Esperan más tormentas en el Litoral

Esta vez le tocó al Litoral. En agosto la televisión mostraba zonas de la Provincia de Buenos Aires y convertidas en lagunas de agua y barro, edificios inundados y vecinos desesperados. Meses antes, la furia arrasadora de la naturaleza le había pegado una cachetada brava a Córdoba, Santa Fe y Tucumán. Y esta vez le tocó al Litoral, demostrando que las agujas del clima hablan en un idioma que no permite anticipar el desastre.

Las autoridades confirmaron ayer que ascendían a 20.000 las personas que tuvieron que ser evacuadas por las inundaciones en el nordeste del país. Las provincias de Entre Ríos, Corrientes, Chaco, Formosa, Santa Fe y Misiones fueron afectadas por las crecidas de los ríos Paraná, Paraguay y Uruguay. Ayer la zona continuaba en estado de alerta, aunque el pronóstico comenzaba a ofrecer algo de calma ya que no se preveían nuevas tormentas. De todas maneras, como sostuvo desde la mañana el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, el fin de semana sería un momento crítico para las familias que tuvieron que abandonar sus casas para salvar sus vidas.

La ciudad más comprometida por las inundaciones es Concordia, en Entre Ríos, donde hubo más de 10.000 evacuados y un hombre murió ahogado tras caer en una boca de tormenta. En esa ciudad se montaron 37 centros de atención, donde se brindó asistencia sanitaria y contención a los damnificados.

El intendente de Concordia, Enrique Cresto, creó por decreto un Consejo de Emergencia Social, un comité de crisis integrado por todas las fuerzas políticas y las instituciones de la ciudad destinado a organizar la recepción y la distribución de las donaciones que llegaban desde diferentes provincias del país.

También el Gobierno nacional estableció ayer un Comité de Crisis para evaluar la situación, al tiempo que funcionarios se trasladaron hacia las zonas más afectadas y mantuvieron reuniones con intendentes, gobernadores y productores locales. El presidente, Mauricio Macri, se vio obligado a suspender sus vacaciones y viajaría hoy a Concordia (ver “Macri suspende...”).

El gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi, informó que había alrededor de 1.800 familias evacuadas (alrededor de 8.000 personas) en su provincia. “Existen daños considerables. El mayor problema es el día después que bajen las aguas”, advirtió. “Tenemos dos problemas: uno es la creciente de los ríos Paraná y Uruguay, y otro es el problema de los 12 ríos internos de la provincia, que también han crecido, lo que impide el desagüe”, comentó el mandatario provincial. “Hay que ver lo que se viene, porque según los pronósticos tendríamos tres meses más de lluvia, por lo menos hasta que termine el verano, que recién comienza. El pico es hasta el 5 o 6 de enero y después lluvias fuertes pero más esporádicas hasta que finalice el verano”, concluyó.

Mientras tanto, pobladores de las ciudades entrerrianas de Gualeguaychú y San José también habían sido evacuadas ayer, como consecuencia de la creciente del río Uruguay. Cuando comenzaron las evacuaciones en esas dos ciudades, en la provincia de Corrientes ya calculaban unas 10.000 personas que habían abandonado sus hogares, la mitad de ellas por medios propios, indicó el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet.

Esperanzados

Ayer, en medio de la angustia de los pobladores y el movimiento incesante de los equipos de asistencia, Bordet era optimista respecto de la evolución de la situación, ya que se estimaba que la crecida se estabilizaría porque no existía un pronóstico de nuevas lluvias. “Esto nos daría un respiro y que la situación tienda a estabilizarse”, remarcó el mandatario peronista, quien se manifestó satisfecho con la ayuda facilitada por el Gobierno nacional y por el Ejército.

El director de Defensa Civil de esa provincia litoraleña, Roberto Destri, dijo ayer que habría al menos cinco días sin precipitaciones, lo que ayudaría a que el río baje un poco de nivel. Precisó además que había en Concepción del Uruguay 231 familias evacuadas y en Colón sumaban 178.

“En estos días anteriores las tormentas se han concentrado y cayeron todas juntas. Es decir, la magnitud de agua que cayó hizo que las previsiones que teníamos respecto de ir controlando la situación se fueran al diablo”, detalló el secretario de Desarrollo Humano de Concordia, Guillermo Echenause.

En diálogo con C5N, el intendente Cresto señaló que estaban esperando a que la represa evacuara más agua de la que recibe para empezar a trabajar en la segunda etapa, que es la reconstrucción de la ciudad. “Estamos sufriendo la inundación más grande de los últimos 50 años”, reconoció. (DyN-Télam-DPA-Reuters-Especial)

DONACIONES EN TUCUMÁN

La “Fundación Sí” recibe hasta el 2 de enero alimentos no perecederos, productos de limpieza, pañales y botas de goma. Aclara que no se necesita ni ropa ni agua. La gente puede dejar sus donaciones en: General Paz 1061, desde las 10 hasta las 13; Muñecas 635, desde las 18 a las 21; Monteagudo 857, piso 13 C, en horario comercial; Mendoza 334, en horario comercial; Mate de Luna Center: de 8 a 12 y de 16 a 21; Ituzaingó 451 (YB) de 8 a 11 y de 18 a 21; y en Alderetes, en parroquia Sagrada Familia, en Caseros 351.