SAN DIEGO, California.- Un lobo marino hembra de ocho meses, sorprendió esta semana a los empleados de un restaurante de la ciudad estadounidense, al aparecer sobre uno de los asientos del local como si fuera un comensal más que esperaba su pedido.
El animal -que estaba hambriento, deshidratado y con bajo peso- fue descubierto por los primeros empleados en llegar, a la mañana del jueves, al restaurante The Marine Room.
"Era casi como si quisiera comer", contó el chef, Bernard Guillas, a la prensa.
Según Guillas, el lobo marino probablemente entró al local por la noche, por una puerta que dejó abierta el personal de limpieza. Pero el animal, que pesa unos nueve kilos (menos de la mitad del peso recomendado para su edad), apenas tuvo tiempo para ponerse cómodo porque un equipo del parque temático SeaWorld de San Diego acudió al restaurante para rescatarlo.
"El personal de SeaWorld es optimista sobre la salud del pequeño marino", dijo el portavoz del centro, David Koontz, y explicó que una vez esté curado lo devolverán a su hábitat natural.
Según el diario británico The Guardian, la mortalidad de los lobos marinos ha ascendido en el último año, cosa que según los científicos se debe al aumento del nivel de temperatura de los océanos que hace escasear la comida de estos animales. Sólo este año SeaWorld ha rescatado 47 lobos marinos y otros animales del océano. (Télam)