10 Diciembre 2015
CARACAS.- El ex candidato presidencial y referente de la oposición venezolana, Henrique Capriles, se declaró “sumamente preocupado” por la actitud del presidente, Nicolás Maduro, tras el triunfo de la Mesa de Unidad Popular (MUD) en las elecciones legislativas del domingo pasado, e insistió en que el mandatario debería llamar a la unidad del país.
“Maduro debería ponerse a la orden de la Asamblea Nacional, convocando a la unión del país, invitándolo a resolver la crisis económica”, afirmó Capriles en una entrevista con el diario español El País. Para el dirigente, en las elecciones “hubo un pronunciamiento claro, sin matices, contundente”, y las prioridades de este nuevo tiempo son “la economía, lo social y la inseguridad”. No obstante, remarcó que “hay otros temas que son excluyentes, como que se resuelva la situación de los compañeros que son presos por razones políticas”.
Capriles consideró que los comicios significan “un resultado aplastante contra la cúpula” y afirmó que “si el Gobierno no cambia habrá que cambiar el Gobierno”.
El referente es uno de los principales dirigentes de la MUD, la coalición opositora que obtuvo 112 escaños de los 167 que tiene la Asamblea Nacional venezolana, imponiéndose al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) de Maduro. “Estamos esperando con mucha serenidad, madurez y humildad que digieran el resultado del domingo, pero la crisis hoy está peor que el domingo”, dijo.
Sobre el eventual proceso de revocación de Maduro, dijo: “cualquiera de los mecanismos que están en la Constitución hay que debatirlos y tomar una decisión”. “En el primer trimestre del próximo año va a haber algún tipo de desenlace o, si no hay solución, tener que promoverlo en el marco de la Constitución”, explicó.
El líder opositor negó que la nueva Cámara venezolana sea “revanchista” y aboga por una Asamblea Nacional “para que en el país impere la justicia”. “La justicia es la enemiga de la revancha”, puntualizó. El ex candidato se manifestó a favor del diálogo, pero lamentó que “no hay un canal de comunicación” porque “hay varios grupos dentro del oficialismo”.
Estaremos peor
“Ganaron los malos”, “el cambio fue para peor”: así describió el Presidente la victoria de la oposición, tras anunciarse, que la Asamblea Nacional, que se instalará en enero, estará bajo control opositor, con 112 diputados sobre de 167.
De entrada, Maduro anunció que rechazará cualquier proyecto de Ley de Amnistía que le presente la nueva Asamblea, con el fin de liberar a opositores presos, incluyendo al dirigente Leopoldo López, condenado a 14 años por instigar las protestas del año pasado, y el alcalde metropolitano Antonio Ledezma, acusado de conspiración.
En acciones concretas, el jefe de la Asamblea Nacional saliente, Diosdado Cabello, confirmó que el oficialismo utilizará su mayoría que se extingue este mes para designar a 12 vacantes del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), un órgano al que la nueva Asamblea debe consultar sobre temas constitucionales. Analistas advirtieron que estas maniobras podrían ser la antesala de un conflicto de poderes que se agudizaría en 2016, cuando además se prevé una profundización de la crisis económica.
En tanto, Maduro le pidió ayer la renuncia a sus ministros para “renovar” el gobierno luego del revés electoral en los comicios legislativos del domingo. (Reuters-DPA)
“Maduro debería ponerse a la orden de la Asamblea Nacional, convocando a la unión del país, invitándolo a resolver la crisis económica”, afirmó Capriles en una entrevista con el diario español El País. Para el dirigente, en las elecciones “hubo un pronunciamiento claro, sin matices, contundente”, y las prioridades de este nuevo tiempo son “la economía, lo social y la inseguridad”. No obstante, remarcó que “hay otros temas que son excluyentes, como que se resuelva la situación de los compañeros que son presos por razones políticas”.
Capriles consideró que los comicios significan “un resultado aplastante contra la cúpula” y afirmó que “si el Gobierno no cambia habrá que cambiar el Gobierno”.
El referente es uno de los principales dirigentes de la MUD, la coalición opositora que obtuvo 112 escaños de los 167 que tiene la Asamblea Nacional venezolana, imponiéndose al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) de Maduro. “Estamos esperando con mucha serenidad, madurez y humildad que digieran el resultado del domingo, pero la crisis hoy está peor que el domingo”, dijo.
Sobre el eventual proceso de revocación de Maduro, dijo: “cualquiera de los mecanismos que están en la Constitución hay que debatirlos y tomar una decisión”. “En el primer trimestre del próximo año va a haber algún tipo de desenlace o, si no hay solución, tener que promoverlo en el marco de la Constitución”, explicó.
El líder opositor negó que la nueva Cámara venezolana sea “revanchista” y aboga por una Asamblea Nacional “para que en el país impere la justicia”. “La justicia es la enemiga de la revancha”, puntualizó. El ex candidato se manifestó a favor del diálogo, pero lamentó que “no hay un canal de comunicación” porque “hay varios grupos dentro del oficialismo”.
Estaremos peor
“Ganaron los malos”, “el cambio fue para peor”: así describió el Presidente la victoria de la oposición, tras anunciarse, que la Asamblea Nacional, que se instalará en enero, estará bajo control opositor, con 112 diputados sobre de 167.
De entrada, Maduro anunció que rechazará cualquier proyecto de Ley de Amnistía que le presente la nueva Asamblea, con el fin de liberar a opositores presos, incluyendo al dirigente Leopoldo López, condenado a 14 años por instigar las protestas del año pasado, y el alcalde metropolitano Antonio Ledezma, acusado de conspiración.
En acciones concretas, el jefe de la Asamblea Nacional saliente, Diosdado Cabello, confirmó que el oficialismo utilizará su mayoría que se extingue este mes para designar a 12 vacantes del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), un órgano al que la nueva Asamblea debe consultar sobre temas constitucionales. Analistas advirtieron que estas maniobras podrían ser la antesala de un conflicto de poderes que se agudizaría en 2016, cuando además se prevé una profundización de la crisis económica.
En tanto, Maduro le pidió ayer la renuncia a sus ministros para “renovar” el gobierno luego del revés electoral en los comicios legislativos del domingo. (Reuters-DPA)
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