05 Enero 2016
DE REOJO. El tucumano Nicolás Sánchez también quiere ser el “10” de Jaguares. prensa uar
Eso de andar a los trotes y levantando pesas desde bien temprano y hasta el atardecer no es ninguna novedad para los jugadores habitualmente convocados a Los Pumas. De hecho, se parece bastante a esas dos semanas de rutina casi militar que cada año preceden al Rugby Championship, y que tienen como objetivo el acondicionamiento físico del plantel. Sin embargo, la práctica de ayer en la cancha del Buenos Aires Cricket & Rugby Club tuvo una particularidad: fue la primera jornada de la primera pretemporada en la historia de los Jaguares, la franquicia profesional de la UAR que a partir de este año jugará en el Súper Rugby. Se viene una temporada mucho más larga y exigente de lo usual, y la puesta a punto desde lo físico será crucial.
“Ya se fue la ansiedad que teníamos por empezar a trabajar”, asegura Raúl Pérez, head coach del equipo, en el primer descanso de la jornada. “Estamos con un grupo que conocemos y con el que hace dos años que venimos trabajando juntos. Como todo inicio de un proceso hay mucha expectativa, sobre todo si uno piensa en la dimensión del torneo y en la posibilidad de ensamblarnos en el Súper Rugby que nos va a dar la competencia que necesitamos”, transmitió “Aspirina”.
Mini “colimba”
El entrenador rosarino, que contará con la asistencia de Felipe Contepomi, Martín Gaitán y José Pellicena, advirtió que la primera parte será de mucho fierro, pero sin dejar de lado completamente a la ovalada. “Las primeras dos semanas de trabajo tendrán una carga física importante, pero sin dejar de tener en cuenta las situaciones de juego, que hacen que los jugadores tengan la capacidad de resolver situaciones en todo momento”, explicó.
“Todos los años hacemos modificaciones a la estructura y al juego, y este año también lo haremos. Eso es importante para nosotros para no ser tan previsibles y seguir mejorando. A diferencia de cuando estamos con el seleccionado, este torneo tiene una carga importante de decisión individual. El Súper Rugby se juega a una intensidad mucho mayor que en otro tipo de rugby y nos preparamos para eso”, agregó Pérez.
Contando los días
Las ganas de volver a la rutina embargaron tanto a los que eligieron la playa como a los que optaron por gastar los días de vacaciones en la casa familiar. “Tenía mucha ansiedad de que arrancara todo esto”, aseguró Agustín Creevy, sintetizando la sensación general del grupo.
“La idea es sentirnos como un club y hacer las cosas que generalmente hacemos en nuestro club, como es esto de armar el gimnasio. Esto nos sirve para ir formando nuestra identidad y sentir que este lugar es nuestro. Esto es Jaguares, no Los Pumas. Esto es nuestro club y apuntamos a sentir que sea algo nuestro, ya que vamos a estar involucrados todos los días. Luego, jugar en Los Pumas será el premio por haber hecho bien las cosas acá”, advirtió el capitán.
“Ya se fue la ansiedad que teníamos por empezar a trabajar”, asegura Raúl Pérez, head coach del equipo, en el primer descanso de la jornada. “Estamos con un grupo que conocemos y con el que hace dos años que venimos trabajando juntos. Como todo inicio de un proceso hay mucha expectativa, sobre todo si uno piensa en la dimensión del torneo y en la posibilidad de ensamblarnos en el Súper Rugby que nos va a dar la competencia que necesitamos”, transmitió “Aspirina”.
Mini “colimba”
El entrenador rosarino, que contará con la asistencia de Felipe Contepomi, Martín Gaitán y José Pellicena, advirtió que la primera parte será de mucho fierro, pero sin dejar de lado completamente a la ovalada. “Las primeras dos semanas de trabajo tendrán una carga física importante, pero sin dejar de tener en cuenta las situaciones de juego, que hacen que los jugadores tengan la capacidad de resolver situaciones en todo momento”, explicó.
“Todos los años hacemos modificaciones a la estructura y al juego, y este año también lo haremos. Eso es importante para nosotros para no ser tan previsibles y seguir mejorando. A diferencia de cuando estamos con el seleccionado, este torneo tiene una carga importante de decisión individual. El Súper Rugby se juega a una intensidad mucho mayor que en otro tipo de rugby y nos preparamos para eso”, agregó Pérez.
Contando los días
Las ganas de volver a la rutina embargaron tanto a los que eligieron la playa como a los que optaron por gastar los días de vacaciones en la casa familiar. “Tenía mucha ansiedad de que arrancara todo esto”, aseguró Agustín Creevy, sintetizando la sensación general del grupo.
“La idea es sentirnos como un club y hacer las cosas que generalmente hacemos en nuestro club, como es esto de armar el gimnasio. Esto nos sirve para ir formando nuestra identidad y sentir que este lugar es nuestro. Esto es Jaguares, no Los Pumas. Esto es nuestro club y apuntamos a sentir que sea algo nuestro, ya que vamos a estar involucrados todos los días. Luego, jugar en Los Pumas será el premio por haber hecho bien las cosas acá”, advirtió el capitán.