CARAS CONOCIDAS. Disfuncional, la familia Muppet sigue vigente.
Pasaron 17 años desde la última incursión televisiva de los Muppets, un paréntesis gigantesco en el que la tribu creada por Jim Henson encontró refugio en el cine. A las películas les fue muy bien -en especial la coprotagonizada por Amy Adams y Jason Segel-, pero el hogar de los Muppets está en la pantalla chica. Las cinco temporadas del show producido por la británica ITV entre 1976 y 1981 constituyen una joya de la historia de la TV, por lo que cualquier intento implica saltar una vara altísima. En esa tarea se embarcó desde la semana pasada la cadena ABC y los primeros resultados son, cuanto menos, prometedores.
Detrás del flamante programa -“The Muppets”, sin más vueltas- aparece Bill Prady, uno de los padres de “The big bang theory”. Formó equipo con otro peso pesado: Rob Kushell, guionista y productor de infinidad de títulos, entre ellos “3rd Rock from the Sun”, “Grounded for life”, “American Dad!” y “Anger Management”. También escribió historias para Los Simpsons. Prady y Kushell respetaron lineamientos clásicos del micromundo Muppet, como el formato sitcom, los números musicales y las estrellas invitadas. Sobre ese esquema plantaron a los personajes y desarrollaron una nueva historia.
Miss Piggy es la conductora de un late show, heredera de la tradición que va de Johnny Carson a Jimmy Fallon, pasando por David Letterman y Jay Leno. Kermit (recordemos que ya no se permite decirle René) es el productor ejecutivo del programa y Fozzie (o Figueredo), partenaire de Piggy al aire, se enamora de una humana y debe ganarse la aprobación de un suegro de pocas pulgas. El resto del elenco se acomoda a la vuelta, con el agregado de la inquietante Denise, el nuevo interés romántico de Kermit. Es que la rana y Piggy rompieron su eterno noviazgo, por lo que las cosas están muy tirantes en el ambiente de trabajo. El día a día está contado con forma de falso documental, muy al estilo “The office”.
Elizabeth Banks y el grupo Imagine Dragons fueron los invitados del piloto. Gran pasaje: la banda le ofrece a Animal salir de gira con ellos y deja al más feroz de los bateristas sumido en la melancolía. En el segundo capítulo, junto a Josh Groban aparece el propio Jay Leno, toda una némesis para Piggy,
Al comando de los Muppets brillan los expertos formados en la escuela de Henson. Es la garantía de un show reactivado con ingenio y frescura, muy bien guionado y respaldado por la magia de una troupe incombustible.
Detrás del flamante programa -“The Muppets”, sin más vueltas- aparece Bill Prady, uno de los padres de “The big bang theory”. Formó equipo con otro peso pesado: Rob Kushell, guionista y productor de infinidad de títulos, entre ellos “3rd Rock from the Sun”, “Grounded for life”, “American Dad!” y “Anger Management”. También escribió historias para Los Simpsons. Prady y Kushell respetaron lineamientos clásicos del micromundo Muppet, como el formato sitcom, los números musicales y las estrellas invitadas. Sobre ese esquema plantaron a los personajes y desarrollaron una nueva historia.
Miss Piggy es la conductora de un late show, heredera de la tradición que va de Johnny Carson a Jimmy Fallon, pasando por David Letterman y Jay Leno. Kermit (recordemos que ya no se permite decirle René) es el productor ejecutivo del programa y Fozzie (o Figueredo), partenaire de Piggy al aire, se enamora de una humana y debe ganarse la aprobación de un suegro de pocas pulgas. El resto del elenco se acomoda a la vuelta, con el agregado de la inquietante Denise, el nuevo interés romántico de Kermit. Es que la rana y Piggy rompieron su eterno noviazgo, por lo que las cosas están muy tirantes en el ambiente de trabajo. El día a día está contado con forma de falso documental, muy al estilo “The office”.
Elizabeth Banks y el grupo Imagine Dragons fueron los invitados del piloto. Gran pasaje: la banda le ofrece a Animal salir de gira con ellos y deja al más feroz de los bateristas sumido en la melancolía. En el segundo capítulo, junto a Josh Groban aparece el propio Jay Leno, toda una némesis para Piggy,
Al comando de los Muppets brillan los expertos formados en la escuela de Henson. Es la garantía de un show reactivado con ingenio y frescura, muy bien guionado y respaldado por la magia de una troupe incombustible.








