16 Septiembre 2015
DESCARGO. Herrera advierte que su desempeño fue ejemplar. LA GACETA.
Conocida su renuncia, el ahora ex fiscal X de Instrucción, Guillermo Herrera, envió a LA GACETA un nota en la que explica los motivos de la misma. Este es el texto completo:
"Una grave enfermedad me impide seguir ejerciendo mis funciones, así como defender mi conducta en los asuntos que son de público conocimiento.
Afirmo que mi obrar ha sido regular; que el puñado de asuntos que se me endilgan como irregulares ha sido resuelto o confirmado por jueces, fiscales superiores, Cámara de Apelaciones y la Corte Suprema. Jamás he decidido allanamiento, cautelar o privación de libertad; en absolutamente todos los casos las decisiones han sido obra de los superiores. Sin embargo se omitió informar o investigar al respecto.
La desinformación nació de un grupo de personas que por intereses o pasiones inferiores han montado un ataque en mí contra, sistemático y malicioso. Existe interés del presidente del Colegio de Abogados de Tucumán en defender al mega estafador Rigourd, ya que es conocida su íntima amistad y sociedad Con el defensor Ahumada. Existe también en este grupo la lamentable presencia del presidente de la Corte de Tucumán que, en su afán de doblegar al Ministerio Público, ha prestado el apoyo de órganos del Poder Judicial. Y existe una coordinada relación de ambos con la periodista Irene Benito quien, en la búsqueda de un algún premio menor, ha informado de modo sesgado y con real malicia.
Nunca me hicieron conocer para mi defensa ni siquiera una foja de las miles que llevan escritas los miembros de este grupo, mientras que Benito es nutrida diariamente desde los despachos oficiales con copias de la totalidad de los actos que se van desarrollando.
He solicitado públicamente que se discuta uno por uno cada caso que se me imputaba. El grupo nunca aceptó el desafío, porque cada caso demostraba las siguientes verdades irrefutables: 1) que jamás hubo una decisión mía, sino que fueron obra de otros órganos superiores; 2) que esos superiores nunca fueron denunciados ni mencionados por el grupo; 3) que los casos denunciados refieren a asaltantes, estafadores y usurpadores, a los que he dado lucha sin cuartel; 4) que en ningún caso he perseguido a alguna víctima; 5) que el llamado “patrón de conducta” es una construcción falaz, ya que los casos fueron seleccionados por el grupo entre decenas de miles; 6) que la imputación acerca de adoptar medidas de carácter civil dentro de un proceso penal es una obscenidad legal, porque en el proceso penal la víctima está autorizada a solicitar medidas civiles; 7) que dichas medidas de naturaleza civil fueron decididas por otros jueces y jamás por suscrito; 8) que todas las declaraciones que me inculpan provienen de imputados a los que he comprobado su responsabilidad penal, y son presentados a la opinión pública como testigos imparciales.
En suma, los pequeños móviles del grupo han terminado sirviendo de excusa para la defensa de reconocidas bandas de robo organizado, de usurpadores y de mega estafadores.
Mi estado de salud me impide ejercer personal y plenamente mi defensa, pero terminaré demostrando que he protegido a la sociedad tucumana y que mis denunciantes han sido funcionales a la delincuencia en Tucumán".
N. de la R.: LA GACETA ratifica la tarea periodística desarrollada por la periodista Irene Benito, quien ha investigado este caso con los debidos recaudos que la profesión exigen. En reiteradas oportunidades LA GACETA ha requerido la intervención de otras fuentes que no siempre han respondido a la requisitoria.
"Una grave enfermedad me impide seguir ejerciendo mis funciones, así como defender mi conducta en los asuntos que son de público conocimiento.
Afirmo que mi obrar ha sido regular; que el puñado de asuntos que se me endilgan como irregulares ha sido resuelto o confirmado por jueces, fiscales superiores, Cámara de Apelaciones y la Corte Suprema. Jamás he decidido allanamiento, cautelar o privación de libertad; en absolutamente todos los casos las decisiones han sido obra de los superiores. Sin embargo se omitió informar o investigar al respecto.
La desinformación nació de un grupo de personas que por intereses o pasiones inferiores han montado un ataque en mí contra, sistemático y malicioso. Existe interés del presidente del Colegio de Abogados de Tucumán en defender al mega estafador Rigourd, ya que es conocida su íntima amistad y sociedad Con el defensor Ahumada. Existe también en este grupo la lamentable presencia del presidente de la Corte de Tucumán que, en su afán de doblegar al Ministerio Público, ha prestado el apoyo de órganos del Poder Judicial. Y existe una coordinada relación de ambos con la periodista Irene Benito quien, en la búsqueda de un algún premio menor, ha informado de modo sesgado y con real malicia.
Nunca me hicieron conocer para mi defensa ni siquiera una foja de las miles que llevan escritas los miembros de este grupo, mientras que Benito es nutrida diariamente desde los despachos oficiales con copias de la totalidad de los actos que se van desarrollando.
He solicitado públicamente que se discuta uno por uno cada caso que se me imputaba. El grupo nunca aceptó el desafío, porque cada caso demostraba las siguientes verdades irrefutables: 1) que jamás hubo una decisión mía, sino que fueron obra de otros órganos superiores; 2) que esos superiores nunca fueron denunciados ni mencionados por el grupo; 3) que los casos denunciados refieren a asaltantes, estafadores y usurpadores, a los que he dado lucha sin cuartel; 4) que en ningún caso he perseguido a alguna víctima; 5) que el llamado “patrón de conducta” es una construcción falaz, ya que los casos fueron seleccionados por el grupo entre decenas de miles; 6) que la imputación acerca de adoptar medidas de carácter civil dentro de un proceso penal es una obscenidad legal, porque en el proceso penal la víctima está autorizada a solicitar medidas civiles; 7) que dichas medidas de naturaleza civil fueron decididas por otros jueces y jamás por suscrito; 8) que todas las declaraciones que me inculpan provienen de imputados a los que he comprobado su responsabilidad penal, y son presentados a la opinión pública como testigos imparciales.
En suma, los pequeños móviles del grupo han terminado sirviendo de excusa para la defensa de reconocidas bandas de robo organizado, de usurpadores y de mega estafadores.
Mi estado de salud me impide ejercer personal y plenamente mi defensa, pero terminaré demostrando que he protegido a la sociedad tucumana y que mis denunciantes han sido funcionales a la delincuencia en Tucumán".
N. de la R.: LA GACETA ratifica la tarea periodística desarrollada por la periodista Irene Benito, quien ha investigado este caso con los debidos recaudos que la profesión exigen. En reiteradas oportunidades LA GACETA ha requerido la intervención de otras fuentes que no siempre han respondido a la requisitoria.
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