“Podemos mirar a los ojos a todos los argentinos”

- ¿Me escuchan todos?

- ¡¡¡Síííí!!!

- Yo (también) los escucho. Y los voy a escuchar siempre.

El discurso despedida de Cristina Fernández de Kirchner en la plaza de Mayo tuvo su sello distintivo. Tras ocho años de gestión, interactuó por última vez como Presidenta de la Nación ante miles de militantes kirchneristas. Fiel a su estilo, criticó a los grupos -políticos, económicos y mediáticos, entre otros- que se opusieron a su gobierno y al de su fallecido esposo, Néstor Kirchner. Además, ponderó los logros de ambas gestiones (como la Asignación Universal por Hijo y las políticas sobre derechos humanos); y dejó advertencias sobre el contexto financiero y político internacional.

Cristina tampoco dejó pasar la chance de enviarle algunos mensajes a su sucesor, Mauricio Macri. Entre otras cosas, cuestionó que el nuevo jefe del Ejecutivo Nacional haya concurrido a la Justicia para que se fijara la fecha límite de su mandato (caducó con el primer minuto de hoy). “Me dolió mucho ver un presidente en una sentencia judicial, al que nadie había votado”, indicó Fernández de Kirchner, en alusión al interinato de 12 horas que tendrá el senador macrista Federico Pinedo. “(A esto) no lo merecía ningún argentino, ni el 51% que los votó (a Cambiemos), ni el 49% que votaron por nosotros”, destacó la referente del Frente para la Victoria (FpV). Y dijo que lamentaba el desenlace de la disputa sobre el acto de traspaso, que no la tendrá presente en el Congreso ni en la Casa Rosada. “Me hubiera gustado poder entregar los atributos del mando ante la Asamblea Legislativa, máximo órgano constitucional y federal del país”, sostuvo Cristina.

En otro de los párrafos más aplaudidos por sus seguidores, la mandataria saliente valoró como “un dato objetivo de la historia” que esté por comenzar el cuarto gobierno constitucional consecutivo sin interrupción. “No lo pudo lograr (Hipólito) Yrigoyen, no lo pudo lograr (Juan Domingo) Perón”, remarcó Fernández de Kirchner.

La primera ceremonia de despedida de Cristina comenzó a las 19 de ayer. En el Salón de los Bustos de la Casa Rosada descubrió una imagen de Kirchner, la tercera durante su gestión (los anteriores homenajes habían sido para Raúl Alfonsín y para Héctor Cámpora). Allí habló ante funcionarios (ministros, gobernadores, intendentes, entre otros) y dirigentes políticos de su espacio. “(Néstor) fue el presidente que, en toda la historia de la Argentina, obtuvo la menor cantidad de votos; sin embargo, fue a partir de sus convicciones, de su coraje, de su decisión, y su visión estratégica que construyó una nueva Argentina desde las ruinas que había recibido”, señaló, recordando la llegada de su esposo al Gobierno nacional, en 2003. Recordó el armado estratégico con otros líderes latinoamericanos, como el presidente boliviano Evo Morales (quien participó del acto), el fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez y el referente del PT brasileño, Lula Da Silva.

En ese lugar, Cristina le dedicó un párrafo completo a algunos funcionarios. El primero fue Daniel Scioli, saliente mandatario bonaerense y derrotado candidato del FpV en los comicios presidenciales. “Gracias por el acompañamiento que tuviste siempre con nosotros”, le señaló la jefa del kirchnerismo al ex motonauta, entre aplausos. A continuación mencionó al gobernador tucumano Juan Manzur, quien fue ministro de Salud de su gestión entre 2009 y 2015. Recordó que el médico llegó a su cargo en medio de la crisis por la gripe A en todo el mundo. Ante el público, la Presidenta saliente relató que Manzur (que durante el acto estuvo sentado junto a Scioli) entró a su despacho su primer día de trabajo con una sonrisa. “Yo me pregunté: ¿este es o se hace?”, lanzó Fernández de Kirchner. Agregó que luego el tucumano le aclaró que siempre sonreía. “Me dijo: ‘yo soy un optimista por naturaleza’”, rememoró Cristina. Y pasó a saludar a otros referentes de su espacio, como Alicia Kirchner (electa gobernadora de Santa Cruz y hermana de Néstor), Aníbal Fernández (su jefe de Gabinete, que fue derrotado en la provincia de Buenos Aires por la macrista María Eugenia Vidal) y Julio de Vido (ministro de Planificación), entre otros.

En la plaza

A las 20, Cristina salió a la plaza de Mayo para dar su último discurso como jefa del Ejecutivo Nacional. Sostuvo que se despide con un porcentual mínimo de desempleo que fue récord para el país (“5,4% en el último trimestre”) y consideró que uno de los mayores logros de la gestión kirchnerista fue “el empoderamiento de los derechos”.

La Presidenta saliente mantuvo el característico ida y vuelta con los militantes. Los escuchó mientras exclamaban “Néstor no se murió”, “patria sí, colonia no” y otros típicos cánticos kirchneristas.

Luego, enumeró algunas de las confrontaciones que mantuvo su espacio político con otros sectores en la última década, y mencionó a “las principales corporaciones económicas nacionales e internacionales”, a “los medios hegemónicos de comunicación” y al “poder judicial”, entre otros. “Si con tantas cosas en contra hemos hecho tantas cosas por los argentinos, cuantas podrán hacer los que tienen estos factores a favor”, manifestó, en alusión al macrismo. Y pidió tener “confianza” en la próxima gestión. “Van a hacer las cosas, porque lo tienen todo a favor, mucho mejor que nosotros”, señaló, quizás con ironía.

Antes del cierre, Cristina señaló ante la multitud: “luego de 12 años y medio podemos mirar a los ojos de todos los argentinos. Sólo le pido a Dios que quienes nos suceden por voluntad popular puedan, frente a una plaza como esta, decirles a todos los argentinos que también puede mirarlos a los ojos”, enfatizó. Y culminó: “gracias desde mi corazón, y sepan que siempre voy a estar junto a ustedes”.