06 Enero 2016
BENADIDES. REUTERS
El sueño de Kevin Benavides, el salteño de 26 años que participa por primera vez en el Dakar, parecía estar construido con los materiales que entregó el lunes: terminar entre los 10 primeros en una manga de la carrera más difícil del mundo. Sin embargo, ayer demostró que a su imaginación le faltan varios pisos y piensa seguir creando uno tras otro en la medida que la competencia se lo permita. Por lo pronto, se convirtió en el primer argentino que se adjudicó una etapa -en Motos- en toda la historia del Dakar y está segundo en la general, a bordo de su Honda.
Benavides es apenas un aprendiz en este desafío, pero sigue sorprendiendo. Su especialidad iniciática es el enduro, del que es pentacampeón mundial. “Me subí por primera vez a una moto cuando tenía tres años y corro en enduro desde los ocho gracias al apoyo de mis padres”, le reveló al sitio oficial de la carrera. Justamente su padre lo estuvo viendo partir en la localidad de María Delia y habló con LG Deportiva, destacando el octavo puesto de su muchacho en la etapa del lunes. “Con él (Kevin) vinimos mucho a Tucumán. Esto es algo nuevo para él pero tratamos de darle toda la confianza y tranquilidad posible. Es lo mejor que podemos hacer”, confiesa Norberto, casi desde la largada del especial que vería consagrarse a su hijo en un momento único del motociclismo nacional.
“¡Todavía no lo puedo creer! Estoy orgulloso de ser el primer argentino en ganar una etapa y encima hacerlo en mi debut”, exclamó Kevin en su cuenta de Instagram, adjuntando una foto durante la etapa que quedará en su memoria y en la historia de este deporte.
Como si su capacidad no fuera suficiente, el salteño se destaca también por su humildad. “Me sentí muy cómodo en la moto y me divertí mucho también. Lo importante ahora es seguir tranquilo y concentrado día a día, paso por paso”, aseguró. Comodidad y diversión, algo que seguramente no pasa por la cabeza de muchos pilotos en la salvaje carrera pero sí lo hace por la de Benavides. El joven que sigue sorprendiendo por su potencial, sus resultados y su actitud.
Benavides es apenas un aprendiz en este desafío, pero sigue sorprendiendo. Su especialidad iniciática es el enduro, del que es pentacampeón mundial. “Me subí por primera vez a una moto cuando tenía tres años y corro en enduro desde los ocho gracias al apoyo de mis padres”, le reveló al sitio oficial de la carrera. Justamente su padre lo estuvo viendo partir en la localidad de María Delia y habló con LG Deportiva, destacando el octavo puesto de su muchacho en la etapa del lunes. “Con él (Kevin) vinimos mucho a Tucumán. Esto es algo nuevo para él pero tratamos de darle toda la confianza y tranquilidad posible. Es lo mejor que podemos hacer”, confiesa Norberto, casi desde la largada del especial que vería consagrarse a su hijo en un momento único del motociclismo nacional.
“¡Todavía no lo puedo creer! Estoy orgulloso de ser el primer argentino en ganar una etapa y encima hacerlo en mi debut”, exclamó Kevin en su cuenta de Instagram, adjuntando una foto durante la etapa que quedará en su memoria y en la historia de este deporte.
Como si su capacidad no fuera suficiente, el salteño se destaca también por su humildad. “Me sentí muy cómodo en la moto y me divertí mucho también. Lo importante ahora es seguir tranquilo y concentrado día a día, paso por paso”, aseguró. Comodidad y diversión, algo que seguramente no pasa por la cabeza de muchos pilotos en la salvaje carrera pero sí lo hace por la de Benavides. El joven que sigue sorprendiendo por su potencial, sus resultados y su actitud.
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