17 Agosto 2015
BUENOS AIRES.- Como después de cada elección presidencial, un manto de interrogantes se abrió en torno al futuro de Elisa Carrió. Esta vez, la diputada volvió a anunciar que su ciclo está cumplido y que terminó el tiempo de dedicarse a denunciar la corrupción. Después de dejar esa declaración a dirigentes y militantes se fue de vacaciones a EEUU y México, donde descansará junto a su hijo y a su nieto. Ya sin la carga de cosechar votos, ahora se dedicará a hacer campaña por Mauricio Macri y Gabriela Michetti. Tiene en la mira a uno de sus enemigos predilectos: Aníbal Fernández. Anunció que si Aníbal es electo gobernador va a tener que irse del país. “Después de 20 años de anunciar y denunciar, lo que es una vida muy difícil, fui liberada -expresó a la militancia-. Voy a ayudar y estar al lado de la fórmula, pero he dejado muchas cosas en el camino y ahora quiero estar rodeada de mis hijos”. (perfil.com)
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