23 Diciembre 2015
BUENOS AIRES.- Gendarmería Nacional reprimió con disparos de balas de goma y carros hidrantes la protesta de operarios de la avícola Rasic Hermanos que bloqueaban la autopista Riccheri en el acceso al aeropuerto de Ezeiza, donde al menos una persona fue detenida y varias resultaron heridas.
Los incidentes se produjeron ayer a la mañana y después del mediodía, cuando los efectivos de la Gendarmería dispararon armas con balas de goma y apelaron a carros hidrantes para mantener el desalojo de la autopista Riccheri, que según el gobierno se realizó en cumplimiento de una orden judicial.
Los choques más graves se produjeron cuando grupos de trabajadores apostados a los costados de la autovía respondieron arrojando piedras, botellas y otros objetos contundentes contra las fuerzas de seguridad.
“Sufrimos una represión brutal. Tenemos entre 10 y 12 heridos y hay un compañero detenido”, dijo Cristian Villalba, delegado de los trabajadores.
Uno de los obreros se quitó la remera y mostró el torso con el impacto de más de diez balas de goma. Al lugar se acercaron para solidarizarse con los trabajadores de Rasic dirigentes de izquierda.
Villalba atribuyó los incidentes a la “provocación” de los efectivos de la fuerza de seguridad que, según dijo, “estaban con ganas de cagarnos a palos desde el miércoles”, y también a “infiltrados de gente de la política que no tienen nada que ver con el trabajador de Rasic”.
El gobierno dijo que la Gendarmería desalojó a los manifestantes en “cumplimiento de una orden judicial”, mientras que abogados de los trabajadores de Rasic calificaron de “ilegal y político” el accionar de la fuerza.
Los trabajadores de Cresta Roja, reclaman el pago de sueldos adeudados y no perder las fuentes de empleo, se dio en medio de la polémica por la decisión de Mauricio Macri de instrumentar un protocolo para los casos de protestas sociales con bloqueo de rutas y calles. (DyN)
Los incidentes se produjeron ayer a la mañana y después del mediodía, cuando los efectivos de la Gendarmería dispararon armas con balas de goma y apelaron a carros hidrantes para mantener el desalojo de la autopista Riccheri, que según el gobierno se realizó en cumplimiento de una orden judicial.
Los choques más graves se produjeron cuando grupos de trabajadores apostados a los costados de la autovía respondieron arrojando piedras, botellas y otros objetos contundentes contra las fuerzas de seguridad.
“Sufrimos una represión brutal. Tenemos entre 10 y 12 heridos y hay un compañero detenido”, dijo Cristian Villalba, delegado de los trabajadores.
Uno de los obreros se quitó la remera y mostró el torso con el impacto de más de diez balas de goma. Al lugar se acercaron para solidarizarse con los trabajadores de Rasic dirigentes de izquierda.
Villalba atribuyó los incidentes a la “provocación” de los efectivos de la fuerza de seguridad que, según dijo, “estaban con ganas de cagarnos a palos desde el miércoles”, y también a “infiltrados de gente de la política que no tienen nada que ver con el trabajador de Rasic”.
El gobierno dijo que la Gendarmería desalojó a los manifestantes en “cumplimiento de una orden judicial”, mientras que abogados de los trabajadores de Rasic calificaron de “ilegal y político” el accionar de la fuerza.
Los trabajadores de Cresta Roja, reclaman el pago de sueldos adeudados y no perder las fuentes de empleo, se dio en medio de la polémica por la decisión de Mauricio Macri de instrumentar un protocolo para los casos de protestas sociales con bloqueo de rutas y calles. (DyN)
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