana Santa en Argentina. Pero hay lugares del mundo en los que se practican tradiciones que son, como mínimo, extrañas y, en algunos casos, impactantes. Acá te mostramos las cinco más llamativas.

1- Filipinas: crucifixiones reales

En Filipinas hay fieles que se prestan para ser crucificados tal como le ocurrió a Jesús. Pero no se trata de crucifixiones simbólicas. Son reales: clavan sus manos y sus pies a la cruz y los dejan expuestos ante la mirada de cientos de fieles y turistas curiosos.

2- México: flagelos y cadenas

En el publo de Taxco se realiza la Procesión de las Ánimas. Allí peregrinan los "encruzados". Se trata de hombres que llevan en sus espaldas enormes rollos de zarzas con espinas y púas que se clavan en la piel. También, un grupo de mujeres encapuchadas realiza la procesión arrastrando pesadas cadenas. Por último, los flagelados se golpean la espalda con un látigo que lleva clavos en uno de sus extremos.

3- Suecia: brujas y huevos de Pascua

Al norte de Europa se conjugan las tradiciones paganas con las cristianas. Por esa razón, allí disfrazan a las nenas de brujas y las llevan casa por casa a pedir huevos de Pascua. Vale destacar que en Escandinavia, mucho antes de la llegada del cristinanismo, la creencia en las brujas estaba muy arraigada.

4- El Salvador: demonios en las calles

En las calles de Texistepeque, una localidad del país centroamericano, 19 personas se visten de demonios y salen a recorrer las calles. A lo largo del trayecto golpean con látigos a quienes encuentran a su paso. Todo esto termina cuando aparece otro individuo disfrazado de Jesucristo. Cuando esto ocurre, los demonios de postran ante él y luego se encierran dentro de una iglesia.

5- Nueva Zelanda: multitudinaria cacería de conejos

Los residentes de la ciudad de Otago tienen la costumbre de cazar conejos durante la Semana Santa. De manera organizada, salen al campo y todos los años intentan batir un nuevo record de presas. Llegan a matar varios miles de conejos en cada Semana Santa.